El 19 de Mayo 2019 | 16:37
No hace mucho que analizamos aquí 'Astérix and the Great Rescue', la aventura más conocida del galo irreductible para los 16 bits de Sega. Lo que no muchos saben es que este título contó con una secuela que corrió a cargo del mismo equipo de desarrollo, secuela que además fue exclusiva del mercado europeo. Así en 1995 se publicaba 'Astérix and the Power of the Gods', juego con el que no solo demostrarían haber aprendido de los errores del anterior, sino que además se iba a coronar como una de las mejores aventuras protagonizadas por estos incombustibles e irreductibles personajes.
¡La Galia ha caído!
César por fin se ha salido con la suya... ¡La Galia está bajo su control! La derrota de Vercingetorix pone a los romanos al mando, algo que queda patente en una ceremonia en la que el propio Vercingetorix rindió sus armas al emperador en persona. Entre dichas armas se encuentra el valioso escudo que simboliza el poder de los dioses y que solo puede portar aquel que gobierne la Galia, pero César no le presta el menor interés y pone rumbo hacia nuevas conquistas. Y así, las armas de Vercingetorix quedan tiradas como un botín de guerra más, botín al que no tarda en hincarle el diente un avieso soldado romano al que le ha llamado la atención el mencionado escudo, lo que provoca que se le acabe perdiendo la pista a tan importante objeto. Mientras tanto, en la aldea de Astérix la noticia cae como el mismísimo cielo sobre sus cabezas, pero ninguno de sus habitantes está dispuesto a rendirse ante los romanos. Por ello, el jefe de aldea envía a Astérix y Obélix con la misión de recuperar el escudo, y con él, el control sobre la Galia. ¿Les ayudas a buscarlo?
Con la misma base mezcla de plataformas y aventura de su predecesor, 'Astérix and the Power of the Gods' evitó caer en el mismo fallo que este, es decir limitar nuestra estancia en cada nivel con un dichoso cronómetro excesivamente ajustado. Aquí podremos tomarnos todo el tiempo que queramos resolviendo puzles, recogiendo ítems, y por supuesto aporreando romanos. Esto da como resultado un juego tremendamente divertido con el que no nos limitaremos simplemente a saltar de acá para allá.
Si bien el dichoso cronómetro ha desaparecido, todavía podemos jugar a la carrera si así lo deseamos, ya que la fluidez del juego nos lo permite. Pero siempre será mejor quedarse un ratito explorando, y además podremos regresar a niveles previamente completados en los que podremos encontrar cosas nuevas que nos permitan continuar la aventura. Cada vez que nos veamos en un callejón sin salida lo más probable es que tengamos que volver sobre nuestros pasos, y es aquí donde entra en juego el mencionado factor aventurero.
Es bastante habitual que un personaje nos envié a buscar cierto objeto, el cual no podremos conseguir sin otro objeto previo, que no estará disponible si no ayudamos a cierto personaje. Estas situaciones no solo recrean bien las típicas situaciones en las que estos entrañables personajes se ven envueltos, sino que además nos obligará a estar atentos de lo que nos dicen para saber hacía donde dar el siguiente paso.
Por suerte el juego está disponible en varios idiomas, entre ellos el castellano, por lo que no tendremos problema alguno para entender lo que nos piden o los consejos que nos den. Otro aspecto curioso del juego es que no hay jefes de final de fase, tan solo enemigos ocasionales en los niveles. Para acabar con ellos disponemos de una amplia variedad de ataques, pudiendo vapulear romanos de formas muy variadas y divertidas.
Pim Pam Pum
La fidelidad a los cómics originales estará presente en todo momento, así como su simpatía y desenfado habitual. Además podremos manejar tanto a Astérix como a Obélix, aportándole variedad al juego y aumentando su rejugabilidad. También encontraremos niveles especiales en los que por ejemplo iremos montados en una cuadriga, o en una alfombra voladora, convirtiéndose este último en una especie de parodia de los clásicos shoot'em up de scroll horizontal.
