RETRO 'Alien Trilogy', los xenomorfos tienen una cita contigo en PC, Saturn, y PlayStation

Lanzado durante aquel mágico 1996 repleto de joyas, 'Alien Trilogy' venía siguiendo la estela de otros tantos FPS de la época, pero aportando elementos propios como una ambientación oscura y opresiva que lo situaban próximo a los juegos de terror. Esta combinación cautivó a muchos usuarios de PlayStation, Saturn, y PC. Y es recordado como uno de los mejores títulos basados en esta prolifera franquicia que sigue plenamente activa hoy en día.

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¿Un pequeño corte de luz? ¿Fallan las comunicaciones? Parecen cosas normales, y el resto del equipo empieza a creer que Ripley está algo paranoica. ¡Pero eso es porque ellos no han vivido el mismo infierno que ella! Esa especie de arañas que te estrujan la cara y ponen sus huevos dentro de ti, la criatura resultante que nace reventándote el pecho, los adultos convertidos en perfectas máquinas de matar, las reinas que no dejan de engendrar nuevas atrocidades... Nada ni nadie está a salvo cuando los xenomorfos andan cerca. Y para colmo la compañía sigue enviando soldados para llevarse a estas criaturas y emplearlas como arma biológica, ¡aunque para ello tengan que pasar por encima de tu cadáver! Pronto el tenso silencio se rompe con un grito desperado en la lejanía, es entonces cuando sabes que ha llegado el momento de actuar. Solamente Ripley sabe como se las gastan esas cosas, pero muy pronto tú también lo sabrás...

El sistema de juego de 'Alien Trilogy' nos propone una aventura en primera persona tipo 'Doom', con escenarios en 3D y enemigos realizados mediante escalado de sprites 2D. Nuestro objetivo varía según la fase, pero suele consistir en llegar hasta cierto punto del mapa. Por el camino habrá que recorrer los laberínticos escenarios abriendo puertas, activando interruptores, y recogiendo cualquier objeto o arma que pueda sernos de utilidad.

No tardaremos en darnos cuenta de que el juego viene muy dispuesto a ponernos los pelos de punta, ya que la oscuridad es el elemento dominante durante prácticamente toda la aventura. Los largos pasillo sumidos en la penumbra ocultan sorpresas desagradables tras cada esquina, y abrir una simple puerta puede depararnos un buen susto.

Para conocer la posición de los enemigos contamos con un radar de proximidad, sin embargo este solo detecta el movimiento, de modo que en más de una ocasión no empezará a advertirnos del peligro hasta que ya lo tengamos encima. Esta incertidumbre y la continua sensación de que hay algo acechando entre las sombras, genera una atmosfera que deja en ridículo a la de los mejores juegos de terror de la época, sumergiéndonos de lleno en la pesadilla.

A esto hay que sumarle una soberbia banda sonora y unos efectos de sonido muy cuidados, todo pensado para que estemos en continua tensión. Es el juego ideal para jugar con auriculares por noche y con las luces apagadas, siempre que no sufráis problemas cardíacos, claro... El agobio, los sustos, y la sensación de soledad serán vuestros compañeros de viaje. Pero también habrá momentos de acción en los que disparar a todo bicho viviente y descargar adrenalina.

Controlando el pánico

El control responde bien y nos permite desplazarnos sin demasiadas complicaciones, no obstante hay que advertir que estamos en una época anterior a la llegada de los sticks analógicos, por lo que todo el manejo se realiza de manera digital. Puede que para los estándares actuales os resulte algo tosco, pero en su momento no se le pudo poner la menor pega al control.

Lo que si que en su época podía empezar ya a rechinar un poco, es el sistema de apuntado, ya que básicamente disparamos siempre hacía delante sin poder regular la altura. Esto hace que por ejemplo nuestros disparos afecten a un enemigo a pesar de que estén pasando por encima de él, de modo que solo habrá que preocuparse por disparar con el objetivo centrado. Este es otro aspecto que comparte con otros títulos similares de aquel entonces, pero que hoy en día puede chocar si no estamos acostumbrados.

