Publicado en Japón a finales de 1999, y ya en 2000 en el resto del mundo, 'Shenmue' era la culminación de años de trabajo y esfuerzo dentro de los estudios de desarrollo de Sega, concretamente de los de AM2 con el mismísimo Yu Suzuki al frente. Un proyecto terriblemente ambicioso que batiría todos los récords de complejidad y costes de desarrollo hasta la fecha, tanto que en gran medida acabaría por ser el último clavo en el ataúd de Sega como fabricante de consolas, ya que por desgracia no alcanzó el éxito necesario.
El comienzo de una saga
La vida de Ryo Hazuki era tranquila hasta una fría y nevada mañana de 1986, cuando el joven estudiante corre a su casa en el barrio de Dubuita en Yokosuka, Japón, tras recibir el aviso de que unos asaltantes han tomado el dojo de artes marciales de su padre. Al llegar se encuentra a un hombre elegantemente trajeado, acompañado de dos guardas vestidos de negro. El que parece ser su jefe le demanda al padre de Ryo que le entregue un espejo del que el muchacho jamás había oído hablar. Su padre se niega en redondo mientras los guardas retienen a Ryo, que en un descuido logra evadirse y ataca al hombre del traje elegante, que para su sorpresa le derriba sin apenas esfuerzo. Es entonces cuando el agresor agarra a Ryo por el cuello y exige a su padre que le entregue el espejo, o de lo contrario lo pagará con la vida de su hijo. Sin más opción, el padre de Ryo le dice al agresor donde se encuentra el espejo, pero antes de marcharse, el agresor le asesta un golpe mortal con una poderosa técnica de artes marciales. Finalmente los asaltantes abandonan el lugar dejando a Ryo junto al cadáver de su padre mientras un único deseo crece en su mente, el de vengarse.
Ya en su momento fue difícil entender el concepto de juego que nos proponía 'Shenmue', hasta el punto de que la propia Sega hizo campaña para tratar de que los usuarios comprendiesen lo que se iban a encontrar al conectar sus Dreamcast. Cabría esperar que hoy, casi 20 años más tarde, esto fuese algo más sencillo de explicar. Pero lo cierto es que por mucho que hayan cambiado las cosas, 'Shenmue' sigue siendo algo que no se llega a comprender a ciencia cierta hasta que se juega.
Básicamente el juego se desarrolla como un RPG, ya que asumimos el papel del protagonista y recorremos los escenarios interactuando con otros personajes. Yendo de acá para allá, atendiendo pequeños recados, siguiendo pistas, o incluso resolviendo algún puzle. Sin embargo no es necesario seguir una ruta prefijada, ya que podemos tomarnos todo el tiempo que queramos para avanzar la historia. Si bien es cierto que si tardamos demasiado podemos llegar a desencadenar un final nada agradable...
Nuestra aventura comienza en la habitación de Ryo, que hará las veces de punto de inicio durante toda la partida. Lo mejor al principio es familiarizarnos con los controles, que por cierto son un tanto peculiares. Nos puede llevar un rato aprender a desenvolvernos por el juego, por ello es aconsejable invertir algo de tiempo en explorar la casa de los Hazuki antes de salir a explorar el mundo.
Además explorando podremos familiarizarnos con las mecánicas de investigación, ya sea encontrando objetos de bonificación como cintas de música con la banda sonora del juego, o elementos clave para avanzar en la aventura. Cada vez que algo importante ocurra, Ryo tomará nota en su agenda, la cual por cierto es la única parte de todo el juego en castellano, ya que tanto textos como voces estarán en inglés.
El idioma puede ser un inconveniente si no os defendéis bien con el inglés, pero esta libreta de notas en castellano nos ayudará a no perdernos al recoger los acontecimientos importantes, como por ejemplo si hemos quedado con cierta persona al día siguiente a una hora concreta. También ayuda el hecho de que se trata de un inglés bastante sencillo, sin términos complicados. Y además los diálogos están subtitulados, para que no dependamos exclusivamente de nuestro oído.
Durante esta parte inicial del juego explorando la residencia de los Hazuki, podemos llegar a pensar que se trata más bien de una aventura gráfica, y gran en parte es así. Si hemos jugado a juegos más recientes como 'Heavy Rain', nos costará menos adaptarnos. Pero conforme profundicemos en el juego descubriremos que sus mecánicas son demasiado complejas como para encasillarlas en un solo género.
No podía faltar el toque arcade
También es importante tener en cuenta el sistema de combate, ya que es una parte fundamental del juego. Estas peleas se desarrollan al más puro estilo 'Virtua Fighter', como reflejo de cuando el título era conocido como 'Virtua Fighter RPG' durante sus etapas iniciales de desarrollo. Aquí el juego puede pasar a ser un uno contra uno tradicional, o parecerse más a un beat'em up teniendo que hacer frente a varios enemigos a la vez.
Para familiarizarnos con estos combates podemos entrenar en ciertos puntos del mapa, aprendiendo las combinaciones para realizar los diferentes tipos de ataque. También podemos conseguir nuevas técnicas, unas veces aprendidas directamente de personas que nos encontremos, y otras aprendidas mediante pergaminos que explican cómo realizar cada técnica de artes marciales. Una vez dominada una técnica, esta se añadirá a la lista de movimientos, y podremos usarla cuando queramos durante los combates.
