La primera vez que alguien se encuentra cara a cara con este juego, tiene una sensación que va a caballo de ser, mitad agradable y mitad decepcionante. Aunque esta última mitad es mayor cuanta menos apertura de miras tengamos con respecto al título, ya que recordemos, salió en 1993.
En su día sí que llamaba la atención de cualquiera pero hoy, muchos lo ignorarán por su acabado infantil
A pesar de ello Taito consiguió en verdad que este 'Lufia y la Fortaleza del Mal' ofreciera una buena experiencia como RPG sólido. Si bien es cierto, sólo parecía que le faltaba ese algo extra que diferencia a los grandes RPG de los que aún no han entrado en el reino de la grandeza.
Aun así, si tenemos a bien ofrecerle unas horas de juego a este título, resultará ser toda una agradable experiencia, aunque no sea exactamente algo innovador en el género.
Esta saga en sus orígenes parece haber sido fuertemente influenciada por la IP 'Ys', no solo por su estilo de juego o el parecido de sus personajes, sino por ese ambiente característico de normalidad que tenía. Pero a diferencia de 'Ys', a esta saga SÍ se le puede considerar un RPG de verdad, ya que, aunque tiene sus defectos, son más sus virtudes al respecto lo que lo hacen un genial juego. Vamos allá.
Jugabilidad
En 'Lufia y la Fortaleza del Mal' controlas a un héroe que se puede nombrar como queramos pero, al igual que ocurre con la saga 'Zelda', lo lógico es llamarlo como debe ser, en este caso Maxim. La historia tiene lugar 100 años después de un tiempo espantoso cuando cuatro dioses del mal llamados Sinistrals, habían descendido sobre la Tierra causando estragos entre su población.
Estos dioses fueron derrotados por nuestro héroe Maxim, y sus amigos. Es más, el prólogo del juego, que controlamos nosotros, nos hace partícipes de dicha parte de la historia con unos niveles de poder muy altos.
Después de estos acontecimientos, la aventura avanza 100 años y empieza la verdadera odisea. Básicamente, investigaremos una serie de terribles acontecimientos provocados por Gades (un Sinistral) pero es algo que si queréis saber más, deberéis jugar.
Para los más profanos en este género la historia podría parecerles bastante normal, pero, ahí es donde os equivocaríais. Aunque el juego comience con la realización de tareas pequeñas para los aldeanos, luego, de repente, nos veremos inmersos en la misión de salvar al mundo. La trama que gira en torno a los Sinistral es increíble, y las vueltas de tuerca que genera su argumento una y otra vez, sorprenderá al más pintado.
'Lufia y la Fortaleza del Mal' incorpora el tradicional sistema de batalla por turnos. Esto logra un aspecto novedoso ya que, además de un panel de acción que acompaña a nuestros ataques, magias o habilidades, la vista frontal que representan en pantalla los muchos enemigos que encontraremos, nos recuerda poderosamente a grandes sagas como 'Dragon Quest'.
Como en todos los juegos de rol, se selecciona a partir de movimientos como "Ataque", "Magia", "Habilidad", "Correr" y "Defensa". Los enemigos no son inteligentes ya que, en esos tiempos, estaban nivelados exclusivamente por parámetros fijos, pero eso sí, dicho aspecto está muy bien conseguido por lo que la sensación que dejarán estos engendros es la de que son fuertes, muy fuertes.
Destacar también que, mientras avanzamos por sus mazmorras, cada personaje principal hará gala de sus habilidades para poder completarlas, salvando los obstáculos, trampas y, sobre todo, puzzles que nos encontremos con objetos varios que serán imprescindibles para ello. Además en determinadas mazmorras nos será imposible deambular por ellas sin la adquisición de nuevas habilidades o personajes, tenedlo en cuenta.
Gráficos
Si echamos un primer vistazo a su apartado visual, a cualquiera le parecerá una aventura realizada con el RPG Maker. Esto es así debido a que en su mayor parte, los gráficos son excesivamente simplistas e infantiles, demasiados llenos de color expresarán algunos.
Es más, la mayoría de las áreas del juego, sobre todo las ubicaciones referentes a mazmorras y demás, parecen prácticamente iguales. Aunque la mayoría de las ciudades y lugares en el mundo apenas se distinguen salvo por algún detalle, en general este apartado ofrece un pobre trabajo de variedad y paletas.
Se le perdona el restarle puntos teniendo en cuenta su fecha de lanzamiento, aunque duela a la vista a veces.
Los sprites son estilo típico super-deformado, los que más abundan en cualquier RPG que se precie de la época, así que no es muy destacable dicho trabajo de los diseñadores.
Mención aparte tienen los enemigos que, aunque sus diseños sean más desarrollados, prácticamente son imágenes fijas que restan intensidad a las batallas.
Sonido
Sonoramente el juego posee un repertorio bastante limitado, por lo que disfrutar mucho con su banda sonora será un ejercicio bien de nostalgia o bien de fanatismo hacia el título o la saga.
Algunas piezas que nos iremos encontrando en el juego, cumplen su cometido. Sobre todo se podría destacar de entre todas las que abarcan, la canción de introducción, la del sub-mundo, la de la fortaleza y, porque no, la de batallas finales contra jefes. Luego hay otras como las de las peleas simples que es demasiado repetitiva y huye de la fanfarria necesaria para meternos más de lleno en las mismas.
Dificultad
Es un juego de rol relativamente sencillo donde encontraremos algunos picos de intensidad determinados pero que, en definitiva, no supondrá más de 30 horas completarlo.
Lo que más destaca en este apartado es la posibilidad de quedarnos pillados con algún que otro puzzle de las mazmorras que visitemos. Estos no es que sean excesivamente complicados, es más bien, que por algún casual no caeremos en su solución aunque la tengamos prácticamente delante.
Se echa en falta la variedad de escenarios ya que, las ubicaciones que iremos completando no suponen mayor reto. Además la peculiaridad de lo pequeño de sus mapeados hace que la velocidad reducida de los héroes en las cuevas o castillos con respecto a los pueblos, se entienda a la perfección de cara a la durabilidad de estas.
De todas formas, ni los controles, ni los retos que nos ofrecen tienen mayor misterio que el de echarle unas horas y zanjar el asunto con una nota media en este aspecto.
Conclusión
He intentado ser imparcial y dejar a un lado los sentimientos encontrados con este juego que marco mi infancia de vicio y, aunque lo aconsejo muy encarecidamente por sus altas dosis de comedia en los diálogos y por la agradable sensación que deja, podríamos llegar a considerarlo un juego flojo de cara a nuevas entregas.
Como curiosidad comentar que Taito tenía previsto originalmente lanzar dicha versión de 'Lufia y la Fortaleza del Mal' para Mega Drive , pero canceló el proyecto en algún momento de su desarrollo por motivos que nunca fueron explicados. Lo raro es que por lo menos aparecieron dos anuncios a toda página en revistas del sector en Estados Unidos, anunciando que el juego si saldría en dicha consola. Incluso se llegó a ver en el segundo anuncio un retraso hasta la primavera de 1995, con el lema "Vale la pena la espera", pero, la espera fue eterna y al final se comprobó que este juegazo no vería la luz en la consola de Sega.
Y bueno, sabiendo que se puede disfrutar en cualquier emulador existente, resaltar que desde hace poco mi queridísimo amigo Lukas, sacó un parche para tenerlo completamente en castellano, jugarlo se hace primordial, no sólo por entender parte del origen de los RPG de corte japonés, sino también porque la historia de 'Lufia y la Fortaleza del Mal' merece ser disfrutada y recordada.