Hoy ha sido un día especial para todos aquellos que formamos parte del sector de los videojuegos en nuestro país, y es que hoy arrancaba en Barcelona la decimotercera edición de Gamelab. Aunque, la realidad es que en estas dos primeras líneas ya hay una pequeña mentirijilla, y es que, en esta ocasión, Gamelab 2017 no se está celebrando en la ciudad condal, sino que se ha desplazado al área metropolitana, concretamente al Hotel Hesperia Tower que se encuentra en L'Hospitalet de Llobregat, un espacio que parece adaptarse muy bien a lo que busca el evento.
Pues bien, a las 8 de la mañana me he levantado con cierta expectación, y con muchas ganas de ver que nos deparaba la edición de este año. Me vestí, me tomé mi café con leche y me preparé mi mochila con elementos indispensables como un bloc de notas, bolis, la tablet y demás. Por suerte, antes de salir por la puerta me acorde que hoy uno de los ponentes era Sam Lake de Remedy, y tuve la fantástica idea de echar también en la mochila las carátulas de 'Alan Wake' y 'Quantum Break' dos juegos por los que siento una especial predilección. Y a modo de spoiler... ¡menos mal que me acorde!
Tranquilamente y aprovechando que nos habíamos levantado con un día nuboso, decidí ir caminando hasta el hotel donde se celebra Gamelab 2017, el cual me queda a unos 40 minutos andando desde casa. Mientras iba hacía allí pensaba en como estuvo organizado el último año que yo pude asistir, 2013, y me montaba mis películas sobre cómo sería en esta ocasión. Cuando llegué al recinto, lo primero que me encontré es una pequeña cola para recoger mi acreditación, algo que me llevo no más de 10 minutos, fue entonces cuando baje unas escaleras y llegue a la zona denominada Indie Hub. Allí, las desarrolladoras independientes de nuestro país nos muestran cuáles son sus proyectos actuales, y encontramos títulos como 'Dynasty Feud' de Kaia Studios o, el más conocido, 'Raiders of the Broken Planet' de Mercury Steam.
Espacio para desarrolladores
Lo cierto, es que a título personal me ha gustado mucho ver que todo el espacio se destina a que sean estos estudios quienes nos muestren sus proyectos, poder charlar con ellos y conocer un poco los entresijos de sus propuestas. Una apuesta que dista mucho de lo que era en 2013, donde predominaban consolas PS3 y Xbox 360 con juegos que en su mayoría ya estaban en el mercado. Aun así, lo cierto es que había poco espacio para toda la cantidad de gente que se encontraba en el lugar, y digamos que no era todo tan accesible como me hubiera gustado, veremos si cambian las cosas los próximos días.
Variedad y calidad de ponentes
Si bien es cierto que esa faceta de probar nuevos juegos y hablar con desarrolladores es divertida, interesante y gratificante, para muchos el gran aliciente de Gamelab son sus ponencias, y no es para menos, ya que acuden auténticos pesos pesados tanto del panorama nacional como internacional.
En esta ocasión, el encargado de abrir esta serie de charlas y presentaciones ha sido Enric Álvarez, de Mercury Steam, un hombre que a estas alturas no necesita presentación alguna. En esta ocasión, su ponencia, se centraba en presentar al mundo 'Raiders of the Broken Planet', así como a defender la idea que el mundo necesita un shooter como este, ya que no es un shooter más como los que se encuentran a patadas actualmente. Lo cierto, es que más allá de enseñarnos videos de la beta actual y un diario de desarrollo inédito (se publica mañana), Enric no ha comentado realmente nada nuevo del juego, y si estáis interesados en saber más sobre él, os invito a leer la entrevista que hicimos en BGW 2016, o el avance de 'Raiders of the Broken Planet'. Lo curioso de todo este asunto, es que este hombre tiene la facilidad, para venderte su juego, y que salgas de la conferencia con el hype, algo que me fascina. En mi caso, he intentado jugar varias veces a 'Raiders', pero no he acabado de pillarle el punto, pero sinceramente, tengo ganas de mañana volver a sentarme un ratito en su stand y darle una segunda oportunidad.
Posteriormente, tuvieron lugar otra serie de interesantes charlas, como la del señor Roberto Yeste (SIE) sobre PlayStation Talents o la del señor Mike Sepso (Activision Blizzard) sobre los eSports. En la primera se han presentado multitud de juegos que llegaran a consolas PlayStation, mientras que la segunda ponía encima de la mesa la evolución de los eSports, y la forma de consumo de estos. Por ejemplo, Sepso ha comentado una cosa que me llamo muchísimo la atención, y es que los eSports no necesitan a la televisión porque los jóvenes no la consumen. Sin embargo, la tele sí que necesita los eSports porque tiene la necesidad de captar público joven.
Pero bueno, en mi opinión, la charla más interesante, o la que más llamaba mi atención era la de Sam Lake. La cara más visible de Remedy, ha explicado como desde la compañía finesa siempre han estado buscando la forma de innovar e implementar nuevas formas de contar una historia. Por ejemplo, hablo de la serie que puedes ver en las teles de 'Alan Wake', o del enfoque que tiene la serie de 'Quantum Break', centrándose en los antagonistas, algo nada habitual en las series convencionales, además de explicar cómo les costó producirla. También tuvo ocasión de dejarnos un par de pinceladas de sus nuevos proyectos, y volvió a asegurar entre risas que nada de 'Alan Wake 2'. Precisamente esto último ha sido lo más negativo de mi día de hoy.
Sin embargo, no os he contado lo mejor de todo. Y es que unos minutos antes, de subir al escenario, Sam Lake apareció en el auditorio y se sentó justo delante mío, momento que aproveche cual ave de rapiña para acercarme sigilosamente y pedirle amablemente que me firmará las portadas de 'Quantum Break' y 'Alan Wake'. No solo eso, sino que mientras me las firmaba muy amablemente, le dije por la bajini y con mi inglés de "Oxford" que tenían que hacer una segunda parte de 'Quantum Break', aunque únicamente conseguí sacarle una pequeña carcajada. Había que probarlo, ¿no?
Así que no he podido acabar más contento este primer día en Gamelab 2017, aunque desafortunadamente y por motivos personales, no he podido quedarme a la entrega de premios. Eso sí, emití mi voto antes de irme y ya estoy recargando pilas para el segundo asalto de mañana.