El 3 de Mayo 2015 | 17:25
Si pensabais que 'Sonic the Hedgehog' fue el único intento de Sega por abrirse paso en el campo de las plataformas allá por 1991, os equivocabais. En esta misma sección ya os hemos mostrado algunos de sus intentos como 'Quackshot', o 'Toejam & Earl'. Y aquí os traemos otro intento más, en esta ocasión formando equipo con Vic Tokai para traer otro juego gamberro de plataformas que atrajese a los adolescentes. 'Decap Attack' es sin duda un título fuera de lo común con mucho sentido del humor negro y una curiosa historia tras de sí.
Con vendas y a lo loco
El doctor Frank N. Stein se ha pasado años creando toda clase de abominaciones y seres mutantes en su laboratorio, esparciéndolos por una misteriosa isla con forma de cuerpo. Sin embargo esta vez el doctor chiflado no es el villano, ese papel le corresponde a Max D. Cap, un ser del submundo que quiere apoderarse de nuestra dimensión y que para ello ha tomado el control de los seres que el doctor Stein ha creado durante todo este tiempo. Pero hay una aberración que ha escapado del control de Max, esa es la obra maestra del doctor Stein, un ser que responde al nombre de Chuck D. Head. El doctor Stein es un genio a su manera, pero a veces no sabe ni donde tiene la cabeza. O mejor dicho, no sabe ni donde tienen la cabeza los demás. Chuck lo sabe bien, pues tiene su testa incrustada en su pecho por despiste de su creador. Por suerte este error le da la capacidad de usar una segunda cabeza, esta vez situada sobre sus hombros. ¡Dos cabezas son mejor que una! Con esta habilidad y las pociones e inventos del doctor Stein, Chuck deberá derrotar a Max y recomponer la isla, que ha sido dividida en distintas partes por el villano. Si nuestro héroe decapitado tiene éxito, el doctor Stein le ha prometido una gran recompensa. ¿Qué será? Solo hay una forma de averiguarlo; coger el mando y darle su merecido a Max. ¡Pero no perdáis la cabeza por el camino!
'Decap Attack' nos propone la clásica fórmula plataformera en 2D de la que uno parece no cansarse nunca, saltos y más saltos a lo largo de niveles enrevesados en los que esta vez nos tocará buscar algunos objetos especiales en determinadas ocasiones. Todo ello con una ambientación propia de Halloween con fantasmas, hombres-lobo, y toda clase de criaturas extrañas que no dudarán en complicarnos las cosas. Para defendernos de ellas podemos pisotearlas, aunque no bastará con un solo pisotón, si no que tendremos que saltarles encima varias veces hasta enterrarlas en el suelo.
Otra forma de atacar será embestirlas con la cabeza principal de Chuck, que se encuentra en su pecho. Esto consiste básicamente en un ataque de corto alcance, pero suficientemente potente como para acabar con los enemigos de un solo golpe. Por último también podemos arrojar la segunda cabeza de Chuck, pero para ello deberemos encontrarla primero. Esta cabeza se esconde dentro de unos tótems que también pueden revelar otros ítems al ser destruidos. Dicha testa secundaria se lanza al atacar, y todo enemigo que entre en contacto con ella será noqueado.
Llevar dos cabezas es sin duda la mejor estrategia ofensiva, pero si recibimos un golpe perderemos de nuevo la que llevamos sobre los hombros. Hay que tener en cuenta que los enemigos reaparecen aunque los hayamos eliminado si volvemos a la zona en la que estaban, por lo que tener siempre una buena capacidad de ataque es bastante importante. Por fortuna podemos soportar varios impactos antes de perder una vida, y para saber cuanta salud nos queda disponemos del clásico sistema de corazones. Bueno, "clásico" lo que se dice "clásico" no es, digamos que no son el tipo de corazones habituales... Y es que todo en este juego rebosa de un negro sentido del humor.
Recéteme algo doctor
La mayoría de ítems que recogeremos son pociones de colores que a priori parecen no surtir ningún efecto. Para que actúen deberemos acceder a nuestro inventario y seleccionarlas mediante un cursor, al hacerlo podremos preguntar al doctor Stein y a su ayudante cuál es su efecto, algo muy recomendable antes de utilizarlas. Estas pociones mejoran las capacidades de Chuck, por ejemplo aumentando su capacidad de salto, u otorgándole invulnerabilidad temporal. También podremos recoger monedas de oro, que usaremos en las fases de bonus para aumentar nuestras oportunidades de conseguir premios y vidas.
