'The Bureau: XCOM Declassified', orígenes de una larga historia sobre el caso OVNI

El estudio 2K Marin por fin logró sacar adelante este proyecto que, si bien prometedor, parecía que se hacía de rogar. Pero como decimos, ya está aquí 'The Bureau: XCOM Declassified'. Un título de acción táctica que pronto nos recordará en sus bases jugables a la saga 'Brothers in Arms', aunque pronto se irá alejando para establecer su personalidad.

Bienvenidos al proyecto XCOM

Mientras que la saga XCOM nos tiene acostumbrados a otra cosa, 2K nos presenta con este título un supuesto origen de la agencia que da nombre a la saga, a través de una invasión sin precedentes a nuestro planeta. Esto ocurre a principios de los años 60, de la mano del agente William Carter, que se ve envuelto de lleno en los acontecimientos del día 1 de la invasión y entrará a formar parte de las unidades de élite de XCOM para tratar de acabar con la amenaza extraterrestre.

El juego, en ese sentido, empieza fuerte. Nos encontramos en una base militar donde llueven proyectiles láser y de plasma. Naves alienígenas arrasan todo a su paso. Soldados casi indefensos pierden la vida ante nuestros ojos. Todo ello mientras intentamos salvar el pellejo para poder luchar un día más.

Casi desde el primer momento nos tenemos que hacer a la idea de que este juego es, sobre todo, táctico. Es decir, hay que saber jugar nuestras cartas cuando nos enfrentamos al enemigo. Nada de correr como locos y asaltar sus líneas. La mecánica desde el comienzo del juego será la de cubrirse en el mejor parapeto disponible y disparar con precaución. Pero no estaremos solos, ya que en apenas unos minutos nos introducen a la mecánica de equipo con hasta dos compañero de de pelotón. Como el líder del equipo, tendremos que darles órdenes referentes al lugar donde queremos que se pongan a cubierto, el enemigo al que deben enfilar o las habilidades que tienen que usar.

Estarás al mando de la élite

Desde la base de XCOM tendremos un terminal en el que cambiar de compañeros así como reclutar otros tantos. Esto será importante porque cada agente responde a un arquetipo distinto. Tenemos al ingeniero, el explorador, el de apoyo y el comando. Cada uno de ellos tiene una serie de habilidades por descubrir, que responden al tipo de soldado que son. De esta manera, podemos conjuntar a nuestro personaje, que tiene habilidades únicas, con otros dos personajes para formar una patrulla infalible, capaz de hacer frente a toda clase de amenazas. Y es que el combate puede ponerse muy feo si no tenemos en cuenta los diferentes tipos de armas y habilidades.

Esto es debido a que los alienígenas cuentan con diversos tipos de tropas, cada una con sus puntos fuertes y débiles. Desde los sectoides, clásicos hombrecillos grises con grandes cabezas y armas cortas, hasta los Mutons, bestias descomunales armadas con poderosas escopetas e imparables músculos. Pasamos por una clase más similar a los humanos, con fusiles o metralletas laser, que pueden barrer nuestra cobertura y dejarnos indefensos. A esto se le suman mechs, drones y tropas de élite que subirán la dificultad otorgando escudos a sus compañeros.

Armado hasta los dientes, pero no será suficiente

Todo este despliegue nos obliga a cargar con armas varias, del orden de rifles de precisión, escopetas, lanza cohetes y ametralladoras. Además, las habilidades del pelotón serán muy necesarias, ya que las armas juegan un papel de ejecución de enemigos debilitados o aturdidos. Siendo poco recomendable apostar únicamente por las balas y los rayos. Para eso podremos desplegar prácticamente los mismo elementos que el enemigo, ya que como sabemos de esta saga, los soldados humanos basan la eficacia de su respuesta en la tecnología que arrebatan a los invasores. Torretas de láser o misiles, minas de proximidad, granadas, detonaciones aturdidoras, escudos deflectores, levitación, señuelos holográficos e incluso ocultación. Una lista que puede parecer algo escasa en principio pero más que suficiente para hacer el juego realmente ameno.

