El 17 de Junio 2018 | 15:20
'Toy Story' se convirtió en todo un fenómeno mediático cuando fue estrenada allá por 1995, no solo por su gran calidad como película, sino también por ser el primer film de animación creado enteramente por ordenador. Puede que hoy en día eso nos resulte de lo más común (tal vez incluso demasiado común), pero en su momento dejó boquiabierto al público con estos juguetes que cobraban vida en la gran pantalla. Como todo gran éxito de Disney su adaptación a consolas no se hizo esperar, y de eso se encargaron los genios de Traveller's Tales, los cuales de hecho tuvieron que cancelar la secuela de 'Mickey Mania' para dedicarse por entero a este gran proyecto.
¡Hasta el infinito y más allá!
La vida puede parecer sencilla cuando se tienen solo 6 años, pero el joven Andy tendrá que mudarse pronto junto con toda su familia diciendo adiós al mundo que conocía hasta ahora. Y además se aproxima su cumpleaños, el cuál ni siquiera sabe si podrá celebrar como es debido. Lo que Andy no sabe es que cuando abandona su habitación sus juguetes cobran vida, y están planeando una fiesta para tratar de animarle. Al mando de estos juguetes se encuentra Woody, el vaquero que se ha convertido en el juguete favorito de Andy. Sin embargo, Woody pronto tendrá otros problemas más serios de los que preocuparse que el de organizar una simple fiesta... Y es que Andy recibe como regalo de cumpleaños justo lo que más deseaba, el nuevo muñeco de acción del popular Buzz Lightyear con los último en tecnología aplicada a juguetes. Puede hablar, desplegar las alas, y lanzar misiles. De hecho, su recreación del personaje de ficción es tan buena que ni el propio muñeco sabe que es tan solo un juguete, y busca desesperadamente retomar su misión espacial para regresar a su planeta. Así Woody se ve rápidamente desplazado por el nuevo y llamativo integrante, y pronto nace una rivalidad entre ambos que les hará vivir aventuras que ni ellos mismos imaginan.
En la era de los 16 bits fueron muchos y muy buenos los juegos de plataformas que pudimos disfrutar, especialmente los basados en personajes de Disney. Aquí mismo hemos recordado ya algunas joyas como 'Castle of Illusion', 'Magical Quest', 'Aladdin', o 'Mickey Mania'. Y es (como os contábamos al principio) en este último donde encontramos el origen de este 'Toy Story'.
Al frente de Traveller's Tales se encontraba el joven Jon Burton, un desarrollador nacido en la demoscene del Amiga que dio el salto a consolas en esta generación. La compañía que fundó, Traveller's tales, sigue plenamente activa. Mientras que el propio Burton instruye a futuros desarrolladores desde su nuevo canal de Youtube, donde nos cuenta sus ingeniosos trucos y anécdotas de desarrollo.
Es precisamente este 'Toy Story' uno de sus temas más recurrentes, ya que en él hizo uso de una buena colección de artimañas técnicas capaces de romper los límites de la consola en la que estaba corriendo el juego. Especialmente en el caso de Mega Drive, ya que esta versión sirvió como base dado el parentesco entre la consola de Sega y el mítico ordenador Amiga.
Para gustos los colores
Así por ejemplo uno de sus logros fue destrozar las limitaciones de color de Mega Drive, empleando trucos para ofrecer unas cifras de colores simultáneos en pantalla capaces de marear a los amantes de las comparativas. Con esto se consiguió una gran fidelidad a las imágenes de la película original, especialmente durante las escenas de transición entre niveles.
Otro portento técnico fueron ciertos temas musicales como el que nos encontrábamos en el menú de opciones, que ofrecían calidad de audio real en lugar de las músicas habituales en esta consola. Estas se unían a geniales adaptaciones (más convencionales) de los temas de la propia película, que encontramos a lo largo de ambas versiones.
Y ya que hablamos de sonido, es de destacar el curioso hecho de que en la versión para Mega Drive haya más samples de voz que en la de Super Nintendo, a pesar de que normalmente era a la inversa. Además dichos samples sonaban con bastante nitidez, demostrando una vez más que el amigo Burton le tenía bien cogida la medida a la 16 bits de Sega no solo a la hora de programar asombrosos efectos gráficos, sino también en lo referente al sonido.
