Corría el año 1984 cuando un recién llegado a Sega comenzaba a trabajar en un juego de boxeo para SG-1000, la consola que tenía por aquel entonces la compañía. Ese "novato" era nada menos que Yu Suzuki, quién estaría llamado a crear en el futuro algunos de los títulos más míticos, no solo de Sega, si no de la historia del videojuego. 'Space Harrier', 'Hang On', 'After Burner', 'Out Run', 'Daytona USA', o 'Shenmue', no habrían existido de nos ser por este primer paso. Y además Suzuki no estaba solo en el desarrollo de este juego, pues junto a él debutaba Rieko Kodama, otra muy importante desarrolladora para la compañía.
No tires la toalla
No has elegido una época fácil para ser boxeador, esas famosas películas de boxeo han hecho que la gente se vuelva loca por este deporte y acuda en masa a cada combate. Pero no les basta con que ganes, quieren que además hagas un combate tan épico como el que han visto en la gran pantalla. Sin embargo esto no es Hollywood, aquí no vas entrenar golpeando una vaca muerta, o subiendo escaleras. De modo que más vale que empieces a ir al gimnasio a machacar ese saco de boxeo, eso si quieres tener alguna opción de derrotar a ese tipo rubio con el que tanta rivalidad mantienes. La campana sonará pronto, y si no estás a la altura, besarás la lona en medio de un océano de abucheos. ¿Quieres la gloria? ¡Pues gánatela!
'Champion Boxing' fue originalmente programado para SG-1000, la que fuese la primera consola doméstica de Sega. Una máquina que solamente salió al mercado en Japón y ciertas partes de Europa (entre ellas presumiblemente España). La consola no tuvo demasiado éxito y años más tarde sería reemplazada por Master System, sin embargo su versión con forma de ordenador, el SC-3000, si que logró cosechar algo más de fama. Dicho ordenador empleaba los mismos cartuchos y tarjetas que SG-1000, por lo que 'Champion Boxing' también corrió por sus circuitos.
Un año más tarde sería otro ordenador quién acogiese el juego, y ese fue nada menos que el famoso MSX, hermano en cuestiones de hardware de las máquinas de Sega. Además entre medias de ambas versiones, este título visitaría también los salones arcade en un mueble que básicamente llevaba dentro una placa de SG-1000 adaptada, lo que también sería el nacimiento de la buena relación entre las consolas de Sega y los salones recreativos.
El sistema de juego es tan sencillo como divertido, básicamente nos enfrentamos en un uno contra uno con un oponente manejado por la máquina, pudiendo elegir el nivel de dificultad entre cinco niveles distintos antes de que comience la partida. Naturalmente dicha elección afectará a la inteligencia de nuestro rival, al que no nos costará mucho vencer en el primer nivel, pero que nos hará sudar bastante en el último.
El mando de SG-1000 solamente disponía de dos botones, igual que su sucesor de Master System, de modo que cabría pensar en unos movimientos bastante limitados. Sin embargo podemos realizar bastantes golpes diferentes, ya que el botón 2 nos permite seleccionar el tipo de golpe, mientras que el botón 1 los ejecuta. Además al combinar el botón de ataque con las direcciones del pad, también podremos hacer distintos golpes.
¡Toma esa, y esa, y esa otra!
De este modo podremos atacar a diferentes alturas, buscando sortear la protección del oponente. Si por ejemplo se cubre por alto, un buen golpe al estómago romperá su guardia, lo que puede permitirnos realizar un devastador combo, e incluso tratar de rematarlo con un buen gancho. Es curioso como con tan poco se consigue algo tan divertido y satisfactorio, y es que esta es sin duda una buena forma de descargar tensiones a base de machacar a nuestro pobre rival.
Pero no solo habrá que atacar, también deberemos bloquear golpes y esquivarlos. Para ello podemos movernos por el cuadrilátero, pero siempre de manera lateral. Es poco recomendable quedarse atrapado en uno de los laterales, ya que si lo hacemos no podremos retroceder y nuestro rival nos zurrará de lo lindo. Finalmente y al igual que en el boxeo real, solamente ganaremos cuando el árbitro haga la cuenta de tres antes de que nuestro oponente logre recuperarse.
Los cinco niveles de dificultad del modo para un jugador son más que suficientes para descargar las tensiones del día a día y pasa un rato divertido, sin embargo el verdadero desafío estará en el modo multijugador. Competir contra otra persona puede ser terriblemente divertido, y las risas estarán casi tan aseguradas como el pique que se producirá tras un par de combates. Y es que puede que haya llovido mucho desde que salió este juego, pero un buen modo versus nos sigue resultando igual de divertido y adictivo.
