En nuestra manos hemos vuelto a tener las mortíferas habilidades del Agente 47, el 'Hitman' por excelencia. En esta ocasión pudimos jugar 5 misiones de la campaña, una de las cuales ya os avanzamos meses atrás. Lo primero que hay que decir es que, a falta de ver la versión final, el resultado parcial está mostrándose muy apetecible. Sin duda el motor Glacier 2 de IO Interactive hace un gran trabajo y entrega unos escenarios dignos de ver.
De aquí para allá repartiendo muerte sin piedad
'Hitman: Absolution' nos traslada a numerosos escenarios de naturaleza realmente variada. Ya sea floridos acantilados que esconden una casa de lujo, un hotel con estilo muy Texano, las calles de Chinatown o una biblioteca abandonada y sus alrededores. Todo tiene cabida en el juego que además une a la perfección cada uno de ellos. Las misiones pasan normalmente por varias fases, a medida que avanzamos tenemos puntos de guardado, si la dificultad seleccionada lo permite. Podemos empezar en un lugar neutral, donde nadie nos ve como una potencial amenaza y de repente atravesar un área solo para empleados que hacen saltar la alarma si nos ven por allí sin el disfraz adecuado.
Para llevar a cabo este difícil trabajo 47 cuenta con todo tipo de herramientas. Podemos ir con nuestro traje y acabar con cualquier enemigo antes de que noten nuestra presencia, o liarnos a tiros con todos, cosa no recomendable. Por otro lado, algo mucho más elegante es ir disfrazándonos acorde con la zona en la que estemos, infiltrándonos entre los vigilantes y personal enemigo que aún así dudará de nosotros a menos que usemos nuestro instinto. Este se irá gastando a medida que lo usemos para ocultar el rostro o prever los movimientos de los que nos rodean.
¿Crees poder hacerlo sin ayudas?
Como decimos se trata de una característica que se pueden modificar según la dificultad, que en los modos más altos hace que no se regenere, o simplemente que no podamos usarla. Aparte de esto, también veremos como los puntos de guardado de las misiones se van restando, pudiendo llegar hasta cero. Esto es solo apto para los más expertos y los puritanos que prefieran hacerlo todo "a pelo" sin ningún tipo de ayuda. Desde luego es un reto que merece la pena experimentar.
Aparte de nuestras habilidades intrínsecas, los escenarios están cargados de todo tipo de elementos y decoración. Será imposible ver un área que nos resulte vacía. Está todo muy bien diseñado, cada interior y exterior goza de detallas casi ilimitados que ofrecen un realismo inusitado. No todo lo que tengamos a la vista será utilizable, obviamente. Bien es cierto que la cantidad de objetos para interactuar podría ser mayor, pero en general no podemos quejarnos. Un cenicero, una estatuilla o una simple e inofensiva taza de café puede servir para arrearle a un guardia en la cabeza o simplemente para lanzar el objeto distrayéndole para pasar desapercibido o acabar con él en un punto concreto.
En cuanto a estas ayudas que vemos repartidas por el mapa, hay que decir que algunas no tienen mucho sentido ni contexto que explique su localización. Por ejemplo en la misión de Chinatown veremos unas cargas de explosivo plástico tiradas cerca de la basura que servirán para hacer volar cualquier cosa, o un rifle de francotirador en el piso franco de un mero camello de barrio. Al margen de estos detalles que resultan algo sospechosos, todo lo que nos rodea suele estar bien justificado y nos podrá salvar la vida en más de una ocasión.
Te mato con mi taza de té
Las armas (convencionales o improvisadas) que vayamos encontrando por el camino podremos guardarlas en nuestro inventario. Además siempre que las usemos para acabar con alguien, podemos recuperarlas. Esto será de gran ayuda si por ejemplo vemos dos enemigos juntos de espaldas a nosotros, en cuyo caso podemos lanzar un cuchillo a uno y ante el espanto del otro aprovechar para sacar una pistola y volarle la cabeza o sacar el cable de fibra y estrangularle. El repertorio de objetos letales es bastante alto. Cuchillos de cocina, bisturís, tijeras, destornilladores, palos de golf y muchos más aparte de los mencionados antes. Es realmente divertido dejar cao a un tío usando un busto en miniatura y después liarse a lanzar objetos punzantes como si de Altair o Ezio se tratara.
Aparte de esto, nuestro personaje va ganando habilidades pasivas según consigue objetivos y completa retos. Cada vez que obtenemos un nuevo nivel se nos informa de que podemos realizar cierta acción de forma más rápida, con más efectividad, mayor alcance o menor retroceso. Por ello, a medida que avanzamos en la trama tendremos cualidades más mortales si cabe. Para mejorar esto es muy recomendable el modo Contratos, al que también tuvimos acceso. Se trata de la modalidad multijugador que depende de la propia comunidad de jugadores. Estos juegan en un mapa de la propia campaña pro de forma libre, sin los objetivos de la historia. Selecciona las armas que desea, se pone el traje que prefiere y asesina a ciertos objetivos. Al abandonar la zona queda establecido un contrato que pone como requisito lo que esta persona haya hecho. Esto significa, que si nos disfrazamos de cocineros y matamos a 2 guardias concretos de una casa con unas tijeras y un extintor, esto será lo que el contrato nos pida. Si cumplimos los objetivos en mayor o menor medida, obtendremos unas cantidades de dinero más o menos altas.
Esto queda registrado a modo de ranking que irá mostrando las puntuaciones de los jugadores, viendo quienes son los asesinos más letales de la comunidad. Además de jugar los contratos de otro, podemos crear los nuestros, compartirlos y probar cosas nuevas. Según desbloqueamos nuevas armas y trajes podemos hacer contratos cada vez más difíciles y alocados. En muchas ocasiones presenta un reto mayor que la propia campaña y resulta en su conjunto un modo divertido, adictivo y sobre todo un entrenamiento que se agradecerá en los niveles más exigentes de la aventura.
Las expectativas están muy altas
Con todo, esperamos con ansia este título de IO Interactive y Square Enix que nos hace recordar los mejores momentos que nos ha dejado la saga y promete ser aún mejor. 47 está a la vuelta de la esquina. Llegará a las tiendas el 20 de noviembre para PC, Xbox 360 y PS3.