Ubisoft nos invitó hace poco a entrar en sus oficinas madrileñas para hacernos a la mar con su nuevo y esperado 'Assassin's Creed IV: Black Flag', que sin duda alguna nos ha emocionado sobremanera. De primera mano y corriendo en la propia PlayStation 4, la compañía gala nos dejó experimentar la mayor simulación de piratería del siglo XVIII que hemos tenido el placer de jugar en mucho tiempo. Todo ello, claro está, enmarcado en la interminable lucha entre asesinos y templarios. ¡Bienvenidos al Caribe marineros de agua dulce!
Pirata hasta el final
Aunque solo pudimos probar un par de secuencias del juego, nuestra aventura dentro del Animus nos permitió entrar en contacto con las principales atracciones que presenta 'Assassin's Creed IV'. Es decir, la tierra y el mar. Por un lado, caminábamos por un poblado junto al mismísimo Barba Negra en busca de tripulación para nuestro navío, el Jackdaw. En otra secuencia nos daban más o menos rienda suelta para que disfrutásemos del sistema naval que han mejorado para esta entrega.
Nuestro Edward Kenway, abuelo de Connor, se hace a la mar con su tripulación de bucaneros dispuestos a arrasar con todo lo que se le ponga por delante. Y es que en esta parte del juego, se nos abre un inmenso mapa, el mayor de la saga, para explorarlo a voluntad en busca de tesoros por ser desenterrados, templos mayas dispuestos a ser explorados, fuertes esperando a ser conquistados y un sin fin de navíos españoles y británicos principalmente que supondrán suculentos botines o una muerte segura, dependiendo todo esto de la planificación y los recursos con los que nos lancemos a cada empresa.
Nuestro barco podrá ser mejorado de arriba abajo, empezando por una embarcación bastante modesta con unos pocos cañones por banda, convirtiéndose en un verdadero navío de combate capaz de hundir enormes galeones de apenas una salva de cañonazos. Para conseguir todas estas mejoras necesitaremos mucho oro, y materias primas también. ¿Cómo conseguimos todo esto? Fácil, somos piratas, lo cogemos sin más. Concretamente tendremos, aparte de las obvias misiones principales, muchas tareas secundarias, tanto en tierra como en alta mar, relacionadas con la recogida o comercio de materiales varios y oro. Por poner algunos ejemplos, podremos cazar ballenas y tiburones para obtener huesos, carne y grasa entre otras cosas. Podemos abordar barcos y robarles sus bienes, así como reclutar a su tripulación o acabar con sus miserables vidas. Pero el sistema económico que ya nos adelantaron en la entrega anterior, seguirá presente en cierto modo, lo que nos permitirá ganar importantes sumas si sabemos dónde comprar y vender.
Todo pirata es libre
Mientras estemos en el mar, nuestro personaje gozará de una mayor libertad que en 'Assassin's Creed III'. Y es que Kenway es capaz de soltar el timón en cualquier momento, corretear por cubierta o escalar los mástiles y saltar al agua o abordar barcos. Todo esto en tiempo real sin necesidad de cargas de ningún tipo, del mismo modo puede bajar a tierra o volver a la embarcación sin complicación alguna. A este respecto mencionamos la cómoda posibilidad de utilizar un bote en la costa más cercana para hacer de viaje rápido de vuelta al barco. Como curiosidades, podremos conseguir letras de canciones para que las aprendan nuestros marineros, lo que dará a nuestras travesías un toque muy especial.
Volviendo a tierra, el juego cuenta con importantes ciudades con edificios de gran tamaño, por lo que las largas escaladas vuelven a la saga, después de haber quedado algo ocultas en la entrega anterior. Aquí la naturaleza juega un papel importante, con una vegetación exuberante típica del Caribe. pero las ciudades también tendrán su protagonismo, como centro de ocio, comercio y toda clase de tareas principales o secundarias.
En cuanto al sistema de combate, el juego tiene una mecánica idéntica a lo visto hasta ahora, aunque con mejoras en lo referente a las armas de fuego. Todos habremos visto alguna película de piratas en la que estos van armados hasta los dientes, no solo con toda clase de espadas y sables sino también con pistolas y trabucos varios. Aquí veremos exactamente lo mismo. Así que no será raro vernos superados en la cubierta de un barco enemigo, y tirar de pistola en lugar de seguir a espadazos, para abrirnos un hueco y sacar ventaja en batalla.
No decepcionará en lo visual
Por lo que hemos podido ver en esta versión que era de PS4, el juego tiene un apartado visual impresionante, si bien no se aleja casi nada de lo que podemos ver en el último episodio de la saga. Este nuevo título, que saldrá a finales de noviembre en consolas de nueva generación, no recibirá ese importante salto cualitativo que todos esperamos ver en la next-gen, si bien tendrá un acabado algo retocado, un lavado de cara apreciable que será agradecido por los fans de la saga que ya empiezan a necesitar una experiencia visual más perfeccionista.
Así que ya lo sabéis. Si queréis sentir lo que supone ser un verdadero corsario, tendréis que esperar al 1 de noviembre en PlayStation 3 y Xbox 360. Xbox One, Wii U y PC lo recibirán el 22 de noviembre, mientras que PlayStation 4 lo tendrá el 29 del mismo mes. Pero os podemos asegurar por experiencia propia que la espera merecerá la pena.