En 1984 llegaba a los cines la primera película de los Cazafantasmas, y ese mismo año íbamos a recibir el juego correspondiente nada menos que de la mano de David Crane; uno de los fundadores de Activision. El título debutó en Commodore 64 y Atari 800, para poco después aterrizar también en Apple II y ZX Spectrum. Al año siguiente la popularidad del juego lo llevaría también a Atari 2600, y MSX. Mientras que ya en 1986 sería publicado en formato PC Booter; un sistema que permitía cargar el juego en diferentes ordenadores al margen de cuál fuese su sistema operativo. Las dos últimas versiones fueron la de Master System en 1987, y la de NES en 1988. ¿Sacarían ventaja las consolas de Sega y Nintendo de ser las últimas en recibir el juego?
¿A quién vas a llamar?
Nueva York. ¡Que gran ciudad! Gente por doquier, trafico imposible, y ahora además una plaga de... ¡Fantasmas! Nadie sabe de donde vienen, pero los niveles de energía psicoquinética negativa de la cuidad se están disparando, y eso es señal de que algo muy gordo se aproxima. Por suerte para ti como Cazafantasmas, eso supone hacerse de oro atrapando espectros. Pero para ello deberás crear y dirigir tu propio negocio de cazar fantasmas, comprando y preparando los equipos, y recorriendo las calles a toda velocidad para que no escape ni uno solo de esos valiosos espectros. Cada aparición fantasmagórica que atrapes aumentará tus fondos en el banco, pero también te servirá como entrenamiento para cuando el futuro de toda la cuidad e incluso del mundo entero, dependa de tu heroica acción. ¿Crees que podrás manejar el negocio sin quebrar? ¿O acabarás siendo moqueado por alguno de esos fantasmones? Más te vale tener éxito. ¡Porque si no Nueva York se convertirá en la capital de Fantasmalandia!
A comienzos de los 80, la idea de asociar películas de éxito y video juegos había traído más de un disgusto a alguna compañía. Sin embargo eso no amedrantó a los ingeniosos fundadores de Activision a la hora de adaptar al píxel este éxito cinematográfico, que arrasaba por entonces en los cines de todo el mundo. Los Cazafantasmas estaban por todas partes, y cualquier usuario de la época estaría ansioso de poder revivir las aventuras de estos personajes en su sistema doméstico.
¿Pero cómo recrear fielmente la película con las limitaciones de hardware de entonces? La tarea no era precisamente fácil, y lo más lógico habría sido apostar por un juego sencillito en plan 'Space Invaders' o 'Pac-Man', pero disfrazado de esta franquicia. Sin embargo David Crane y su equipo buscaron algo más, algo capaz de recrear cada parte del film original, aunque eso conllevase tener que hacer varios juegos distintos dentro de uno.
Y eso es básicamente lo que encontraremos al ponernos frente a este título, ya que una de las cosas que más sorprende es la variedad de situaciones que nos propone el juego. Nuestro objetivo es el mismo que en la película, abrir y gestionar nuestro negocio de cazar fantasmas, e ir mejorando y aprendiendo las mecánicas anti-espectros antes de que llegue la hora de la batalla final.
¡Ha picado uno!
Es aquí donde entra el toque estratégico, ya que una mala gestión del negocio puede dar al traste con nuestra partida. Al principio contaremos con un presupuesto limitado, y con él deberemos comprar los equipamientos necesarios para atrapar fantasmas. Por ejemplo si no tenemos trampas para encerrarlos, no podremos capturarlos y llevarlos al cuartel general. También habrá que comprar un buen coche para llegar a los lugares de los avistamientos, y aunque se nos ofrecen varios modelos con diferentes prestaciones (no en todas las versiones), a buen seguro que todos acabaremos escogiendo el entrañable Ecto 1.
Lo primero que veremos del juego, es un mapa con las calles de Nueva York y algunos fantasmas deambulando. Aquí manejamos el icono del logo de los Cazafantasmas, que representa nuestra ubicación, y hay que tener cuidado de no mover el icono a lo loco, pues luego deberemos recorrer ese camino montados en nuestro vehiculo, y es de suponer que no querremos tardar cinco minutos en llegar hasta el lugar del aviso.
Para saber cuando se produce uno de estos avisos, basta con fijarnos en los edificios del mapa. Cuando veamos que uno parpadea, bastará con desplazar el icono hasta él e iniciar el viaje. Es aquí donde pasaremos a manejar nuestro vehiculo por las calles, esquivando el denso trafico neoyorquino, y teniendo ocasión de atrapar algún fantasma por el camino si hemos comprado ya la útil Aspiradora de Fantasmas.
Una vez lleguemos hasta el lugar del aviso, tocará pasar a manejar directamente a los Cazafantasmas. Para ello colocamos la trampa en el lugar deseado, y continuación disparamos los rayos de protones para empujar a los fantasmas hacía la trampa. Una vez que los espectros estén sobre esta, la accionamos y fantasma atrapado. Si tardamos demasiado en hacerlo, las apariciones atacarán a nuestros Cazafantasmas y podemos perder alguno de ellos en pleno acto de servicio.