Para defendernos de los xenomorfos y otros peligros, disponemos de un arsenal de armas bastante amplio y contundente. Estas se pueden ir recolectando a lo largo de la aventura, y van desde las típicas pistolas de 9 milímetros, hasta devastadores cañones de plasma, todo especialmente diseñado para destrozar a los aliens. También encontraremos mejoras de salud, u objetos útiles como mapas, lámparas, o gafas de visión nocturna.

Gráficamente los escenarios son los que llevan la voz cantante, pues su diseño y calidad son de un nivel bastante elevado, si bien es cierto que pueden hacerse un poco repetitivos. Visualmente se logra con gran eficacia recrear el ambiente propio de esta franquicia, lo que ayudará a que nos sintamos como dentro de una de las películas. El argumento por su parte difiere de lo visto en la gran pantalla, tomando elementos de las tres primeras películas para combinarlos eficazmente en una sola aventura.

La duración no será ningún problema, ya que disponemos nada menos que de 30 fases distintas. A esto hay que sumarle un nivel de dificultad bastante elevado, por lo que acabar el juego nos llevará su tiempo. En la versión para PC es posible encontrar un modo multijugador online, sin embargo las versiones para consola no permiten esta opción, dejándonos únicamente la posibilidad de completar la aventura principal en solitario.

Los años no pasan en balde

Durante el juego podremos contemplar algunas escenas CG que irán ampliando la historia, pero como es lógico, dicho CG es el que había en la época, por lo que podría decirse que es el elemento que peor ha soportado el paso del tiempo. Tampoco terminan de encajar bien hoy en día los pixelados enemigos en 2D, que por fortuna cuentan con aceptables IA's que compensan su cuadriculado aspecto.

En cuanto a diferencias técnicas entre versiones, la de PC es lógicamente la que se lleva la palma, sin embargo las versiones para consola de defienden realmente bien, resultando bastante recomendables dentro de los respectivos catálogos de cada sistema. Técnicamente solo encontraremos pequeñas diferencias visuales, como por ejemplo en algunos efectos de luz y transparencias ausentes en la versión para Saturn.

También encontraremos algunas cosas que no han sido adaptadas con todo el cuidado en la versión para la maquina de Sega, como por ejemplo unos videos de menor calidad. Por el contrario la versión de Saturn ofrece una mayor visibilidad durante el juego, lo que ayuda a compensar la a veces excesivamente oscura iluminación de la versión para PlayStation.

Si queremos jugarlo en la actualidad, lo más recomendable es ir a por la versión de la consola de Sony, ya que aunque nunca ha sido reeditada en sistemas posteriores, es bastante sencillo hacerse con el disco original. Su gran éxito en ventas lo hace fácil de encontrar, especialmente si no nos importa que sea la versión Platinum. La original es algo más esquiva, pero tampoco os tendréis que rascar mucho el bolsillo si queréis la edición de caja negra.

En Ebay podemos hacernos con el disco original por apenas unos 5 o 10 euros, y una vez conseguido podremos jugarlo en cualquier PS2 o PS3, donde además podremos aplicarle algunas mejoras para los gráficos. Por ejemplo si lo metemos en una PS2 y activamos el suavizado de texturas, lograremos una mejoría bastante notable en los escenarios. Mientras que en el caso de PS3 podremos aplicarle un reescalado para que se vea mejor en televisores actuales.

Ideal para fans de los shooters vetustos

Incluso la versión para Saturn es ciertamente asequible para lo que suele ser habitual en esta consola, de modo que podemos añadirlo a nuestra colección de la planetaria máquina de Sega por precios entorno a los 20 euros. Finalmente en el caso de PC, es difícil conseguirlo en su edición original de caja grande, pero por fortuna tampoco se piden precios excesivos por él.

En resumen, una aventura totalmente recomendable para los amantes de los viejos shooters de antaño, donde las cosas eran muy diferentes a las de hoy en día. Sigue sorprendiendo la capacidad que tiene para meternos la angustia en el cuerpo incluso en la actualidad, por lo que también es recomendable para los amantes de los clásicos de terror. Finalmente si os gusta la franquita de Alien tendréis un aliciente añadido para disfrutarlo, ya que se empapa perfectamente de este siniestro universo que mezcla magistralmente el terror con la ciencia ficción.