El 4 de Diciembre 2016 | 15:25
La placa System 16 de Sega fue sin duda uno de los hardwares más populares de los años 80, tanto es así que sirvió como base para muchas otras placas como la famosa CPS de Capcom, o la placa que empleaban las Neo Geo MVS y AES de SNK. Incluso sirvió de inspiración para crear el hardware de Mega Drive, a fin de explotar el concepto de llevarnos el arcade a casa. De entre sus numerosos títulos destaca especialmente uno cuyo protagonista llegó a considerarse mascota de la propia Sega, ese protagonista era Opa-Opa, y el juego se llamaba 'Fantasy Zone'.
¡Esto si que es una crisis!
En un rincón muy remoto del espacio existe un lugar llamado Fantasy Zone, donde tiempo atrás se libró una cruenta batalla de la que emergió como héroe victorioso el gran Opa-Opa, más conocido como Q-Papa. Años más tarde, este sistema planetario vive una profunda crisis económica que amenaza con desestabilizar la paz entre los distintos planetas. Algo que a los habitantes del planeta Menon parece traerles sin cuidado, pues ya han comenzado a construir un enorme ejército y una poderosa fortaleza de combate a fin de robar las riquezas de los demás mundos. Para evitar que se salgan con la suya, el Space Guild ha solicitado la ayuda de Opa-Opa, y en respuesta acude el hijo del héroe que devolvió la paz al sistema tiempo atrás. De este modo el joven Opa-Opa se lanza a la acción para evitar el desastre, pero lo que ni él mismo puede llegar a imaginar, es que detrás de todo esto se oculta una mano negra desagradablemente familiar...
En un género tan saturado de naves recorriendo el vacío cósmico, es siempre de agradece cualquier intento por ofrecer originalidad y frescura. Esa fue la apuesta de dos títulos lanzados en 1985 y 1986 respectivamente para arcades, uno de ellos de Konami y el otro de Sega. Juntos dieron nacimiento a un nuevo tipo de matamarcianos al que se denominó "Cute'em ups", es decir, matamarcianos encantadores. El primero de ellos fue 'TwinBee', y el segundo era 'Fantasy Zone'.
Esto básicamente significa que desde el primer momento en que nos pongamos frente al juego seremos testigos de una explosión de color y fantasía, rasgos que este título comparte con 'Space Harrier', juego que por cierto pertenece a su mismo universo. Los fondos son autenticas obras de arte llenos de formas extrañas e imaginativas, y con combinaciones de colores que alegrarán nuestros ojos.
Todos los personajes rebosan también simpatía en sus diseños, incluido el protagonista que básicamente es una nave viviente que se comporta como una especie de robot pensante a lo 'Mega Man'. Curiosamente en algunas versiones se sugiere que lleva un piloto que es el protagonista en si, quizá por hacer que resultase más coherente y sencillo de entender.
Tened cuidado de no dejaros engañar por su aspecto, porque puede que ese desenfado y colorido os lleve a creer que estáis ante un shmup facilito sin ningún trasfondo serio, y nada más lejos de la realidad. Su nivel de dificultad es bastante más alto de lo que parece, especialmente al enfrentarse a los jefes finales. Por lo que si lo subestimáis, lo pagareis muy caro.
Además su trama es bastante más compleja y oscura de lo que se pueda pensar, llegando a tener momentos verdaderamente chocantes donde encontraremos más de una similitud con el universo de Star Wars. Todo esto hace que pronto nos demos cuenta de que estamos ante una "cara bonita", pero con muy "malas pulgas". Y es que puede que el primer nivel nos resulte hasta fácil, pero completar la aventura solo estará al alcance de los más hábiles y pacientes.
Volando libre
Una de sus peculiaridades es que el scroll lateral no avanza automáticamente, si no que nos permite desplazarnos libremente a izquierda o a derecha. Esto también provoca que los enemigos no sigan patrones predefinidos en lo referente al momento en el que irrumpen en pantalla, de modo que es prácticamente imposible aprenderse el juego como ocurre en otros títulos del género.