Otro punto importante son los famosos QTE o "Quick Time Events", que a día de hoy nos resultan a todos ya más que de sobra conocidos. 'Shenmue' no fue el primer juego en incorporarlos, pero si que los puso de moda haciéndolos habituales en muchos tipos de juegos de acción. Durante determinadas escenas deberemos pulsar rápidamente el botón que aparezca en pantalla, si acertamos la escena continuará, mientras que si fallamos puede suponer nuestra derrota y tener que repetir toda la secuencia, o simplemente ser un fallo sin consecuencias y darnos otra oportunidad dependiendo de la situación.
Cada noche Ryo deberá regresar a su casa y dormir en su cama, por lo que deberemos estar pendientes del reloj cuando se vaya acercando el final del día. También deberemos estar atentos al reloj si hemos quedado con alguien a una hora concreta, pues cada personaje del juego desarrolla su vida de forma independiente. Por ejemplo, si queremos ver a una persona concreta, y alguien nos ha dicho que esa persona suele estar en un punto determinado a cierta hora del día, deberemos encontrar el lugar y estar allí cuando dicha persona aparezca.
Es aquí donde la complejidad del juego empieza a hacerse evidente, y más si tenemos en cuenta cómo eran las cosas cuando salió originalmente. Básicamente 'Shenmue' era como un simulador de una pequeña ciudad, con sus habitantes, sus comercios, e incluso animales, ya que hasta podemos hacernos cargo de un pequeño gatito huérfano al que podemos cuidar y alimentar cual mascota virtual.
Hasta tendremos que trabajar para ganar dinero llegado un punto concreto del juego, teniendo primero que buscar empleo, y luego levantarnos cada mañana a desempeñarlo. Naturalmente todo se desarrolla como una especie de mini-juego, pero deja bien claro que 'Shenmue' es algo más que una simple aventura de acción.
Y por supuesto no todo va a ser trabajar o investigar la muerte del padre de Ryo, ya que también tendremos tiempo para el ocio pudiendo escuchar música, coleccionando figuritas de algunos de los grandes personajes de Sega, o incluso yéndonos al salón arcade local a echar una partidita a juegos como 'Space Harrier', o 'Hang On'. Estos clásicos de Yu Suzuki están perfectamente emulados, y de hecho podemos llegar a desbloquear sus versiones domésticas para poderlos jugar en casa de Ryo cuando queramos.
Casi dos décadas después
Si no conocéis 'Shenmue', es muy probable que muchas de estas cosas os suenen de otros títulos más recientes, especialmente de la saga 'Yakuza' de la propia Sega. Y es que el legado de este juego se ha extendido por muchos otros juegos, creando escuela en varios aspectos que hoy en día nos resultan de lo más normales. Pero teniendo todo esto en cuenta, ¿merece la pena realmente jugar a 'Shenmue' hoy en día? ¿Va a ser capaz de sorprendernos ahora como lo fue en su momento?
Lo más probable es que no nos sorprenda, al menos a nivel técnico. En su momento fue toda una revolución, pero actualmente ya hemos superado este nivel de complejidad ampliamente. Sin embargo eso no quiere decir ni mucho menos que no merezca la pena jugar actualmente a 'Shenmue', pues aún nos queda una apasionante historia llena de personajes únicos, con una ambientación magistral, y un carisma muy especial del que solo seremos conscientes a medida que progresemos en el juego.
¿Merece entonces la pena jugarlo a estas alturas? Sin ningún género de duda. O al menos merece darle una oportunidad, ya que aunque no es un tipo de juego accesible para todo el mundo, si te engancha lo hará de por vida. Por algo se ha demandado tanto durante décadas su regreso, porque los que tuvimos la inmensa suerte de conocerlo en su día guardamos un recuerdo imborrable de él.
Por suerte ahora todos podrán conocer 'Shenmue' gracias a su inminente reedición, y decidir por sí mismos si les gusta o no. Pero si lo que queréis es jugar al juego original de Dreamcast tal y como fue concebido en su día, aprovechad ahora que la reedición parece haber reducido ligeramente su precio habitual. Si buscáis un poco, podéis añadirlo a la colección incluso por menos de 50 euros.
Finalmente queda por tratar el aspecto técnico, que en su día fue sencillamente espectacular. El potencial de Dreamcast se vio estrujado al límite, con unos personajes enormemente detallados y unos escenarios dignos de un cuadro. La pasión por el detalle se aprecia en cada pequeño rincón, y en aquel entonces era más complicado hacer estas cosas de lo que lo es ahora.
Por último, nos queda hablar del sonido, del que no podemos más que deshacernos en elogios hacia su increíble banda sonora. Esta ambientará a la perfección desde el primer momento con temas que quedarán por siempre grabados en vuestra memoria, generando sentimientos y emociones como pocos juegos habían conseguido hasta entonces. El doblaje en inglés es un poco "de la época" en cuanto a calidad, pero se le perdona.
En resumen, una autentica obra maestra que tal vez no esté hecha para todo tipo de jugador, o que es posible que ya no impresione tanto a nivel técnico como hace dos décadas. Pero que aun así es perfectamente capaz de atraparos y dejaros con las ganas de saber qué ocurre en el siguiente episodio, el cual por cierto también analizaremos aquí la semana que viene. Para terminar, si queréis saber más acerca de 'Shenmue', no os perdáis el reportaje que le dedicamos a la serie y que podéis leer aquí.