Aunque todas estas cosas nos serán de gran ayuda, la principal función de Chuck seguirá siendo el salto. El protagonista posee una capacidad de salto bastante aceptable, y podemos aumentarla si cogemos algo de carrerilla. Sin embargo lo mejor es que si presionamos repetidamente el botón de salto mientras estamos en el aire, Chuck pataleara y podrá retrasar su caída, algo que podemos usar por ejemplo para alargar un salto, o para aterrizar con mayor precisión en el lugar que queremos.
Como era de esperar, no faltarán las batallas contra los típicos jefes de final de fase una vez hayamos superado todos los actos de un nivel. Como siempre habrá que encontrar una buena estrategia de ataque y aprender los patrones de movimiento del enemigo, pero haber reservado nuestras pociones para estas batallas habrá sido sin duda actuar con cabeza. Y es que congelar un jefe durante unos segundos mientras le pateamos el trasero, además de ser muy útil, es también divertido.
El juego presenta una duración más que aceptable para la época, y su nivel de dificultad está bien ajustado. No será un paseo por el campo, pero tampoco tendréis por qué dejarlo por imposible. Gráficamente no aprovecha todo el potencial de Mega Drive, sin embargo resulta agradable a al vista y su ingenioso diseño es un golpe de aire fresco en un género tan trillado. Buen control, buen aspecto visual, y una temática divertida. ¿Hace falta algo más?
The monster mash
Pues claro que si; ¡la música! Por suerte en este aspecto no podemos ponerle la menor queja, y es que la banda sonora es tremendamente animada y carismática, ofreciendo temas pegadizos que aprovechan bien las capacidades de la consola. Todo esto mientras se incentiva el carácter gamberro y a la vez siniestro del que rebosa el título, deleitando nuestros oídos de principio a fin.
Pero 'Decap Attack' no es solo un gran juego, también guarda una curiosa historia tras de si que es sin duda de esas anécdotas divertidas que podréis contar a vuestro amigos cuando hables de él. 'Kid Kool', 'Psycho Fox', y 'Magical Hat', puede que sean nombres de juegos que no os suenen de nada y que no tengan demasiado en común a primera vista, sin embargo todos ellos están conectados entre sí, y a su vez lo están con 'Decap Attack'.
La culpa de todo esto la tiene Vic Tokai, la compañía que creó estos cuatro juegos. El primero de ellos, 'Kid Kool', es un juego de NES protagonizado por el típico niño gamberro y "cool" de la época. El segundo, 'Psycho Fox', salió para Master System y estaba protagonizado por un simpático zorrito antropomórfico. El tercero, 'Magical Hat', salió en Mega Drive pero solamente en Japón, y estaba basado en un anime del mismo nombre obra del famoso Studio Pierrot. Lo curioso es que estos tres juegos son básicamente el mismo, pues presentan jugabilidades muy similares y tienen características comunes, como el ataque cuerpo a cuerpo con una extremidad extensible, o el poder portar un objeto o personaje que se puede lanzar y después recuperar para volver a usar.
De hecho este curioso reciclaje de Vic Tokai fue más allá en el caso de 'Decap Attack' pues es básicamente un hack de 'Magical Hat' creado para aprovechar al menos la base del juego ante la imposibilidad de usar la licencia de este anime en occidente. Comparar ambos títulos revela muchas similitudes, pero por fortuna el lavado de cara fue mucho mayor que el de otros casos de "reciclaje" tan famosos como el de 'Doki Doki Panic' y 'Super Mario Bros. 2', de modo que prácticamente parecen dos juegos distintos. Música, sprites, niveles, etc. Todo ello fue rehecho cambiando de arriba abajo el título original.
Jugadlo de cabeza
Aunque inexplicablemente 'Decap Attack' jamás llegó a la Consola Virtual, si que fue reeditado hasta en dos ocasiones en diversos recopilatorios y también está disponible en Steam. El primero de los recopilatorios que lo rescató del olvido fue 'Sega Mega Drive Collection' para PS2 y PSP, mientras que el segundo fue 'Sega Mega Drive Ultimate Collection' para PS3 y 360. Como veis tenéis diferentes opciones para jugarlo en sistemas actuales, pero si lo que queréis es el cartucho original de Mega Drive, podéis encontrarlo en eBay por un precio bastante aceptable que no debería superar los 20 o 30 euros completo y en buen estado.
Un título ideal para saciar nuestra sed plataformera de juegos retro. Divertido, simpático, y con el toque necesario de originalidad, pero manteniendo el genial estilo de su época. Perfecto para pasar la tarde pegando saltos, y sin duda el título ideal para ponerle a los más pequeños cuando llega Halloween y pasar el rato con ellos disfrutando del estilo de los juegos del ayer.
Lo mejor:
Divertido, simpático, jugable, y con una pegadiza banda sonora. Su curiosa procedencia.
Lo peor:
El manejo del inventario podría haber sido algo más fluido, pues parece diseñado para ser usado con un ratón.