Aquí el objetivo no es llegar hasta cierto punto del nivel, de hecho cada fase es circular y si seguimos una sola dirección pasaremos una y otra vez por el mismo sitio en un bucle infinito. Para terminar el nivel será necesario destruir todas las bases enemigas, que en la mayoría de versiones podemos identificar mediante un radar que nos dice cómo de lejos estamos de ellas, y si están más cerca de nuestro lado izquierdo o del derecho.
Una vez aniquilemos todas las bases, aparecerá el jefe de final de fase y el scroll se auto-bloqueará en una posición más tradicional en este tipo de juegos. Estas batallas pueden ser bastante intensas y desafiantes, ya que algunos bosses no dudarán en cambiar sus patrones de ataque en mitad de la pelea para tratar de pillarnos desprevenidos. Aprenderse los patrones para vencerlos será fundamental, pero ni aún así tendremos segura siempre la victoria.
Los enemigos suelen aparecer en formaciones predefinidas, pero como decimos lo harán en orden aleatorio. No es buena idea pasar muy cerca de ellos, ya que suelen tener tendencia a disparar a bocajarro no dándonos la menor opción de esquivar el disparo. Algunos no se lo pensaran dos veces antes de lanzarse en plan kamikaze contra nosotros, y es que lo que en un principio pueda parecer una criatura apacible que flota por la pantalla, se puede convertir en un proyectil que se abalance sobre nosotros a velocidad de vértigo.
A medida que destruyamos enemigos, y especialmente al derrotar a un jefe final, aparecerán en pantalla monedas doradas que podremos recoger y acumular. Estas monedas no son los típicos bonus que solo sirven para aumentar nuestra puntuación, si no que juegan un papel crucial en el juego. Y es que si vemos un pequeño globo rojo flotando que dice "Shop", no debemos dudar ni por un segundo en irnos hacía él.
Estas tiendas móviles nos permitirán canjear nuestras monedas por valiosas mejoras, como nuevos tipos de disparo, mayor velocidad para nuestra nave, o incluso vidas extra. Es aquí donde entra en juego el componente estratégico de 'Fantasy Zone', ya que nuestras decisiones al comprar pueden marcar y mucho nuestro destino durante la partida. Por ejemplo, comprar unas alas veloces para nuestra nave nos puede dar mucha ventaja al enfrentarnos a un jefe de movimientos rápidos.
16 toneladas de destrucción
Por desgracia la mayoría de las mejoras solo funcionan durante un tiempo limitado, por lo que deberemos aprovecharlas lo mejor posible. Hay que recordar que el jefe de nivel no aparecerá hasta que destruyamos la última base, por lo que podemos jugar con eso para conseguir dinero y mejoras, sin embargo cuanto más tiempo estemos en un nivel, mayor será la cantidad de enemigos que nos acose.
Nuestra nave cuenta con un disparo principal que en la mayoría de versiones dependerá de nuestra rapidez de pulsación, lo que puede dejar nuestros dedos hechos puré. La rapidez en el disparo es una ayuda importante, por lo que contar con la posibilidad de jugar con auto-disparo reduce la dificultad general del juego. También disponemos de un disparo secundario en forma de bombas que caen a tierra, pero salvo que las mejoremos, solo podremos lanzar una cada vez.
Si el juego deslumbra a nivel visual, no lo hace menos en el apartado sonoro. Durante la partida nos acompañarán temas muy cañeros y animados que marcan bien la simpatía aparente del juego, pero que se vienen bien arriba cuando las cosas se complican. Es bastante probable que tras jugar no logréis sacaros estos temas de la cabeza, ya que son muy pegadizos.
La duración del juego no es demasiado problema, ya que su elevada dificultad hará que tardéis bastante tiempo en completarlo si no sois unos habituales de este género. Además siempre podremos rejugarlo para llegar a probar todas las mejoras disponibles, o simplemente conseguir la mejor puntuación. A esto se suma el hecho de que se trata de un juego que engancha bastante por su jugabilidad, lo que unido a su dificultad hará que os piquéis e insistáis más en pasároslo.
Hay que advertir que aunque el juego puede dar a entender que dispone de modo cooperativo para dos jugadores simultáneos, este modo multijugador se realiza en realidad por turnos cambiando de jugador al perder una vida, lo que le resta bastante gracia al asunto. No obstante siempre podremos picarnos con un amigo por ver quién completa antes el juego, o logra la mejor puntuación.
