El 29 de Abril 2017 | 23:25
Este texto contiene spoilers de la trama de 'Ataque de los titanes'
Volvemos una semana más a tratar el nuevo episodio de la segunda temporada de 'Ataque a los titanes'uno muy intenso y con mucha carga emocional en los personajes protagonistas, sobre todo en uno.
Comenzamos con un flashback a un entrenamiento en la nieve en el que Krista e Ymir se retrasan del grupo en la ida a la base por culpa de otro soldado que ha tenido un accidente y no puede caminar. Vemos a Krista muy cansada, ya que es ella la que está tirando de la camilla donde está su compañero y además carga con un farol para ver por la noche.
Mientras ella está dando todo lo que puede para salvarle, Ymir le dice que tienen que dejarle aquí porque si no van a morir los tres y le da a elegir entre salvarse o morir. Krista elige una tercera opción que inventa sobre la marcha: Ymir se adelantaría, salvándose así y ella llegaría como pudiese hasta la base mientras tira de la camilla. Ante esto, Ymir le pregunta que si lo que quiere es morir como una mártir llevándose con ella al pobre soldado malherido.
Entonces comienzan un dialogo en el que ellas mismas ven que son muy parecidas. Ymir ya sabía que Krista no es su verdadero nombre y que es una bastarda de alguien de la nobleza, ya que se lo escucho a dos miembros del culto al muro mientras les robaba en una iglesia. Y se nos revela que Krista se metió en el ejército y se cambió el nombre para que no la mataran.
Después de esto, Ymir le da la opción de salvarse, tirando a su compañero por un precipicio y yendo ellas dos hacía la base, ante la negativa de su compañera, la tira montaña abajo y se transforma en un titán, uno que no tiene nombre pero que los fans del manga bautizaron como "el titan bailarin", y baja la camilla mientras Krista va por otro lado después de recomponerse de la caída.
Una vez está allí y al ver imposible engañar a Krista con la forma en que ella bajo, Ymir le cuenta su secreto.
El titán bailarín
Volvemos al presente justo donde lo dejamos en el anterior capítulo, Ymir se ha transformado y está luchando contra los titanes. El grupo está conmocionado, sobre todo Reiner y Bertolt, ya que fue ese mismo titán el que se comió a un amigo de ambos en su infancia cuando intentaba salvar al propio Reiner, el flashback que vimos en el episodio anterior.
Cuando las fuerzas del titán bailarín empiezan a caer, ya que está luchando mientras protege el torreón donde está el grupo, Krista le suelta el mismo discurso que le dijo la propia Ymir varias veces en otro episodios y la incita a que destruya la torre para luchar mejor, algo que obedece sin rechistar.
El torreón se está cayendo y es entonces cuando Ymir va a la cima y les dice que si quieren vivir, se agarren a ella. La titán ya está muy débil y poco después de esto, empieza a ser devorada por los demás titanes que estaban atacando el castillo y que han sobrevivido a la pelea.
Y es ahora cuando tenemos un momento de estos que adoramos los fans de los shonen, la caballería llega, un grupo de soldados del grupo de exploración aparece haciendo uso de sus equipos de maniobras tridimensionales y derrotan a los titanes que quedan mientras escuchamos una música épica, un climax que se rompe cuando hacen uso de Eren como comical relief de la escena, una mala decisión ya que está escena merecía ser la ruptura del sufrimiento y agonía de estos últimos episodios en los que Reiner, Bertolt, Ymir, Krista y Connie estaban sitiados sin ninguna posibilidad contra los titanes que atacaban la fortaleza.
Estamos ya terminando y lo hacemos con una escena en la que Ymir, moribunda y con varios miembros arrancados, está en el regazo de Krista, quien le dice por fin su verdadero nombre, Historia. Y justo después de oírla, Ymir muere con una sonrisa en la cara, habiendo hecho lo que siempre le dijo a Historia que no hiciese nunca, ser una mártir para salvar a los demás.
Un episodio muy bonito, con su parte épica, su tragedia y que será muy importante tanto para el transcurso de la historia como para el desarrollo de algunos personajes.