El título mantendrá nuestra atención de forma muy efectiva gracias a la evolución de la historia, el desarrollo del pelotón a medida que suben de nivel ganando habilidades, y el descubrimiento de nueva tecnología. Porque según exploramos el escenario, podemos toparnos no solo con las armas extraterrestres y sumarlas a nuestro arsenal, sino que también iremos encontrando en cada escenario una mochila nueva. Las mochilas sirven para dar beneficios pasivos a nuestro pelotón. existe una lista realmente larga de estos artículos que pueden otorgar desde mayor resistencia, hasta más daño de las armas, pasando por más munición, mayor alcance para desplegar las habilidades, más daño por disparos a la cabeza o mayor tiempo para rescatar a los compañeros caídos.

Esta última mejora es para tenerla en cuenta, ya que en combate cualquiera de nuestros soldados y nosotros mismos podemos perder toda la salud y caer al suelo. Esto nos da unos segundos para revivir al personaje abatido. Si se acaba el tiempo, en el caso de no ser nosotros, perderemos a ese agente para siempre. Del mismo modo que podíamos ver en 'XCOM: Enemy Unknown' nuestros compañeros pueden personalizarse desde el color de su ropa hasta el propio nombre. Para algunos esto creará unos lazos especiales, y perder a ciertos compañeros será un golpe muy fuerte. Más aún teniendo en cuenta que se pude tarda un poco en subir su nivel de experiencia y tener que ir al combate con gente nueva sin poderes desarrollados puede ser fatal, ya que los aliens no serán más considerados por ello.

Para mantener a todas nuestras tropas a un buen nivel, a pesar de solo poder llevar a dos en cada misión, contamos con una serie de tareas a las que podemos enviarlos sin supervisión. Algo que funciona de forma similar a las misiones de los asesinos en 'Assassin's Creed'. Existen diversas tareas que necesitan un nivel de experiencia total calculada entre todos los agentes para ser aceptada. Si nos piden 10 y solo tenemos tres agentes con nivel 3 cada uno, la misión no se podrá llevar a cabo. Cuando seleccionamos una de esas tareas, se completará cuando nosotros hayamos vuelto de otro encargo. Así, los agentes podrán haber encontrado nuevo equipamiento o sencillamente subir de nivel. Con esta mecánica tan eficaz mantendremos un buen nivel entre todos los agentes de XCOM.

La base de operaciones, al contrario que en el título de estrategia, no está bajo nuestro control, por lo que poco o nada podemos hacer, aparte de pasear, hablar con algunos personajes y recoger elementos de texto y audio, repartidos no solo por la base, sino también por los escenarios de las misiones.

La visión de los años 60

A nivel visual, el juego cuenta con un nivel de detalle bastante alto en cuanto al rostro de los personajes, si no tan espectacular en sus animaciones. Aunque a nivel general el aspecto es más que aceptable. Esto gana puntos con el despliegue de elementos decorativos en cada escenario, desde las máquinas, pantallas, cableado y luces de la base, hasta la devastación causada por los aliens en la enorme variedad de entornos que visitamos. Todos ellos muy bien diseñados a nivel de jugabilidad, que nos permite cubrirnos en multitud de lugares y vías para flanquear al enemigo y dejarle al descubierto.

En el aspecto sonoro, el juego nos platean una atmósfera que funciona muy bien, con efectos realistas, envolventes, temas de la época y una compenetración fantástica con lo que se va presentando en pantalla.

La tecnología del juego no alcanza lo máximo que podemos ver estos días, pero por muy poco. El juego en términos generales ofrece una cara bastante positiva en cuanto a modelados de todos sus elementos, y no presenta problemas de funcionamiento, ni en consolas ni en ordenadores de gama alta. Para la gama media habrá que rebajar algo las opciones gráficas y desactivar algunos efectos. Pero esto no nos impide disfrutar del juego en modo alguno.

Conclusiones

Como resumen podemos decir que, si bien el juego no acaba de crear escuela ni necesita secuelas, ofrece una alternativa a la franquicia XCOM bastante fresca e interesante. Sin embargo, su estilo y sus posibilidades no son explotadas al 100%, lo que hace que lo disfrutemos sin necesidad de más. Además la extensión de su campaña nos deja satisfechos, sin ser para nada corta, pero tampoco tediosa y aburrida.

Se trata por tanto de uno de esos títulos buenos, que se basan en un universo conocido e interesante, del que beben para ofrecer una alternativa interesante, pero no trascendente. A pesar de ello no lo dudéis, 'The Bureau' merece mucho la pena, ya que nos plantea la invasión en un marco temporal realmente atractivo.