El 25 de Agosto 2017 | 19:23
En el momento de su presentación en el E3 de 2015 era fácil sentir una fuerte reticencia a 'Sea of Thieves', en parte por venir de la mano de una Rare que lleva años haciendo sufrir a sus seguidores, en parte por no dejar del todo claro el concepto general de esta nueva licencia.
Ahora, varios años después y con muchas ferias a sus espaldas la idea tras esta nueva aventura de piratas con un fuerte componente cooperativo parece mucho más definida y ya nos va tocando hacernos una idea global de lo que propone de cara a su lanzamiento, previsto por ahora para principios de 2018. Pues no en vano estamos ante una de las licencias más prometedoras de cuantas se guarda en exclusiva el ecosistema Xbox One/Windows 10.
Nada de marinero solitario
La primera duda que surge en buena parte del público al ver un buen puñado de minutos de 'Sea of Thieves' en movimiento siempre es la misma ¿Puedo jugar a esto en solitario? y la respuesta tampoco cambia: por ahora no. La idea principal de este juego no dista mucho de lo que hacía realmente atractivo al 'Guns of Icarus' de Muse Games, esto viene a ser la necesidad de contar con una tripulación que pueda realizar tareas concretas dentro de nuestro galeón.
La presencia de otros jugadores es de suma importancia dentro y fuera de nuestro barco. Esto responde también a que cualquier barco que veamos en el agua estará habitado por otros jugadores, por tanto la vida que tenga el juego dependerá totalmente del éxito que tenga en sus inicios, ya que de momento no se ha hecho alusión a la presencia de barcos tripulados por la inteligencia artificial.
El número de jugadores que podrán formar parte de una tripulación es a día de hoy una incógnita, pues si bien en las pruebas anticipadas del juego se ha establecido en 4 como máximo, esto podría cambiar de cara al lanzamiento de la versión final.
Piratas de la vieja escuela
Uno de los mayores atractivos de 'Sea of Thieves' en lo que llevamos visto hasta ahora es ese estilo "manual" con el que hay que realizar cada una de las acciones que nos llevarán a un tesoro a progresar como piratas. Me refiero a tener que manipular las velas, usar el mapa que hay en la sala habilitada para ello dentro del barco, usar el catalejo, los mapas del tesoro con la clásica X que marca el lugar y un acertijo que nos llevará hasta el ansiado botín, cargar con los cofres, lanzarnos en cañones hasta otros barcos o para ayudar a compañeros inmersos en combates contra criaturas mágicas y un largo etcétera de situaciones que parece no darán pie al aburrimiento o la repetición.
Hasta la fecha hemos visto varias partidas con contenido PvE en el que los piratas controlados por jugadores se enfrascaban en búsquedas de tesoros escondidos en barcos hundidos en el mar y en islas con cuevas y montañas totalmente explorables. En el futuro se estima que podamos realizar misiones realmente complicadas y tengamos que derrotar a criaturas míticas mucho más poderosas que los esqueletos y los tiburones que ya hemos visto en acción.
El contenido PvP nos permitirá entablar combate libremente contra otros piratas en mar abierto. El tipo de beneficios de estos abordajes aún no ha sido clarificado y no tenemos claro qué parte de su botín nos podremos llevar a casa, si tendremos que cargar a mano con lo que lleve el barco abordado o si podremos directamente tripularlo y quedarnos con él para saquearlo en el puerto más cercano. Todos estos detalles determinarán notablemente el éxito que tenga o deje de tener 'Sea of Thieves' en su debut.
Tanto la necesidad de cooperación como los mecanismos para la exploración son los dos principales atractivos de este proyecto que en cada presentación pública convence a más y más gente. En el aire quedan, por tanto, temas como el combate que ha sido calificado en no pocas ocasiones de demasiado simplón, o la progresión de nuestras partidas con preguntas típicas pero relevantes como lo que pasará con nuestro barco si se destruye o lo abordan con éxito otros jugadores, en qué podemos gastar nuestros botines más allá de mejorar nuestro barco, comprar uno nuevo con características distintas o actualizar nuestro equipamiento. El número de tareas secundarias que podremos realizar al margen de la búsqueda de tesoros también es otro tema a resolver.
Hay aún mucho que aprender sobre el mayor proyecto de Rare en los últimos años y hay muchas esperanzas puestas por parte de toda una comunidad en esta nueva licencia. En los próximos meses se irá perfilando la forma final de este juego que sin duda es el último voto de confianza que obligatoriamente debemos darle a Rare.