El 17 de May 2015 | 17:06
En 1996 nacía la consola de 64 bits de Nintendo, y entre sus primeros juegos se encontraba la secuela del exitoso 'Super Mario Kart' de SNES. En la consola de 16 bits todo había sido una especie de experimento, una prueba para saber que tal recibiría el público un juego de carreras de Mario. Los resultados no pudieron ser mejores, de modo que en esta continuación se puso toda la carne en el asador y se definieron las reglas a seguir por toda la serie en el futuro. En otras palabras; 'Mario Kart' es hoy en día lo que es gracias en gran medida a este título que hoy analizamos.
Un motor de 64 caballos
Todo está preparado, los karts rugen en la pista esperando que se de la salida. A tu derecha está Donkey Kong, a tu izquierda Wario. Ninguno de los dos ha querido perderse la ocasión de darte una paliza. Lakitu desciende de los cielos montado en su nube con la bandera a cuadros, el semáforo se enciende y sabes que quedan segundos para que todo comience. Luz roja, segunda luz roja, y... ¡Luz azul! Con una explosión los karts arrancan y comienza la carrera. Ningún piloto cede su puesto, ni siquiera ese canijo de Toad. Una sombra tapa el sol por un lateral, es el enorme Bowser, esta vez no dejará que le humilles como la anterior. Trata de echarte de la pista a empujones, pero algo llama su atención; tras la siguiente curva hay varios contenedores de ítems... A duras penas logras hacerte con uno, pero es una ridícula cáscara de plátano. ¿Qué puedes hacer con eso? Sin mucha esperanza apuntas y le das a Bowser de lleno, ¡eso ha estado muy bien! Ya vas segundo, solamente Yoshi se interpone entre el primer puesto y tú. Entonces Peach te alcanza y te mira sonriendo, es muy mona, pero no la dejaras pasar fácilmente. En ese momento ella te guiña un ojo y pierdes la concentración por un segundo, lo justo para zamparte ese caparazón verde. ¿Quién lo habrá tirado? Entonces Luigi te adelanta mirándote con cara siniestra, no cabe duda de que el segundón quiere ser campeón. ¡Las cosas se complican, es la última vuelta! Por suerte la siguiente caja de ítems te da justo lo que necesitas; ¡una estrella! La usas sin dudar, sales disparado barriendo la pista, haces el atajo que hay justo antes de la meta y... ¡Victoria! Uf, por los pelos del mostacho... ¡Que duro es ser fontanero y piloto!
Uno de los géneros que más beneficiados se vieron por la llegada de los gráficos poligonales en 3D fue el de conducción, esa tridimensionalidad le sentaba de maravilla a los juegos de carreras, y muchos títulos supieron aprovecharla. 'Super Mario Kart' había sido un éxito con su "modo 7", pero eso era ya prácticamente prehistoria a pesar de haber sido lanzando hacía tan solo 4 años. Así avanzaban las cosas a principios de los 90.
Nintendo no dudó ni por un instante en aprovecharse de este salto en los juegos de carreras, y se lo aplicó a este título de lanzamiento de su flamante Nintendo 64. La diferencia con su predecesor era abismal, ahora todo se movía con mayor fluidez que nunca, y las pistas ya no eran planas, ahora podían tener subidas y bajadas y lucir mejor aspecto que nunca. Además se mostraba la carrera a pantalla completa, sin marcos ni mapas que ocupasen media pantalla, consiguiendo así el mejor resultado posible.
'Mario Kart 64' dejaba atrás a su predecesor en muchas cosas, pero sin duda la mayor innovación fue permitir por primera vez jugar a más de dos jugadores. El juego conservaba su modo Grand Prix para uno o dos jugadores, pero ahora se incluía también un modo versus para tres o cuatro adversarios. Esto supuso un salto tremendo, e hizo buen uso de las capacidades multijugador de Nintendo 64 aprovechando sus novedosos cuatro puertos para mandos.
El modo batalla también había evolucionado, y tampoco se privó de ofrecer partidas a cuatro. Ya solo por esto la diversión se disparaba con respecto a su predecesor, pero 'Mario Kart 64' no se conformó solo con eso. Para empezar se eliminó el sistema de monedas del juego anterior, a fin de hacer más sencillas y directas las carreras. Los corredores manejados por la consola esta vez serían algo menos tramposos (algo), pues ya no podían "venirse arriba" cuando les apeteciese como en el anterior arrasando la pista como si llevasen una estrella.
¡Que viene un caparazón azul!
Además los corredores de la IA ahora debían respetar las normas del uso de ítems, comportándose de manera más parecida a un piloto humano. Eso si, las trampas nunca las dejaron atrás del todo, por lo que aun había que andarse con cuidado con ellos. Las nuevas 3D permitían también poner obstáculos más complejos en la pista, como trafico en una ajetreada autopista, o un tren que podía fastidiarnos la carrera si pasábamos justo cuando llegaba a un paso a nivel.
