Así es el nuevo DLC de 'Watch Dogs 2', Sin Concesiones

Los temas más oscuros no han sido ajenos para 'Watch Dogs 2', aunque como el resto del juego, el tono con el que se tratan no es el que estamos acostumbrados. En Ubisoft Montreal sabían que tenían que diferenciarse del triste tono de la primera entrega, y por ello le otorgaron un sentido del humor a todo lo que rodea el juego que hizo de él uno de los sandbox más divertidos de 2016, y dicho sea de paso, sorprendentemente uno de los mejores en general. Pero hace ya varios meses que llegó al mercado y la mayoría de los jugadores que confiaron en él ya han recorrido San Francisco de punta a punta, así que el objetivo de todo DLC que se precie es incitar a revisitar el juego en cuestión. ¿Cumple con su cometido Sin Concesiones?

La industria del sexo amenaza a DeadSec

El sexo es un asunto más en 'Watch Dogs 2', aunque en Sin Concesiones va aún más allá. En concreto, una productora de cine porno amenaza con reirse de nuestro grupo de hackers protagonista grabando una película llamada DeadSexxx. De esta premisa parte la trama de este DLC, que se inicia con una primera misión principal genial en la que haremos uso de gran parte de las habilidades de hackeo como enlazar cámaras, pero en la que sobre todo, disfrutaremos del uso de un robot un tanto peculiar. Se trata sin duda de un gran comienzo, interesante argumentalmente y divertido, pero cuya continuación no sigue en la misma tónica.

El caso es que Marcus descubrirá que los Bratva, un grupo mafioso ruso, está metido en el ajo, con lo que pasaremos de un inicio desenfadado a asuntos bastante más serio. Las siguientes misiones -no muchas- nos harán infiltrarnos en numerosas zonas restringidas y dar cuenta de unos cuantos delincuentes en situaciones que permanentemente nos van a recordar lo que ya vivimos en la historia principal de 'Watch Dogs 2'. Esto no tiene porqué ser necesariamente malo, sobre todo si hablamos de un juego que ya de por sí es divertido, pero personalmente a un DLC le pido no solo más y mejor contenido, sino también diferente. Sin duda hay grandes momentos, como una fase en la que le objetivo es distraer a casi toda la mafia rusa a lomos de una moto y que toma la forma en la práctica de una prueba contrarreloj, algo que puede resultar convencional, pero convincente en cualquier caso. También nos vamos a enfrentar a un nuevo desafío, como es la presencia de un enemigo que generará alrededor un campo de detección de hackeo, y que no solo inutilizará nuestras habilidades sino que además nos descubrirá por muy bien ocultos que estemos.

Sin Concesiones añade también varias pruebas contrarreloj, algunas de ellas muy distintas a lo que nos encontramos en la base de 'Watch Dogs 2'. Sin ir más lejos, una en un coche de policía no es sino el preámbulo de una última que disfrutaremos conduciendo un camión de bomberos notablemente más difícil de manejar que el resto de vehículos. Afortunadamente, otro de los aspectos que ha mejorado considerablemente esta secuela con respecto a su antecesor es la conducción, siendo una de las mecánicas más agradecidas sea cual sea el vehículo que controlemos en cada momento.

Otro de los añadidos que nos vamos a encontrar en este contenido son nuevas armas, en concreto la escopeta de aire y un rifle de francotirador aturdidor. Para que la primera sea efectiva es imprescindible disponernos a muy corta distancia del objetivo, obviamente, y los rifles de francotirador no son un arma muy usada en la San Francisco que propone 'Watch Dogs 2', pero al fin y al cabo, se tratan de dos herramientas más de las muchas que ya disponemos para construir la aventura a nuestro antojo. Tanto estas como las nuevas indumentarias temáticas de policía o bombero son novedades divertidas, pero dificilmente aprovechables si ya tenemos el juego muy avanzado o directamente, ya estamos disfrutando del end game.

En definitiva, Sin Concesiones dejará muy satisfecho a quien haya o esté aún esté pasando su tiempo libre con 'Watch Dogs 2', ya que mantiene todo lo que hizo bueno a este en su momento, pero sin añadir novedades diferenciales más allá de la historia principal del DLC, que a pesar de ser corta, sí nos ofrecerá momentos muy entretenidos. Aún así, el precio de este contenido descargable, 9'99 euros, lo convierten en una opción a tener en cuenta, y muy aconsejable de hecho.