Al arcade original le siguieron numerosas conversiones en su época, siendo las más destacables las de PC Engine/TurboGrafx, y X68000. Mientras que la más discreta sería la de MSX, aunque no es ni mucho menos mala. También nos encontramos las conversiones a Famicom/NES y Master System, siendo esta última la más popular de todas.
¡Sega en NES y por partida doble!
Si os sorprende que este juego saliese para NES, tal vez os sorprendáis aún más al saber que hubo no una, si no dos versiones del juego para la maquina de Nintendo. Por un lado encontramos la versión japonesa para Famicom, desarrollada por Sunsoft. Mientras que en América fue Tengen la encargada de publicar su propia versión bajo licencia de Sega, pero no de Nintendo. De esta forma más de un juego de Sega se paseó por NES gracias a la picardía de Tengen, que para mayor estupor era básicamente Atari disfrazada.
De entre estas dos versiones para NES, la japonesa se lleva sin duda el premio a la mejor, con una adaptación magistral tanto a nivel técnico como jugable. La de Tengen por su parte se deja jugar, pero a un nivel inferior, con una jugabilidad más lenta y unos gráficos menos inspirados y coloridos.
Años más tarde el arcade original fue porteado a Saturn con algunas mejoras y gran fidelidad, sin embargo esta versión jamás salió de Japón. Ya en sistemas algo más recientes tuvimos un remake para PlayStation 2 que añadía nuevos modos, niveles, y opciones. Además de cambiar a un aspecto gráfico poligonal. Este nuevo motor 3D permitió incluir unas nuevas fases de bonus con una perspectiva tridimensional que recuerda bastante a su hermano 'Space Harrier'.
Este remake para PlayStation 2 por suerte si que llegó a occidente, dentro del recopilatorio 'Sega Classics Collection'. Lo que si que por desgracia no llegó aquí fue 'Fantasy Zone Complete Collection', un fabuloso recopilatorio para la misma consola desarrollado por M2 que incluía toda la saga 'Fantasy Zone' al completo, además de alguna jugosa novedad exclusiva, como un remake de la versión para Famicom con el nombre de 'Fantasy Zone Neo Classic'.
Cabe mencionar que aunque comúnmente se cree que hubo conversiones para Mega Drive y Game Gear, en realidad se trata de secuelas y no de conversiones del original. Esta confusión es especialmente habitual en el caso de Game Gear, ya que aunque el juego originalmente se llamaba 'Fantasy Zone Gear', a occidente llegó con el nombre de 'Fantasy Zone' a secas.
Para jugar en la actualidad podemos descargar la versión para Master System de la Consola Virtual de Wii (compatible con Wii U), o buscar el recopilatorio 'Sega Mega Drive Ultimate Collection' para PS3 y 360, que incluye el arcade original como extra. Pero sin duda la mejor opción es la de jugarlo en 3DS gracias a los Sega 3D Classics, ya que podemos descargarnos una versión digital del arcade original con nuevas opciones y efecto 3D.
3D Fantasy Zone
Además si compráis el reciente 'Sega 3D Classics Collection' para 3DS, podréis desbloquear una versión especial del 'Fantasy Zone' de Master System que incluye efecto 3D, la función del radar de bases (que no tenía el original), y también la opción de escuchar la banda sonora adaptada al chip FM de esta consola, lo que mejora bastante la calidad del sonido y no estaba disponible en el original.
Como podéis comprobar lo tenéis muy fácil para disfrutar hoy en día de 'Fantasy Zone', tanto del arcade original, como del de Master System. De modo que no hay excusa posible para no darle una oportunidad si no lo conocéis, o rejugarlo si ya es viejo amigo vuestro. Y es que tres décadas después sigue siendo muy capaz de enganchar y divertir, algo de lo que no todos los juegos pueden presumir.
Lo mejor:
Derrocha colorido y originalidad. Posee la capacidad de enganchar tanto a habituales del género, como a usuarios menos experimentados. Gran calidad técnica y sonora.
Lo peor:
El modo para dos jugadores es por turnos, le habría sentado bien un cooperativo simultaneo.