Se añadieron nuevos ítems, como el súper champiñón dorado que luego tardó varias entregas en regresar. O el temible caparazón azul que tantas pesadillas ha provocado a los jugadores durante generaciones y que hizo aquí su debut. Otra novedad era la caja falsa de ítems, un objeto que bien colocado podía hacer que uno de nuestros rivales maldijese nuestra estampa muy severamente. Y es que en 'Mario Kart' hay que ser un poco "troll" si se quiere ganar.
Disponemos de un total de 16 pistas, 4 por cada una de las 4 copas disponibles. A esto hay que sumarle otras 4 pistas exclusivas del modo batalla. La gran mayoría de estos circuitos ha acabado regresando en alguna entrega posterior de la saga, demostrando así el cariño que se tiene por este título. Aprenderse los trazados será crucial, especialmente para saber donde están los atajos. Por suerte para investigarlos tenemos el modo contrarreloj, que además registra nuestros mejores tiempos por si queremos picarnos con otros jugadores de una forma diferente.
Podremos escoger entre ocho personajes distintos, cifra que puede parecer escasa, pero que es más que suficiente para divertir. Los elegidos son: Mario, Luigi, Peach, Yoshi, Bowser, y Toad, como personajes que regresan del título anterior. Y Wario y Donkey Kong como nuevas incorporaciones. Cada personaje tiene sus propias características, y dependerá de nosotros escoger el que mejor se adapte a nuestro estilo de juego. Eso, o escoger a nuestro personaje favorito y adaptarnos nosotros a él.
Por último tenemos disponibles cuatro niveles de dificultad, por un lado las típicas cilindradas de 50cc, 100cc, y 150cc. Y por otro el modo extra, que es básicamente el modo espejo donde los circuitos se muestran invertidos descolocando bastante al jugador. Con todos estos modos y opciones tenemos juego para meses e incluso años, y su modo multijugador asegura diversión de forma prácticamente infinita.
Polígonos y sprites
Gráficamente los circuitos muestran un aspecto colorido y aparecen representados con unos fluidos gráficos poligonales. Sin embargo el diseño visual de algunas pistas puede resultar algo simple, echándose de menos algunos detalles más. Los corredores están recreados mediante sprites en 2D prerenderizados, algo un tanto incomprensible en un sistema tan capaz de haber movido personajes poligonales. El resultado estético no es malo y las animaciones son buenas, pero Nintendo 64 habría sido más que capaz de mover ocho corredores poligonales sin complicaciones, incluso a pantalla partida.
La banda sonora es bastante animada y cuenta con temas pegadizos que acompañan perfectamente las carreras. Todos los personajes cuentan con voces digitalizadas y hablaran durante la partida, dándole un toque más simpático al juego. Por último el control responde bastante bien, si bien ya sabéis lo frustrante que puede ser a veces un 'Mario Kart', y este no iba a ser una excepción. Echadle paciencia o jugad a otra cosa, de lo contrario puede que vuestros vecinos acaben viendo salir volando un mando de Nintendo 64 por la ventana de vuestra casa.
Para jugarlo en tiempos modernos lo mejor es acudir a la Consola Virtual de Wii donde lo tenéis disponible. Recordad que la Consola Virtual de Wii es perfectamente compatible con WiiU. Sin embargo nosotros os recomendamos esperar un poco, pues ahora que los juegos de Nintendo 64 por fin han llegado a WiiU, es solo cuestión de tiempo que este título esté disponible directamente para ella.
Si lo que queréis es el cartucho original, por alguna razón los juegos de Nintendo 64 no están tan valorados de media como los de sus hermanas de 8 y 16 bits, por lo que podéis conseguirlo por un precio que ronde entre los 20 y 40 euros, dependiendo de si lo queréis con su caja y manual o si solo buscáis el cartucho para jugar. Es una forma estupenda de mejorar vuestra colección de Nintendo 64 con un título tan altamente recomendable e importante dentro de la historia de esta saga.
Indispensable si os gusta la saga 'Mario Kart', pues sentó las bases de lo que es en la actualidad. A pesar de tener casi 20 años sigue siendo totalmente capaz de enganchar y divertir durante mucho tiempo, por lo que es recomendable para todo tipo de jugador sin importar su edad, o la generación de juegos en la que se hayan criado. Quizá haya propuestas mejores incluso dentro de la propia Nintendo 64 como 'Diddy Kong Racing', pero aun así 'Mario Kart 64' es un título imprescindible desde cualquier punto de vista.
Lo mejor:
Adictivo, divertido, y no caduca, no se puede pedir más. Añadir el modo para cuatro jugadores fue todo un acierto.
Lo peor:
Los personajes recreados en 2D, cuando Nintendo 64 habría sido perfectamente capaz de manejarlos en 3D.