Dispondremos de un mapa que nos permitirá regresar a niveles anteriores, o acceder a otros nuevos. Dicho mapa se presenta con una curiosa perspectiva isométrica, y nos permitirá viajar desde Europa a lugares remotos como Egipto o la India. La duración viene a ser la habitual en este tipo de juegos, pero gracias a sus dos personajes, a su sistema de puntuaciones, y a las mecánicas de exploración, la rejugabilidad está asegurada.
El control de los personajes responde realmente bien, y aunque disponemos de una barra de salud, los enemigos no son especialmente difíciles de tumbar. La dificultad aquí radica básicamente en algunas zonas de plataformeo donde tendremos que demostrar todas nuestras habilidades con el género, así como en la exploración a la hora de encontrar lo que necesitamos.
Gráficamente se nota que estamos ante uno de los juegos de la madurez de este sistema, ya que nos encontraremos toda clase de efectos curiosos y niveles con montones de planos de scroll para simular profundidad. También encontraremos algunos ingeniosos efectos de transparencia que juegan con la baja definición de las pantallas de la época, lo que puede provocar que "se le vea el truco" si jugamos en pantallas actuales.
Las animaciones de los personajes son realmente buenas y fieles al estilo de la franquicia, e incluso encontraremos secuencias narradas mediante viñetas que nos irán contando lo que ocurre. En general tendremos un juego bastante resultón en lo referente al apartado visual, con mucho colorido, efectos curiosos, y gran fidelidad a los cómics de este popular personaje.
Música clásica en tu Mega Drive
Los efectos de sonido están en gran medida reciclados de su predecesor, los que viene a significar que cumplen su papel, pero que no reflejan demasiado esfuerzo en este aspecto. Donde sí que hay que quitarse el sombrero es ante la banda sonora, compuesta por una cuidada selección de temas clásicos sobradamente conocidos y bien adaptados a las capacidades de Mega Drive.
No os diremos qué temas clásicos os vais a encontrar, ya que es más divertido encontrárselos de golpe en el juego y ver cómo han sido encajados con cuidado dentro del ambiente y contexto de cada fase y situación. No obstante, si no os importa el que no os pillen por sorpresa, podéis escucharlos cuando queráis desde el test de sonido que incluye el juego, el cual seguro que se convierte en un lugar de visita habitual por vuestra parte si sois un poco melómanos.
Con todos estos ingredientes 'Astérix and the Power of the Gods' se convierte, no solo en el mejor título protagonizado por el galo para esta consola, sino también en uno de los mejores basados en la franquicia, lo que no es poco precisamente. Una aventura totalmente recomendable si sois fans de estos personajes, o buscáis un juego de plataformas con un toque aventurero.
Si hubiese que ponerle alguna pega, tal vez serían los momentos en los que podemos no tener claro qué necesitamos para avanzar, ya que algunos de los objetos clave están bien escondidos. O la presencia de algunos "saltos de fe", en los que tendremos que arrojarnos al vacío sin tener del todo claro dónde vamos a aterrizar. Ninguna de estas cosas supone un problema grave, pues se presentan de manera muy ocasional, pero nunca está de más advertir de su presencia.
Por desgracia no estamos ante lo que podríamos llamar "un juego accesible", ya que jamás ha sido reeditado, y hacerse con un cartucho hoy en día es ciertamente complicado. Su exclusividad europea y su calidad han disparado un poco los precios, y es probable que suban todavía más en los próximos años. A día de hoy es difícil encontrarlo con caja y manual por menos de 50 euros, así que si podéis prescindir de estas cosas, aún se puede encontrar a precios razonables (eso si es que encontráis uno).
De buena familia
Toda una joya oculta que viene a demostrar que en Europa no siempre íbamos a la cola del mundo, como los propios desarrolladores de Core se encargarían de demostrar al año siguiente con cierto juego llamado 'Tomb Raider'. Todo el buen hacer del Viejo Continente en un cartucho altamente recomendable, especialmente si gustáis de las habituales peripecias de estos simpáticos galos.
Lo mejor:
Apartado técnico impecable y gran jugabilidad. La banda sonora. Gran fidelidad a las locas aventuras de estos entrañables personajes.
Lo peor:
Su exclusividad europea lo ha convertido en una joya poco conocida y cada vez más cotizada y difícil de encontrar.