Me ha moqueado
Para reponer a los miembros del equipo caídos, recargar los equipos de protones, o vaciar las trampas, deberemos dirigirnos hacía el cuartel general de los Cazafantasmas. Si queremos emplear el dinero ganado en mejorar nuestros equipos, bastará con darnos un paseíto hasta la tienda. Este proceso se convertirá en rutina a medida que vayamos haciéndonos con el juego, pero aún nos quedará un importante reto por superar.
A medida que juguemos, la energía psicoquinética de la ciudad irá ascendiendo. Cuando su nivel sea alto, empezará a aparecer ocasionalmente el Hombre Marshmallow para destruir algún edificio. Y cuando finalmente alcance el punto crítico, tocará prepararse para la batalla final. Entonces todos los fantasmas, el Maestro de las Llaves, y la Guardiana de la Puerta, se dirigirán hacía el edificio central de Zuul. Es aquí cuando se evaluará nuestra labor como cazafantasmas, pues si no hemos recuperado al menos la inversión inicial de 10.000$, terminará la partida.
Si hemos llevado bien nuestro negocio, tocará adentrarse en el edificio para afrontar la batalla final. Es en este punto donde algunas de las versiones del juego pueden volver ciertamente frustrantes, no solo por el nivel de dificultad elevado, si no también por el sistema de juego de esta parte. Y es que deberemos subir uno a uno los pisos del edificio por las escaleras, mientras evitamos a un montón de molestos fantasmas que acabará con nuestros hombres con tan solo tocarlos.
Si sobrevivimos a esto, llegará el momento de enfrentarse cara a cara con Gozer, que por alguna razón desconocida sufrió un cambio de nombre en el juego para acabar llamándose "Gorza". Esta dura batalla es todo lo que nos separa del final del juego, que por desgracia no es gran cosa en la mayoría de versiones. En la de NES por ejemplo, nuestra recompensa será un cartel pésimamente escrito que con los años se ha acabado ganando la simpatía de los jugadores.
¿Eres tú un dios?
El resultado general del juego varía mucho dependiendo de en qué sistema lo juguemos, ya que lógicamente si jugamos por ejemplo en Atari 2600, nos encontraremos un juego ciertamente recortado. No obstante sorprende que en todos los sistemas se haya logrado respetar bastante al original, y más teniendo en cuenta las enormes diferencias de hardware.
En todos los sistemas se consiguió un trabajo bastante aceptable, sin embargo las versiones para Amstrad y NES dan la sensación de no sacar todo el provecho de estos sistemas, y de que podrían haber sido bastante mejores. Si nos ceñimos al apartado grafico, el alumno aventajado aquí es Master System. La consola de Sega se apuntó todo un tanto ofreciendo unos gráficos coloridos, detallados, y con elementos perfectamente reconocibles.
En el aspecto sonoro, todas las versiones tienen el honor de poder contar con el tema original de la película creado por Ray Parker Jr. De hecho en la pantalla de presentación aparecerá una especie de simpático karaoke para que cantemos la letra mientras suena la música. La calidad del sonido varía bastante de una versión a otra, pero en todas alcanza un nivel bastante bueno, destacando quizá algunas como la de Commodore 64, que incluso cuenta con algunas voces digitalizadas.
El juego incluye un sistema de passwords para poder retomar la partida más adelante, algo muy de agradecer pues se trata de una aventura bastante larga y compleja para su época. El nivel de dificultad se dispara en la parte final, por lo que no os bastará solo con haber llevado bien el negocio para poder completarlo. Es bastante probable que en las primeras partidas paguéis la novatada y os toque reempezar, sin embargo este proceso no se suele hacer molesto, ya que si nuestro negocio fracasa será muy probablemente por error nuestro y no porque el juego sea traicionero.
Colecciono esporas, mohos y hongos
A la hora de elegir qué versión jugar, nosotros os recomendamos dejaros llevar por vuestra afinidad personal hacía cada sistema. Sin embargo si no queréis empaparos de nostalgia y simplemente queréis disfrutar del juego de la mejor manera posible, entonces nuestra recomendación va para la versión de Master System. Y es que no solo cuenta con el mejor apartado gráfico de todas, si no que también se juega francamente bien. Además es probablemente la más fácil de encontrar y jugar de todas las versiones.
Cabe mencionar también que aunque haya un juego con exactamente el mismo nombre en Mega Drive/Genesis, este no tiene nada que ver con el título que analizamos. No obstante se trata de un juegazo ciertamente recomendable también, y si queréis saber más acerca de él, podéis leer el completo análisis que le dedicamos en esta misma sección.
Para jugarlo en la actualidad, habría sido muy de agradecer que Activision lo incluyese como extra dentro del nuevo juego basado en la nueva película, pero por desgracia no ha sido así. Encontrar cualquiera de las versiones originales es harto complicado hoy en día, sin embargo el de Master System es bastante asequible y fácil de encontrar, pudiendo ser añadido a vuestra colección por tan solo unos 15 euros.
Puede que no sea el mejor juego de los Cazafantasmas, de hecho en NES tenemos por ejemplo el imprescindible 'New Ghostbusters 2' que ya analizamos en su momento. Pero el mérito de recrear con tanta fidelidad la película original en esta época, le da un punto extra a este pionero a la hora de tender sólidos puentes entre el cine y el video juego. Si sois fans de estos emblemáticos personajes, y os gusta el estilo ochobitero, os recomendamos encarecidamente darle una oportunidad.