En el pasado E3 Bethesda nos ofreció una gran conferencia en la que pasó desapercibido un título que probablemente no deberia haberlo hecho tanto: 'The Elder Scrolls Legends', un juego de cartas basado en el carismático universo RPG del que por entonces poco se sabía, salvo que tenía más influencia de 'Magic' que del rey del género hoy en día, 'Hearthstone'. Probablemente se trate de una decisión de diseño acertada, y es que la acesibilidad del juego de Blizzard es dificilmente igualable, con lo que Bethesda probablemente apunte a un público diferente, con ganas de profundizar, ya que a priori, 'TES Legends parece más complejo. Sin embargo, la cuota de mercado de 'Hearthstone' es enorme, y a pesar de haber pasado por un momento complicado en los últimos meses por culpa de un metajuego complicado y muy hostil para todos los jugadores, Blizzard parece decidida a renovarlo claramente con la llegada del formato Estándar y la expansión Susurros de los Dioses Antiguos.
Ese momento pareció adecuado para que llegara el juego de Bethesda -de hecho estaba previsto que ya estuviera entre nosotros-, pero tendrá que luchar contra otros contendientes además como 'Magic Duels: Origins' o 'Hex: Shards of Fate'. Es un género minoritario pero muy competitivo, pero estas son las credenciales de 'The Elder Scrolls Legends' para hacerse un hueco.
Profundizando donde 'Hearthstone flaquea: el modo Historia
Mientras Blizzard no da apenas importancia en sus modos para un jugador, algo que no va más allá de las aventuras cuando estas aparecen, 'The Elder Scrolls Legends' va a aprovechar al máximo la magia de Tamriel, sus lugares y sus personajes. Primero hay que elegir entre cinco mazos prediseñados a los que más adelante, según se va progresando, se pueden hacer cambios para hacerlos más competentes, todo mientras el jugador descubre un nuevo episodio del mundo de 'The Elder Scrolls', aunque se desconoce la trascendencia del mismo.
Un fuerte componente de PVE es algo que ya ha explorado 'Hex: Shards of Fate', del que se dice que es incluso superior que su PVP, pero al fin y al cabo, en 'The Elder Scrolls Legends' tomará más el papel de introducción al juego competitivo, sobre todo en la Arena. Sin embargo habrá sorpresas, como la posibilidad de tomar decisiones en determinados momentos que nos otorgarán unas u otras cartas como recompensa.
¿Cómo se juega?
Llegamos a donde 'The Elder Scrolls Legends' tiene que destacar. Antes de crear nuestro mazo habrá que elegir dos de entre cinco atributos: Fuerza, Inteligencia, Agilidad, Resistencia y Voluntad. Dependiendo de la combinación elegida, el mazo tomará automáticamente su clase, como Guerrero, Arquero, Asesino, Cruzado, etc... y esos atributos marcarán también la estrategia para ganar. Por ejemplo la Fuerza lleva a jugar de manera más directa, la Magia se basa en el uso de hechizos mientras que sus criaturas son débiles, la Resistencia trata de desgastar los recursos del enemigo...
Cada partida comienza con tres cartas y un punto de magia igual al turno en el que nos encontremos, teniendo cada carta un coste de magia además de puntos de vida y de ataque. Hasta aquí nada nuevo, pero 'The Elder Scrolls Legends' implementa el sistema de dos calles que lo hace diferente: podemos colocar una carta en una calle ya ocupada por el rival o bien ponerla en la calle vacía para que dure más tiempo en mesa, algo que según el estudio se ha hecho para "eliminar la frustración de sacar una carta y que el enemigo te la destruya inmediatamente". Sin embargo, los efectos de las calles son diferentes, ya que lo mismo pueden ofrecer protección a nuestras cartas que suponer un peligro extra al estar situadas cerca de un cementerio y se alcen los no muertos.
Las calles no son el único punto diferenciador de 'The Elder Scrolls Legends', porque también están los turnos interrumpidos. Por cada 5 puntos de salud que pierda nuestro personaje se romperá una de las runas alrededor del mismo y robaremos una carta que si tiene la habilidad Profecía podremos jugar inmediatamente y sin coste de magia. Esta profecía causará un efecto diferente en cada carta, y obviamente hay que elegir cartas de Profecía que encajen en la estrategia de nuestra baraja, ya que algunas causan daño a los demás esbirros, otras ganan ataque, otras curan a un personaje, etc...
'The Elder Scrolls Legends' contará con varios modos de juego de inicio, con Historia y partida competitiva como dos de las más importantes, pero será la Arena la que parece será el más divertido y profundo. Comenzará con la elección de clase y de las 30 cartas que formarán el mazo, y podrá jugarse tanto frente a la IA como frente a otros jugadores. Si elegimos jugar contra la IA nos vamos a enfrentar a ocho rivales y un jefe, pudiendo perder 3 partidas como máximo, mientras que si jugamos contra oponentes humanos serán 7 las partidas que disputaremos. Más atractivo aún es el hecho de que las recompensas de la Arena serán mejores que las de la Historia o las partidas versus.
Las opciones de triunfo de 'The Elder Scrolls Legends'
Es imposible hablar de las opciones que tiene este título para ganarse su cuota de jugadores sin hablar de 'Hearthstone' y sus inminentes cambios. El juego de Blizzard comienza una nueva e ilusionante etapa que hará que se juegue tanto o más que nunca, pero 'The Elder Scrolls Legends' acierta apuntando a una jugabilidad diferente, más profunda, pero a priori también menos accesible, así como a un fuerte componente PVE, que es donde 'Hearthstone' no compite. Las primeras impresiones de esta beta serán cruciales, así como las opiniones de los jugadores más habituales de juegos de cartas, siempre prestos a probar nuevos lanzamientos. También parte de la magia del universo 'The Elder Scrolls', con millones de fans en todo el mundo, y eso al menos ya es una gran cantidad de gente que probablemente se preste a echarle el guante.