Gráficamente hay que tener en cuenta que nos encontramos ante un sistema que no llega al nivel de NES o Master System, sin embargo su colorido y simpatía son más que suficientes para alegrarnos la vista. Los personajes cuentan con diseños simpáticos y bien animados, y todo cuanto vemos en pantalla es perfectamente reconocible sin tener que hacer un ejercicio extra de imaginación. Curiosamente puede que el boxeador protagonista os recuerde un poco a otros personajes de la compañía como el famoso Alex Kidd, y esto a pesar de que dicho personaje aún no existía cuando salió este juego.
De hecho apenas había nada por aquel entonces de la Sega que hoy conocemos, y sin embargo el estilo de la compañía está muy presente en el juego. Incluso podemos ver un pequeño cameo de Pengo, un simpático pingüino que daba nombre a otro clásico de Sega para arcades de 1982 y que casi se podría considerar como una de las primeras mascotas de la compañía, ya que incluso 'Flicky' no vio la luz hasta ese mismo año 84. Todo esto nos remonta a una época en la que Sega daba sus primeros pasos en el terreno de las consolas, algo que para sus fans lo empapará todo de un encanto muy especial.
En el apartado sonoro en cambio no hay mucho que destacar, ya que no hay música durante los combates. Lo único que oiremos son los sencillos efectos de sonido y un par de temas cortos al iniciar y terminar la pelea, pero en aquel entonces no hacía falta mucho más. Y es que aunque quizá no fuese lo más avanzado en su época en lo referente a consolas domésticas, no cabe duda de que sabe muy bien como divertir al estilo de otros títulos más conocidos de su tiempo como 'Punch Out!'.
El toque del maestro
Al juego aún se le pueden pedir muchas cosas, como por ejemplo una mayor variedad de rivales (solo hay uno), u otros modos de juego. Pero en aquella época tampoco se podía pedir mucho más, y con muy poco se lograba divertir y enganchar de manera más que suficiente. Puede que cueste reconocer aquí el sello de Yu Suzuki, sin embargo su jugabilidad si que refleja alguno de sus primeros destellos de genialidad, especialmente al lograr tal variedad y dinamismo al manejar al personaje a pesar de las limitaciones de control.
Al principio del análisis os contábamos que este título no había sido solo el inicio de Yu Suzuki, si no también de Rieko Kodama. Otra prolifera desarrolladora de Sega que trabajó más tarde en títulos como: 'Phantasy Star', 'Quartet', 'Alex Kidd in Miracle World', 'Altered Beast', o los primeros juegos de cierto erizo azul. Y ya en tiempos más recientes, en títulos como 'Skies of Arcadia', o '7th Dragon'. Todo esto hace que 'Champion Boxing' sea una cita ineludible para todo fan de Sega que se precie, ya que aunque no es muy conocido, no cabe duda de su importancia en los orígenes de la veterana compañía.
El juego fue publicado originalmente tanto en formato cartucho, como en tarjeta. Dichas tarjetas eran idénticas a las que más tarde emplearía Master System, y muy similares a las que usaba PC Engine. En el caso de 'Champion Boxing' no hay diferencia entre un formato u otro, algo que es recomendable destacar, porque en otros títulos si que elegir el formato tarjeta podía suponer diferencia por la distinta capacidad de almacenamiento.
Si queremos encontrarlo en la actualidad, el cartucho es más fácil de conseguir que la tarjeta, sin embargo primero habrá que encontrar alguna forma de jugarlo. Sega nunca lo ha reeditado, y la enorme dificultad para encontrar una SG-1000 o similar, hace harto complicado el poder jugarlo incluso aunque encontremos un cartucho. Los juegos de SG-1000 son retrocompatibles con Master System, pero solamente con las consolas japonesas ya que las occidentales emplean cartuchos distintos, y encontrar un adaptador es más difícil aún que conseguir una consola japonesa.
Todo esto hace que la mejor opción para jugar hoy en día a 'Champion Boxing' sea la emulación, sin embargo aún nos queda una última opción; conseguir un cartucho flash tipo Everdrive para Master System. Si lo hacemos, podremos jugar a juegos de SG-1000 en nuestra consola occidental sin problemas. De hecho esta opción también nos permitirá jugarlos en una Game Gear, pues dicho sistema también es retrocompatible con SG-1000. No ocurre lo mismo con Mega Drive, ya que no ofrece retrocompatibilidad con la primera consola de Sega, tenedlo en cuenta.
En resumen, un pedazo importante de la historia de Sega que además es (como ocurre con prácticamente todo el catálogo de SG-1000) un buen ejemplo de cómo divertir y enganchar con muy poco. Imprescindible para fans de la compañía, y muy recomendable para aquellos que no tengan "techo retro" y sean capaces de disfrutar de juegos de cualquier época.