El 26 de Junio 2016 | 15:01
Cuando Sega dejó de fabricar consolas, sus diferentes franquicias fueron distribuidas convenientemente entre las plataformas de las que antes eran sus rivales. La decisión sobre quién iba a qué, se tomó en base al público habitual de cada sistema, por lo que el hogar perfecto para Sonic parecían ser las consolas de Nintendo. De este modo el Sonic Team se asoció con Dimps para desarrollar un título de estilo clásico para Game Boy Advance, que recogiese el testigo portátil dejado por 'Sonic Pocket Adventure' para Neo Geo Pocket. 'Sonic Advance' fue además el primer juego que hizo uso de la conexión entre Game Boy Advance y Game Cube, ya que permitía interactuar con 'Sonic Adventure 2 Battle', que se publicó poco después para el cubo de Nintendo.
¡Ese no es mi Knuckles!
En su búsqueda constante de lograr la absoluta dominación mundial, el Dr. Robotnik (alias Eggman) se dirige de nuevo a South Island dispuesto a robar las Esmeraldas del Caos. Su nuevo plan requiere de estas poderosas y valiosas joyas, y aunque el científico es consciente de que no pasará inadvertido a la vigilancia de Sonic, le ha preparado una sorpresa especial para mantenerlo distraído. Tal y como sospechaba Eggman, Sonic le ha estado siguiendo los pasos, a sabiendas de qué había regresado a South Island para tratar de hacerse una vez más con las caóticas esmeraldas. Sin embargo Sonic se topa de bruces con la trampa de Eggman, lo que en un primer momento parece ser Knuckles buscando pelea. ¿Qué le pasa ahora a ese equidna? ¿Por qué vuelve a atacar a Sonic? La respuesta aparece en mitad del combate, y es que no se trata de Knuckles, si no de una malvada réplica suya obra de Eggman. Puede que con esto Robotnik haya conseguido despistar momentáneamente a Sonic, pero sus amigos no tardarán en llegar dispuestos a detener sus malvados planes. Más vale que ese carahuevo tenga algún as escondido en la manga, porque si no va a saber lo que es pasar un mal rato.
Pasar de "first party", a "third party", no es nada sencillo. Pocas compañías se han visto obligadas a dar este salto, pero era lo que demandaban los tiempos para Sega. Por suerte en su caso, este cambio se vio suavizado debido a que la compañía siempre había operado como desarrolladora de juegos para sistemas que no eran suyos. En sus comienzos vimos sus títulos en numerosos sistemas, incluso en NES, y siempre estuvieron apoyando el PC.
Con todo este bagaje, les resultó algo más fácil verse desarrollando juegos para las que antes eran sus rivales. Y en medio de todo esto nos llegaba 'Sonic Advance', un juego que bebe directamente de los títulos del erizo para Mega Drive. Tanto es así que reutiliza el ingenioso motor de físicas empleado en ellos, que fue desarrollado por Yuji Naka. Gracias a esto, en cuanto nos pongamos a los mandos notaremos la familiar sensación de jugabilidad fluida y suave de aquellos primeros Sonic, con un control que responde estupendamente bien.
Es francamente agradable encontrarse con esto más allá de los juegos que salieron en la primera mitad de los años 90, y de hecho ningún otro título posterior ha logrado replicarlo, por más que se ha intentado. Ni siquiera la propia Dimps, que desarrolló este juego, fue capaz de captar todo esto en 'Sonic the Hedgehog 4', al no poder usar el motor de físicas original. Esto demuestra la importancia, y la genialidad de la creación de Yuji Naka, herramientas clave para conseguir el gran éxito de los primeros juegos del erizo.
A la vieja usanza
El resto de la fórmula clásica permanece aquí, podemos recorrer los escenarios explorando, o tratando de superarlos lo más rápidamente posible. Recogemos anillos, eliminamos robots, y hacemos toda clase de maniobras espectaculares por rampas, loopings, y demás artilugios dispuestos para la diversión. Hasta podremos grindar barandillas, como en 'Sonic Adventure 2'. Cualquiera que haya disfrutado de los Sonic originales de Mega Drive, empezará a gozar desde el momento en que comience la partida.
