El 16 de Agosto 2016 | 17:00
El 29 de noviembre será un día clave para Square Enix, pues se lanzará al mercado, tras un retraso de última hora, 'Final Fantasy XV' para PS4 y Xbox One. Llevamos mucho tiempo esperando este juego, concretamente desde que se anunció al mismo tiempo que 'Final Fantasy XIII bajo el nombre de 'Final Fantasy Versus XIII'.
Ahora es una entrega independiente, que no forma parte de Fabulla Nova Crystalis; algo totalmente diferente a lo que hemos jugado en la serie, se supone. Hemos podido probar una versión casi final del juego en una intensiva sesión a puerta cerrada que sumó más de cuatro horas, en las que hemos podido comprobar cómo funciona el juego y sus principales novedades para la serie.
Un mundo que crece en sensaciones y dudas
La build que pudimos probar arrancaba con la presentación del mundo: Noctis es un príncipe que se va a casar con una princesa de otro reino y el punto de partida es simplemente montarse en coche con los compañeros de la Guardia Real para llegar a su encuentro. Entre medias se estropea el coche, no podía ser tan fácil, mientras suena una genial versión de "Stand By Me" cantada por Florence and the Machine. Así se recrean los sucesos del Episode Duscae, mientras hacemos unas misiones para matar el rato. Una vez reparado el coche, llegamos a una ciudad costera en la que pasamos para poco después descubrir que nuestro reino ha sido invadido mientras estábamos fuera.
Durante los tres episodios que hemos podido jugar notamos que el avance del juego empieza de una forma muy pausada, hasta el punto que da la impresión de que no va a ser un gran juego. Eso por suerte sólo es una mera introducción para descubrir el abierto mundo con sus misiones y el Regalia.
En el término más clásico del mundo abierto tendremos misiones para matar monstruos, conseguir más materiales, dinero, experiencia y hasta objetos clave. Somos plenamente conscientes de la fuerte tendencia del mercado al entorno del mundo abierto, y Square Enix comprende los fundamentos básicos logrando que funcionen. El principal problema que le vemos al mundo abierto es que muchas veces dependemos del Regalia tanto que llega incluso a banalizar el mundo cuando te deja poner el piloto automático y a esperar a que llegues a tu destino para casi todas las situaciones en las que hay que ir a un lugar lejano.
Y es una pena que el Regalia haga tan fácil el desplazamiento, porque el arte del juego es bastante consistente. Atrás quedan los absurdos diseños de personajes recargados, pasando a versiones más creíbles de los seleccionables. Los enemigos no se quedan atrás, desde los más pequeños con una buena cantidad de detalles, hasta el Bégimo de varios metros, con un cuidado visual que indica que está tuerto en un ojo.
Varios personajes que forman uno mayor
A diferencia de otros juegos de rol clásicos, desde el inicio vamos a contar con un equipo de cuatro personajes que van a ser fijos, en el que sólo tenemos un control directo sobre Noctis. Sobre su personalidad, poco se puede decir porque son tropos del género: el protagonista, el fuerte, el serio y el juvenil, pero por suerte la suma total es mayor y crean una gran personaje coral con sus conversaciones triviales cuando no están en combate, y en las escenas cinemáticas. Dudosamente un personaje en particular se puede convertir en el favorito de alguien, pero la combinación de éstos resulta más agradable de lo que aparentan en primer lugar.
La demo Platinum no representa bien el juego
Y ahora hablemos del sistema de combate, que resulta mucho mejor de lo que pudimos ver en la Platinum Demo. Se nota que esa demo era muy publicitaria para hacer que la gente se hiciese con Rubí, mientras trataban de sacar pecho de avances técnicos con los efectos visuales. Sin embargo, ahí todavía se transmitía mal el sistema de combate.
Donde reluce el combate del juego es cuando estamos con Promto, Gladiolus e Ignus, cada uno con su aportación al enfrentamiento y ataques especiales. El combate es un poco primario durante las primeras horas contando sólo con un par armas básicas, pero conforme las desbloqueamos, se añade la estrategia de saber cuales usar en qué momento, cuales equipar. Tiene lo que se le puede pedir a un juego de rol moderno, con un combate fluido que funciona sobre todo en los jefes de gran tamaño o contra grupos de numerosos enemigos que es cuando la sensación de riesgo se intensifica.
Hemos tratado de ser breves en este primer avance, porque queda mucho contenido de 'Final Fantasy XV' que os mostraremos en los próximos días. Por ahora, podemos decir que las cuatro horas que hemos estado con el juego han sido intensas y no se hicieron aburridas más allá de las partes de campo a través sin el Regalia, que por suerte son pocas. El sistema de combate ha evolucionado mucho desde el primer contacto en el Episodio Duscae, y nos ha parecido más que correcto una vez se desarrolla el juego, así como la premisa del juego que va creciendo poco a poco tras una primera hora en la que no parece que hagas nada importante en la historia.