Para recrear a los personajes se emplearon modelos CG originales extraídos directamente de la película, por lo que la fidelidad está más que garantizada. Así el bueno de Woody despliega ante nosotros un amplio abanico de animaciones con todo lujo de detalles, mientras se desplaza por escenarios repletos de efectos visuales sorprendentes que además rebosan total fidelidad a la película.
Pequeñas diferencias
Cabe destacar que algunas de estas barreras técnicas no fue necesario derribarlas en la versión para Super Nintendo, ya que justamente iban destinadas a salvar las diferencias entre ambas máquinas. Aún con esto, la consola de Nintendo se benefició de sus mejores capacidades para el color ofreciendo una mayor variedad de tonos. Mientras que por el contrario en la de Sega disfrutábamos de una mayor resolución de pantalla.
Por lo demás ambas versiones son prácticamente iguales, si bien en su momento se elogió que la adaptación para Mega Drive ofrecía un control algo más fluido. También es de destacar la inclusión de un nivel exclusivo para esta versión, en el cual manejábamos un coche radiocontrol con un impresionante efecto tridimensional. Dicho nivel ostentaba el nombre de "Day-Toy-Na" en homenaje al exitoso clásico arcade de Sega 'Daytona USA'.
Pero 'Toy Story' no es solo un portento técnico y una "cara bonita", además es un plataformas muy desafiante en el que vamos afrontando toda clase de retos. De hecho esta gran variedad de situaciones es uno de sus puntos fuertes, ya que evita que el juego se haga repetitivo y nos mantiene en constante deseo de saber qué nos espera en la siguiente fase.
Fases de exploración, habilidad, a la carrera, e incluso un impresionante nivel en primera persona en el que deberemos escapar del interior de una máquina. Cada fase nos sorprenderá de una forma distinta, y lo hará dejándonos con la boca abierta sin poder dar crédito a lo que nuestra consola de 16 bits nos está mostrando. Y todo esto bañado en el particular ambiente de esta veterana franquicia, creada especialmente para tocarnos la fibra de nuestra más tierna infancia.
Un viaje movidito
Lo único que podría resultarnos negativo al jugar, es la inconstante curva de dificultad que sube y baja continuamente. Pero esto parece ser algo intencional si nos fijamos en que es algo habitual en los juegos creados por Jon Burton, tal vez buscando aumentar esa sensación de no saber qué nos vamos a encontrar. No es raro atascarse en un nivel durante un buen rato, para después pasarnos el siguiente sin despeinarnos. De vosotros depende ya interpretar esto como algo negativo, o refrescante.
Existen también adaptaciones para Game Boy y PC, además de varias entregas posteriores basadas en las secuelas de la película. Sin embargo este primer 'Toy Story' nunca ha sido reeditado, por lo que os tocará buscar el cartucho original si queréis jugarlo sin emular. Por suerte ambas versiones son bastante comunes y se pueden conseguir por precios de entre 10 y 30 euros dependiendo del estado, siendo la versión española completa de Super Nintendo la única que dispara un poco más los precios.
Otra obra maestra de las plataformas noventeras disponible para tu consola de 16 bits favorita, con toda la jugabilidad de la época y un despliegue de logros técnicos capaces de dejarte boquiabierto incluso hoy en día, no dando crédito a lo que son capaces de mostrar estas veteranas consolas. Imprescindible a todos los niveles, especialmente si sois fans de las aventuras de estos entrañables juguetes.
Lo mejor:
Gráficos, sonido, jugabilidad, frescura... Imprescindible a todos los niveles. Recrea muy bien el particular estilo de la película. El ingenio de Jon Burton en plena efervescencia.
Lo peor:
La curva de dificultad puede resultar algo inconsistente. La versión para Super Nintendo cuenta con un nivel menos. Que nos quedásemos sin 'Mickey Mania 2', aunque fuese por una buena causa.