NEXT GEN

'Samurái Warriors 4' los Musou llegan a la nueva generación

Los warriors llegan a la nueva generación sin ningún salto reseñable.

Por Manu Mora 14 de Noviembre 2014 | 18:03

En contra de lo que podría parecer, la saga Warriors, o Musou en Japón, no deja de ganar adeptos y fuerza conforma pasa el tiempo. Esto se ve perfectamente en los lanzamientos de juegos orientados clarísimamente al fan service del manga y el anime como son por ejemplo, los del universo Gundam, los One Piece o hasta el propio Hyrule Warriors que acaba de salir.

Pero además de todos ellos las sagas menos anime, por así decirlo, también tienen su cabida, como ocurre con este 'Samurai Warriors 4', que, pese a ser un juego muy japonés y un estilo, claramente anime, se desmarca de los anteriormente citados por tener una sobriedad bastante mayor a la hora de contarnos la historia.

Y es precisamente la historia la que lo hace diferente. 'Samurái Warriors 4' nos contará la historia de varios clanes japoneses a través de distintas líneas argumentales, que podremos ir jugando a la vez, por separado o como nos venga en gana.

Al principio tendremos varias historias que elegir y conforme avancemos en ellas iremos desbloqueando otras nuevas que tendrán que ver, en argumento, con las que nos las han abierto. Sin embargo, a diferencia de lo que pueda ocurrir con juegos más conocidos como 'One Piece Pirate Warriors', por ejemplo, a menos que seamos eruditos en la cultura japonesa, nos van a sonar bastante poco.

Al menos, nos introducen en ellas con una beve explicación de la situación y sus protagonistas, como si de una clase de historia de primero de bachillerato se tratase. Luego, con un par de escenas movidas por el motor del juego, nos presentarán a aquellos personajes que manejaremos en el combate e intentarán darle algo de carisma aunque, bajo mi punto de vista, sin conseguirlo.

Tener muchos personajes no garantiza que sea variado

Al tener varios frentes en los que centrarse la historia "principal", 'Samurai Warriors 4' nos ofrece la posibilidad de controlar dos personajes a la vez durante una batalla. Los podremos seleccionar en la pantalla del combate y podremos ver también cómo de bien se llevan mediante un simple sistema de caras. Ni qué decir tiene que cuanto mejor se compenetren, mejor funcionarán en combate.

Todos los personajes se manejan prácticamente igual. Tendremos el tradicional botón de ataque normal que hará un combo. Podremos finalizarlo o alargarlo con el botón del golpe fuerte, que desencadenará un ataque final o más poderoso dependiendo de en qué momento del combo normal lo hayamos hecho. Por último, también tendremos el ataque especial, que lo podremos liberar cuando llenemos la barra correspondiente.

Estos combos irán mejorando conforme subamos de nivel y se harán haciendo cada vez más largos y complejos, según el personaje. Esta subida también nos garantiza más estadísticas de combate y velocidad de movimiento, lo cual, sobre todo al principio, es un gran lastre.

Cada personaje manejará un tipo de arma y un estilo ligeramente diferente. Algunos serán más directos, otros usarán elementos, otros incluso serán más de áreas. Sin embargo, estas diferencias no son lo suficientemente grandes, ya que los combos se harán de la misma forma y, al final, casi todo parece que es lo mismo. Lo único que cambia un poco es el ataque final, pero ya está.

Para darle un poco más de variedad, las armas que vayamos encontrando por el camino tendrán diferentes habilidades que se potenciarán con una serie de gemas que recogeremos derrotando enemigos claves. Podremos destruir el arma para conseguir gemas más poderosas y así mejorar aún más las nuevas que consigamos.

Todo esto hace que al final no nos decantemos por un personaje en concreto. Si a esto le sumamos que las historias no profundizan lo suficiente como para que tengan un carisma medio, al final optaremos por usar nuestro avatar, que lo comentaremos más adelante.

Mucha potencia gráfica pero con poca utilidad

Cuando cogemos 'Samurai Warriors 4' ya podemos ver, en las primeras misiones, la potencia de PlayStation 4 comparada con la antigua generación. Es fácil encontrarnos rodeados por una gran cantidad de enemigos, clónicos, eso sí.

Y cuando decimos muchos, nos referimos a muchos, cientos incluso. Además, durante las batallas, podremos cambiar entre los dos personajes que elegimos al principio en cualquier momento, por lo que la máquina tiene que estar muy pendiente de esos dos puntos calientes.