Podemos elegir personaje entre cuatro diferentes: Sonic, Tails, Knuckles, o Amy. Además haciendo un pequeño truco, podemos hacer que Tails siga a Sonic como ocurría en 'Sonic the Hedgehog 2', y 'Sonic the Hedgehog 3'. Cada personaje posee su propio slot de guardado para sus progresos, por lo que habrá que superar cada fase con todos, lo que alarga notablemente la vida del juego. Además cada uno cuenta con sus propias habilidades, por lo que se hará mucho más ameno con cada uno, y también podremos ir explorando distintas rutas.
Sonic, Tails, y Knuckles. Se manejan igual a como lo hacían en los juegos para Mega Drive, con sus mismas habilidades. Sin embargo aquí encontraremos algunas más, como el botón de ataque que nos permite una mayor agilidad y versatilidad. Amy por su parte ofrece una experiencia de juego bastante diferente a la de sus compañeros, de hecho es recomendable dejarla para el final, pues el nivel de dificultad con ella aumenta bastante. Y es que el simple hecho de no poder hacerse bola, ya nos va a obligar a cambiar nuestra estrategia de juego radicalmente.
Disponemos de un total de seis niveles, todos variados y de bellos diseños, con el colorido rebosante habitual. Además disponemos de las habituales fases de bonus donde tendremos la ocasión de conseguir las Esmeraldas del Caos, y si logramos las siete, podremos acceder a un último nivel donde nos enfrentaremos al épico desenlace de la aventura. Estos niveles especiales nos proponen recoger cierta cantidad de anillos mientras descendemos por un tubo en una tabla aerodeslizadora, evitando las molestas bombas que nos harán perder anillos.
Dos colas mejor que una
A las fases de bonus se accede mediante un muelle especial escondido en los niveles, y una vez que consigamos una esmeralda, nos contará para todos los demás personajes. Por esto será Tails el más indicado para conseguirlas, ya que representa el nivel de dificultad más bajo debido a sus capacidades de vuelo y nado. Además de que con él será más fácil encontrar los muelles especiales ocultos.
Al final de cada fase nos estará esperando Eggman con alguna de sus invenciones, algo ya habitual en la serie. El nivel de dificultad general no es demasiado alto, pero tampoco bajo, y la curva de aprendizaje se ajusta bastante bien. Su capacidad para enganchar al jugador es bastante alta, especialmente si sois habituales del erizo, ya que aquí encontrareis todo lo que un buen fan desearía encontrar en un Sonic.
Completar la aventura principal nos llevará bastante tiempo, y el componente de rejugabilidad es alto, ya que el juego no termina cuando veamos la secuencia final. Disponemos de varios modos de juego, como el modo time attack, con el que podremos tratar de superar los niveles en el menor tiempo posible, para después intentar batir nuestro récord. También encontraremos el modo versus, que permite jugar hasta cuatro jugadores simultáneos. Para esto habrá que interconectar hasta cuatro Game Boy Advance, y gracias a ello podremos disfrutar de épicas partidas con nuestros amigos, ya sea luchando por llegar el primero a la meta, o viendo quién rescata mas Chao perdidos.
Pero sin duda la opción que más de vuestras horas puede beberse, es el Tiny Chao Garden. En este lugar podremos criar a un pequeño Chao, desarrollando sus habilidades, y viéndole crecer día a día. Para ello emplearemos los anillos que hayamos conseguido durante el juego principal, pues son la moneda de cambio para comprar cosas para nuestro Chao. Podemos comprarle fruta para que desarrolle una habilidad concreta, o algunos objetos especiales para que se entretenga.
¡Nadie puede vencer a mi Chao!
Lo mejor es que después podemos transferir este Chao a 'Sonic Adventure DX', o 'Sonic Adventure 2 Battle' de Game Cube, y emplearlo en los diferentes modos de esos juegos. Debido a que el tiempo en realidad no transcurre en el Tiny Chao Garden, podemos conseguir un autentico súper Chao sin complicarnos en sus evoluciones, o en que muera de viejo. Con lo que será mucho más fácil superar los retos de los Chao en esos títulos para Game Cube una vez lo transfiramos.
Si no queremos tener que jugar al juego principal para conseguir anillos para el Tiny Chao Garden, podemos hacerlo también jugando a dos mini-juegos diferentes: El primero de ellos nos propone jugar a un Piedra, Papel, Tijera, muy especial, ya que lanzaremos cartas contra otras que van desfilando por la pantalla a fin de derribarlas. Si la carta que lanzamos vence a la carta con la que impacte, la eliminaremos y ganaremos anillos para nuestra cuenta. El segundo mini-juego es el clásico juego de memoria con cartas, que habrá que ir volteando para ver si somos capaces de emparejar.
