El 24 de Junio 2019 | 12:00
Nintendo ha apostado por una presentación especialmente fuerte durante la celebración del E3 2019. Una que ha paliado el excesivo contenido de 'Super Smash Bros. Ultimate' del pasado año —al que se le ha dedicado, de igual forma, un importante protagonismo— para ofrecernos un abanico de títulos y posibilidades especialmente amplio.
Así lo ha hecho con anuncios como el de 'Fire Emblem: Three Houses'. Uno de los grandes presentes de la feria del que no se ha revelado demasiado pero que ha tenido un enorme espacio en lo que no vemos tras las cámaras principales. Y es que el juego ha mostrado muchas de sus cartas a través del Nintendo Tree House. Las repasamos a continuación:
Un cambio de paradigmas
Que 'Fire Emblem: Three Houses' iba a ser un nuevo exponente dentro de la saga no era ningún secreto. Nintendo e Intelligent Systems han trabajado con fuerza en él para lograr que la franquicia tome un nuevo cariz ahora que cambia de plataforma y es menester asegurar que no solo lo han logrado, sino que este nuevo título llega con la fuerza de un huracán.
Y con muchas influencias externas también, porque 'Fire Emblem: Three Houses' partirá de puertos conocidos pero nos embarcará en una aventura que no hemos visto nunca dentro de los muros de la saga de rol táctico de Nintendo. Y es que esta nueva entrega rompe con el sistema establecido en muchos puntos. El primero será en una puesta en escena que irá mucho más allá de integrar pequeñas escenas y/o conversaciones entre las batallas.
Ahora el sistema social ocupará una gran parte del juego. Y es que el mismo nos obligará a posicionarnos en una de las tres casas (de ahí el nombre) de una academia en la que impartiremos clases como profesores o profesoras. Contaremos con una primera parte del juego donde las batallas serán más anecdóticas, potenciando especialmente ese ambiente estudiantil que nos mantendrá ocupados yendo de un lado a otro del monasterio que habitamos, hablando con el enorme plantel del juego y mejorando nuestras conexiones. Algo que será esencial cinco años más tarde, cuando nos encontremos posicionados en una de las tres casas.
La propia Nintendo asegura que no seguirá el formato de 'Fire Emblem Fates', por lo que viviremos tres historias diferentes según a qué lado apoyemos. Algo que repercutirá a este punto anterior. Ya que deberemos enseñar a nuestros alumnos y orientarlos. Superar un examen será la clave para cambiar de clase, por lo que contaremos con una enorme flexibilidad en ese sentido, contando incluso con la posibilidad de obtener diferentes promociones para un solo personaje.
Un punto que, por supuesto, tendrá un efecto directo sobre su sistema de batalla, que se actualiza para adaptarse a este formato tan orgánico que pretende presentar el título. Uno que prescindirá del clásico triángulo de armas y se centrará en el uso de habilidades y resistencias para decidir el transcurso de la batalla, incorporando también una mecánica especialmente similar a la Rueda de Mila de 'Shadows of Valentia', con la que podremos retroceder en el tiempo de forma muy limitada si nos equivocamos al dar órdenes.
Todo apunta a que 'Fire Emblem: Three Houses' pretende convertirse en uno de los abanderados de Nintendo Switch este año. Un título que partirá de un sistema temporal muy similar al que porta la franquicia 'Persona' y que nos permitirá definir un ejercito completamente personalizado en la primera parte del juego —teniendo la posibilidad incluso de reclutar a personajes de otras casas si subimos nuestra afinidad lo suficiente— para desarrollar una segunda parte que apunta a querer jugar con lazos emocionales, un argumento más completo que nunca y una jugabilidad renovada a la que resulta difícil no ponerle buena cara. Saldremos de dudas el próximo 21 de julio, aunque todo apunta a que 'Three Houses' tiene un gran sitio en la franquicia a la que representa.