Por suerte, ninguna caída de frames ni de la calidad de imagen ocurre en los momentos más críticos, ni si quiera cuando realizamos los ataques más vistosos. Esto, comparándolo con juegos muy recientes como, por ejemplo, 'Hyrule Warriors' deja en clara evidencia la potencia o el uso de ésta en Wii U.

Sin embargo, todo este despliegue de recursos gráficos en combate se ve completamente anulado por la inteligencia artificial de los enemigos. Los que son clónicos podemos decir que prácticamente se dedican a seguirnos, sin realizar apenas ataques. Y cuando los hacen, fallan.

Pero los enemigos más poderosos, los finales, tampoco brillan precisamente por sus habilidades en combate y, mucho menos, por acertar el momento de usarlos. Son difíciles porque se protegen y repelen casi todo, pero ya está.

Tu propia historia samurái

El juego tiene varios modos. El principal, que es el que sigue las historias de nuestros samurais, el modo libre, presente en todo Warriors que se precie y, además, el modo Chronicles.

En este tendremos que crearnos un avatar en un editor de personajes que se queda bastante lejos de lo que es la palabra completo, pero que cumple de sobra el cometido para el que ha sido pensado. Elegiremos su vestimenta, su arma y su estilo de lucha también y nos lanzaremos a la aventura.

El objetivo es conocer a todos los líderes que podamos conforma avanzamos en un mapa de Japón. Evidentemente los escenarios serán los mismos que en el modo historia pero en él nos labraremos la nuestra propia haciendo aliados poderosos que nos ayudarán en las futuras batallas que hagamos.

También podremos jugar a dobles, a pantalla partida, lo cual, después de haber jugado al 'Hyrule Warriors', te deja un mal sabor de boca, pero al menos no hay caída de frames.

Sistema de juego muy tradicional

'Samurai Warriors 4' es, al fin y al cabo, un musou, es decir, un juego de estrategia en tiempo real en el que tendremos que cumplir una serie de objetivos principales para conseguir hacer salir al comandante de un mapa y derrotarlo.

Estos objetivos suelen ser defender un territorio, o conquistarlo. Para lo segundo tendremos que derrotar al abanderado, normalmente bastante bien protegido, y posicionar nuestras tropas en el lugar correspondiente. Conforme pasa el tiempo, nuestro bando o el enemigo (alguno de ellos, porque puede haber varios grupos)

También pueden pedirnos que derrotemos a alguien o que evitemos que muera alguien, lo que suele ser más difícil de conseguir ya que los aliados suelen ser bastante inútiles a la hora de defenderse solitos.

Pero además de los objetivos principales, conforme avancemos también podremos desbloquear objetivos secundarios. Suelen ser siempre de derrotar a algún que otro miembro de la familia rival en combate, pero también los hemos encontrado de defender y mantener el territorio o de conseguir que todo el mapa esté bajo nuestro control.

Esto le da un pequeño toque de variedad al juego aunque seremos nosotros los que deberemos de encontrar un balance entre buscar estos objetivos o ir directos al grano, ya que conseguir la puntuación más alta depende de la velocidad con la que lo hagamos, el daño que recibamos, los objetivos que cumplamos y los enemigos que derrotemos. Aquellos maniáticos de las puntuaciones encontrarán aquí un reto para echar horas y horas.

Conclusión

En definitiva, 'Samurai Warriors 4' es un juego muy típico dentro del universo de los musou que cumple todas y cada una de las características del mismo. Un montó de personajes seleccionables aunque con poco carisma, sobre todo si eres ajeno a la historia de Japón.

La jugabilidad es su gran baza y, aunque bastante repetitiva, sobre todo por el hecho de tener que volver a empezar de cero cada vez que cambiamos de historia princiapal, sí es cierto que se adereza bien con el moco Chronicles, que le da un toque de personalización y permite que le cojamos cariño a nuestro personaje principal.

Por lo demás, el juego no destaca en casi nada siendo el inglés un problema para aquellos que no lo lleven demasiado bien ya que la información en pantalla, aunque se muestra en el mapa, muchas veces se explica en bocadillos que desaparecen al poco tiempo. Sí, se pueden volver a leer, pero rompen el ritmo.

No es un juego que sorprenda pero ese no es su objetivo. Si ya sabes lo que ofrece y eres seguidor de la saga, este título no te va a decepcionar.