Con todos estos modos tendremos diversión para semanas, y si además contamos con los títulos del erizo para Game Cube compatibles, podemos tener juego para meses. Con 'Sonic Advance' es difícil aburrirse, ya que siempre tendremos algo que hacer. Incluso podemos quedarnos en el test de sonido deleitándonos con la excelente banda sonora del juego, que por cierto incluye numerosos remixes de temas provenientes de los dos primeros Sonic para Mega Drive.
Redondeando todo esto, nos encontramos un apartado gráfico estupendo, con personajes detallados que apuestan por un aspecto "dibujado", distinto de lo visto en los títulos del erizo anteriores en 2D. Es sin duda de lo mejor que podéis encontrar dentro de este género para Game Boy Advance, y tratándose de este sistema tan prolifero y con tan magnifico catálogo, eso no es precisamente moco de pavo.
El nacimiento de una peculiar relación
Su legado se extendió a lo largo de otras dos secuelas, para después dar el salto a Nintendo DS con 'Sonic Rush' y siguientes. Esto supuso el principio de la relación entre Dimps y Sonic, lo que a lo largo de los años nos traería bastantes juegos, especialmente en portátiles. El último título del erizo de este estudio, fue la versión para 3DS de 'Sonic Lost World'. Desde entonces parece que su relación con la mascota de Sega se ha roto, no se sabe si para siempre o si volverán en un futuro.
Años más tarde se llevó el juego a Nokia N Gage; el peculiar hibrido entre consola portátil y teléfono móvil que pasó sin pena ni gloria hace ya unos años. Esta versión recibió el nombre de 'Sonic N', y se convirtió en uno de los títulos más populares del sistema. Básicamente es el mismo juego, pero con menos modos y funciones, ya que por ejemplo no cuenta con el Tiny Chao Garden. Además la particular relación de pantalla vertical de esta consola-móvil obligó a reajustar la pantalla con respecto al original en horizontal, por lo que el campo de visión quedaba bastante reducido. Esta versión también cambiaba los temas musicales de los primeros Sonic, al no contar con los derechos de Masato Nakamura, su compositor original.
También se llevó años más tarde a Android, pero una vez más se perdieron las mismas funciones que en 'Sonic N', y además el título no parecía funcionar todo lo bien que debería en estos dispositivos. Debido a esto, dicha versión jamás fue publicada fuera de Japón. Y ya que hablamos del País del Sol naciente, desde hace ya un tiempo se puede disfrutar allí de 'Sonic Advance' en la Consola Virtual de Wii U, pero Sega no parece decidirse a traerlo a occidente. Aunque quizá acabe siendo una de las sorpresas que nos tienen reservadas para el 25 aniversario.
Para jugarlo en la actualidad, mientras Sega no se decida a traerlo para la Consola Virtual de Wii U, la única opción sigue siendo el cartucho original. O la emulación, claro. Si os conformáis con el cartucho suelto, no debería ser difícil de encontrar. Otra cosa sería ya conseguirlo completo, pero aún así podríais añadirlo a la colección por unos 20 o 30 euros. También existen varias recopilaciones que lo incluyen junto a otros juegos del erizo para la misma consola, y que son bastante comunes.
Un comienzo brillante
'Sonic Advance' os devolverá muy eficazmente las mismas sensaciones que ofrecían los primeros Sonic para Mega Drive, y además se trata de un juego francamente extenso que os dará cientos de horas de diversión. El erizo no pudo entrar con mejor pie en las consolas de Nintendo, y los usuarios de estas supieron agradecer este grado de calidad en sus títulos. Es por esto que estamos ante un juego largamente recordado y querido por muchos, y no sin razón. Si queréis saber por qué, no dudéis en darle una oportunidad, no os decepcionará.
Lo mejor:
Cientos de horas de diversión gracias a sus modos de juego. El Tiny Chao Garden. Es un Sonic clásico en toda regla. Su multijugador. La conexión con Game Cube. Su apartado técnico y sonoro.
Lo peor:
Los recortes de la versión para N Gage y Android.