'Rayman Legends', un gran juego pese a no estar en su plataforma nativa

La espera ha llegado a su fin tras casi un año de espera. 'Rayman Legends' ya está disponible en numerosas consoals tras ser pensado originalmente como un juego de 'Wii U' y hacerlo multiplataforma por temor a que Ubisoft no recupere la inversión, sinónimo de que no nos encontramos ante otro juego de plataformas del montón.

Sencillo pero con mucho que contar

No sería nada difícil resumir en una sola línea el funcionamiento del juego en general: corre, salta y golpea para llegar al final de nivel. Un estilo de juego que pese a que sea algo con lo que jugábamos los que ya pasamos de la veintena, nunca deja de ser divertido porque pese a ser sencillo, tiene mucho potencial oculto y es trabajo de los diseñadores saber explotarlo como es debido. Al principio del juego se nos enseñan las mecánicas de juego más sencillas así como las habilidades, todas ellas adquiridas desde el inicio de una forma sutil. Poco a poco vamos descubriendo cómo los niveles, pese a basarse en un estilo viejo, nos demuestran que son capaces de innovar o al menos hacer que nunca deje de ser divertido.

Quizás uno de los puntos fuertes es el modo multijugador que permite hasta a cuatro jugadores colaborar para poder llegar juntos más lejos si es posible. Habría que ser una persona muy aburrida para considerar no valorar esto de forma positiva, y es que siempre queda bien jugar con amigos a un juego, que aunque no sea más útil que ir una persona sola, consigue que el mero hecho de caer juntos sea divertido. Un punto positivo es que cualquier jugador puede entrar al vuelo sin ningún tiempo de carga ni tener que abrir un modo adicional para añadir jugadores, perfecto por si nuestro hermano se quiere acoplar por sorpresa. Hay quien querría un modo multijuador en línea para poder jugar con sus amigos o cualquier anónimo que uno encuentra por la red de redes, pero una vez prueba el modo multijugador local que tiene, ve que sería imposible o al menos muy difícil transmitir toda la precisión e interacción del juego sin que el retardo de información llegue a estropear la fluidez del juego.

Un mundo de leyenda

Como todo buen juego de plataformas en dos dimensiones que se precie, tiene distintas series de niveles basados en temáticas muy dispares. Pasamos de estar en un castillo medieval a estar en un reino lleno de estereotipos mexicanos como mariachis y salsa para nochos picante que puede ser bloqueado con guacamole, y luego vamos a una zona basada en la infiltración, totalmente nada que ver con que haya salido hace poco 'Splinter Cell: Blacklist'. Pero no es solo en la estética, sino en el diseño de niveles de cada serie, en la que casi ninguno deja de ser una genialidad. Ya sea por un diseño inteligente de la fórmula clásica, o usarla para introducir algunas fases de infiltración como dijimos hace poco, o hacer todo un laberinto lleno de secretos. Todos los niveles tienen un encanto personal y se nota que el equipo ha estado con jornadas peligrosas para su salud con tal de que queden lo más perfectos posibles.

Un punto muy a su favor es que nunca deja de lado el humor. No es humor inteligente inglés dignod e lso Monty Python, pero no impide que sea visualmente gracioso y no tenga miedo hasta de reírse de sí mismo como en los momentos en los que Murphy evita que nuestros héroes se quemen con salsa picante gracias a barreras de guacamole. A eso se le añade los niveles musicales, perfectamente elaborados en los que nuestras acciones serán las que hagan versiones de canciones como The Eye of the Tiger.

Un punto a su favor es la enorme cantidad de niveles y desbloqueables que tiene el juego, algo que se ha perdido debido al auge de los DLCs, que si bien algunos son buenos, otros son cosas que perfectamente podrían haber estado dentro del juego. El juego cumple con su obligación de premiar al jugador con algo más que simples mensajes de felicitación y los trofeos correspondientes, y es que al superar los niveles con buena puntuación o conseguir ciertos requisitos, conseguimos billetes de la suerte que desbloquean niveles de 'Rayman Origins' y ayudan a que podamos conseguir trajes adicionales. Y eso es realmente algo que se agradece, que nos recompensen en el propio juego con novedades que disfrutar.

Una adaptación no del todo efectiva

COmo todos sabemos, el juego nació originalmente como exclusiva de Wii U, con el que tendría multijugador para cinco jugadores a la vez y opciones únicas para el mando de la consola. Esto se traduce en niveles especiales con el pequeño ser conocido como Murphy que podía hacer cosquillas a los enemigos, cortar cuerdas, crear plataformas, salvar a jugador caídos o mover obstáculos con la pantalla táctil o mover plataformas si inclinamos, el mando. Por razones totalmente obvias, eso no se ha podido transmitir a esta versión de PlayStation 3.

El uso de Murphy se ha llevado al botón círculo del mando como apaño para salir del paso en los niveles dedicados a las funcionalidades de este personaje. El resultado no es del todo satisfactorio, y es que después de probar de forma inteligente e intuitiva a Murphy en la versión de Wii U para luego pasar a usarlo de forma mecánica con un botón del mando, le quita bastante emoción y gracia a una idea tan brillante y bien llevada. Por suerte, solo ocurre durante unos pocos niveles y el resto de ellos funcionan de forma perfecta y no se nota apenas la ausencia. Es curioso cómo no se les ocurrió la idea de hacer que las versiones de PlayStation 3 y PS Vita puedan interactuar entre sí y poder hacer lo mismo que en Wii U, pero seguramente lo rechazaron por tener que usar dos consolas que se venden por separado y una de ellas aún no tiene una gran base de usuarios instalada, aunque eso son ya decisiones de la empresa gala.

Ante todo, bonito

Este es de los muy pocos juegos que por ahora usan las herramientas del UbiArt Framework para que los dibujantes puedan plasmar totalmente sus ideas en los juegos sin limitaciones. Eso hace que el juego esté totalmente dibujado a mano y con una calidad de imagen y fluidez envidiable junto a unas animaciones dignas de la Disney más exigente mezclado con el dinamismo de los cortos clásicos de Warner. Sería muy difícil pensar otro juego con un encanto visual equiparable a este.

La música también está cuidada al máximo detalle. Ambiental al máximo pero totalmente envidiable y sin ninguna pega que decir de él. No es la mejor banda sonora del mundo, pero sí la mejor a la que el juego podría optar. No hay ninguna música que esté fuera de lugar, y el cambiarlas habría sido perjudicial para el juego.

Conclusiones

Si con 'Rayman Origins' ya confirmó que podían hacer un juego de saltos y plataformas en dos dimensiones como si fuese una superproducción, aquí nos lo demuestran una segunda vez y que realmente no lo tenían todo inventado entonces en el género. El contenido del juego es casi inalcanzable, y la puesta en escena es casi perfecta. Decimos "casi" porque la adaptación de Murphy a un botón no resulta precisamente cómoda ni precisa.

Aún así, y pese a que ese pueda ser el único problema, esta versión de 'Rayman Legends' sigue siendo tan entretenida y divertida como la original. Ser seguidor de los juegos de plataformas en dos dimensiones y ni siquiera probar este juego debería ser considerado un pecado capital. Y da igual que tengas o no alguien con quien jugar, porque este es de los pocos juegos que pueden presumir de ser de lo más divertidos en compañía y serlo igualmente en solitario.