El 31 de Mayo 2016 | 23:36
Games Workshop, señores y propietarios del universo `Warhammer´, hace un par de años que no levantan cabeza. Este empresa británica, nacida de los juegos de mesa y el modelismo, posee muchísimas franquicias dentro del universo Warhammer, con versiones menos conocidas como puede ser Space Hulk, Blood Bowl, o Gothic Armada.
Los buenos resultados los lanzaron a la cotización en bolsa al calor de espléndidos datos previos 2005, momento en el que sufrió un brutal descenso, desde esa fecha hasta 2013 lucho muy durante para recuperar los 884 puntos en bolsa, llegando a los 800, pero en enero de 2014 sufrió un nuevo batacazo. Entonces llegaron las excusas: "la fantasía no estaba de moda" o "las copias y la piratería china"...
La piratería, de hecho sí es un problema para 'Warhammer'. No hablamos del aficionado que modificando moldes logra crear una réplica miniatura al día; en este caso, China, como no, lograba inundar cientos de webs con moldes en resina, que para nada desmerecían los originales, a precios sin competencia, cajas que podían costar 30 euros, ahora por menos de 10 se podían montar. El hobby es per sé caro, la piratería no daba tregua, la empresa se había convertido en una maquinaria tan enorme, que la innovación no estaba en su vocabulario, y con el miedo a nuevos mercados ralentizó también su avance. Todo esto lleva a una crisis evidente, y quizá se por este motivo, por el que en los últimos años hemos podido ver tantísimos videojuegos relacionados con Warhammer, algunos con más pena que gloria, como puede ser `Warhammer Quest´, u otros grandes aciertos como `Vermitide´ o `Warhammer Total War´. Todos estos títulos punteros siempre han ido apoyados por adaptaciones virtuales de sus clásicos de tablero ya mencionados que, sin llegar a destacar en el marcado, logran unos números bastante decentes.
Actualmente contamos con la fase beta del `Eternal Crusade´, el reciente lanzado `Gothic Armada´ y este Total War, títulos bastante adecuados que se suman a la galardonada saga `Dawn of War´, con su tercera entrega.
Puede que este sea el motivo por el que desde su descalabro a inicios del 2014, 493 puntos, actualmente se logren mantener en 498 puntos básicos. Con unas ventas de juegos de mesa estancadas está claro que el futuro es digital, y no tardaremos en ver más adaptaciones nuevas como `Mordheim´ (que ya existe) o Necromundia bajo las licencias de Games Worshop.
Aun así, analizando los números, necesitan que sus grandes títulos se asienten y marquen tantos en sus lanzamientos y que sus nuevas apuestas logren pasar del aprobado para convertirse en sagas decentes y entretenidas. Lo que queda claro es que su apuesta va en ese línea de productos en diferentes campos de entretenimiento, sino es por convicción, desde luego es lo que piden sus resultados económicos. Como jugador de Warhammer, sin duda alguna, me he pasado y aficionado a sus títulos digitales, en detrimento de juegos de miniaturas y juegos de mesa, que aparte de caros, se hacían demasiado densos para alguien que no se puede permitir días y días enteros de partidas.
Así mismo esperemos que alguna vez Forge World pase a ser oficial y que la compañía acabe rechazando su modelo de negocio, a una idea más de franquicia que de tienda propia o incluso no descartamos la desaparición de una tienda física, donde, sin apenas torneos o incentivos, la mera venta de unidades deja de tener sentido en el mercado web.