Uno de los secretos mejor guardados de Sony, su as en la manga y estandarte de los verdaderos títulos next gen. No es de extrañar que nuestra atención se fijara nada más entrar en la MGW sobre misterioso 'The Order: 1886'. Tuvimos la oportunidad de probar la demo de uno de los fragmentos de los vídeos promocionales, unos segundos que nos supieron a verdadera gloria. Bajo la piel y el engalanado traje de Sir Galahad, comandamos una pequeña incursión en territorio enemigo, a través de la lúgubres y descorazonadoras calles de un Londres victoriano steampunk. Disparamos nuestro "fusil termita" sobre los rebeldes de Whitechapel, pero no tuvimos oportunidad de enfrentarnos contra los verdaderos protagonistas del juego.
En la E3 descubrimos la existencia de unos enemigos sobrenaturales bastante familiares. Licántropos, humanos con características morfológicas propias de los lobos y con un asombroso parecido a los de la saga 'Underworld'. Unas criaturas terroríficas que encajan a la perfección con la atmósfera cargada de polvo y tonalidades frías que inunda cada escenario. Las mecánicas de juego recuerdan bastante a las de Gears of War, Tomb Raider y Uncharted, aunque teniendo como referencia de desarrollo títulos tan excepcionales, nuestras expectativas sobre el producto final aumentan considerablemente.
Un hype muy justificado
Un Triple A se caracteriza por entrar al usuario por los ojos, anticipándose a su interés por el contenido real. El hype se apoya sobre la vacua promesa de unas ilusiones de las que no se hacen responsables. Teniendo esto en cuenta, puede que 'The Order: 1886' sea una de esas raras joyas sobre las que la publicidad no puede o no necesita recrearse para llamar nuestra atención. Resulta difícil imaginar spots publicitarios que superen la calidad que muestran los gameplays que hemos visto hasta ahora. Las cinemáticas empiezan a sabernos a poco y nuestros calendarios están marcados sobre febrero del año que viene.
Los primeros minutos de juego nos enganchan con la atmósfera anteriormente citada. El aire está viciado, húmedo y lleno de partículas de polvo que recuerdan a la ambientación de Whitechapel en 'From Hell'. El cielo, cubierto de forma perpetua por un manto de nubes y humo procedente de las chimeneas de las casas, arroja una inconfundible luz de tonalidades azules propia de los amaneceres lluviosos de una ciudad costera. Los reflejos dinámicos sobre las armas, los personajes y el escenario aumentan la sensación de realismo de sus texturas resaltando imperfecciones propias de la vida misma. Por último, las animaciones de los personajes, al igual que la de otros elementos decorativos del escenario, son muy creíbles y naturales.
Enfrentamos el fuego con fuego
Todo esto unido a la posibilidad de enfrentarnos contra una temible bestia con las dimensiones de un armario de IKEA, nos mantiene en una constante tensión capaz de partir el mando por la mitad. Por suerte, tendremos a nuestra disposición un colección de armas de lo más variopinta y letal sobre las que recae el carácter steampunk del título. Junto a los 'fusiles termita' ya mencionados, pistolas, rifles electrificados y ballestas nos ayudarán a combatir la amenaza sobrenatural mientras investigamos sobre su origen, y si sufrimos alguna herida en este proceso siempre podemos recurrir a un potente regenerador inyectable.
Es una pena que 'The Order' sólo vaya a poder disfrutarse en PlayStation 4, limitando la experiencia gráfica a las insuficientes características técnicas de la consola. Su lanzamiento oficial está previsto para el 20 de febrero del año que viene, con exclusividad sobre la plataforma de Sony. Aquellos usuarios de otros sistemas deberán ver el lado positivo de este lanzamiento, y es que 'The Order' no sólo va a ser un título excepcional sino que también va a marcar un camino lleno de posibilidades para otros proyectos.