Los gigantes de la simulación futbolística vuelven a verse las caras este año con importantes novedades. Un choque de trenes que muchos usuarios esperan con fervor tras cada lanzamiento para ver como EA y Konami se enseñan los dientes. Tal vez por estas razones, no sea demasiado osado hacer una valoración general las características anunciadas de 'FIFA 14' y 'Pro Evolution Soccer 2014' aún con la guerra de franquicias en ciernes.
Uno apuesta por la jugabilidad, el otro por el equilibrio
Por un lado, Electronic Arts ha centrado su estrategia de desarrollo en romper unas cuantas barreras entre la jugabilidad y la realidad. Gracias al motor Ignite Engine, tanto el balón como los jugadores han sido dotados de nuevas físicas y animaciones que añaden un factor de imprevisibilidad extra a cada jugada para desafiar la habilidad del usuario con los controles. Este efecto provoca que la mayoría de los partidos se desarrollen en el centro del campo, obligandonos a jugar al toque. Esta novedad en la jugabilidad puede verse como un arma de doble filo ya que cuanto más realismo hay más lento se vuelve el juego. Para haceros una idea, al probar el juego la primera vez tuvimos la sensación de estar en un pozo de alquitrán. Ignite obliga a los jugadores a desarrollar su capacidad de estrategia y hace que los partidos pierdan fluidez y dinamismo.
'Pro Evolution Soccer 2014', por otra parte, ha apostado por desarrollar el aspecto gráfico y la jugabilidad al mismo tiempo con FOX Engine. Esta entrega no cuenta con el mismo número de animaciones y físicas que 'FIFA 14', algo que aquellos usuarios a los que les guste disfrutar del auténtico frenetismo del terreno de juego, seguramente agradecerán. Elementos como el césped, la afición, el estadio y los propios jugadores, han recibido un lavado de cara para darles, no sólo un aspecto mucho más realista sino también una serie de funciones in-game muy interesantes. La respuesta de los jugadores se verá bastante comprometida dependiendo de si jugamos en nuestro campo o fuera de casa.
Una dura competencia
En resumen, a grandes rasgos nos encontramos ante un 'FIFA 14' que ha sacrificado la velocidad de juego en aras de un mayor realismo, dejando de lado los gráficos, y un 'Pro Evolution Soccer 2014' que está tratando de recuperar las claves que hace tiempo le llevaron a coronarse como el mejor simulador de fútbol, apostando por un desarrollo equilibrado entre la jugabilidad, el realismo y los gráficos. Obviamente estamos, como aquel que dice, en pretemporada y las versiones que ha podido probar todo el mundo de ambos juegos se encuentraban en fase beta, por lo que nos resulta difícil inclinarnos hacia un lado u otro. De lo que podemos estar seguros es de que, este año, existe una verdadera competencia entre 'FIFA' y 'PES'.