Hay veces en las que arriesgarse es la única forma de tener éxito en la industria del videojuego. No serán las campañas de prensa, tratar de engañar al espectador o venderle lo que realmente no es, sino que quizás lo mejor sea ofrecer tal cual lo que se tiene entre manos. Cuando en Japón salió a la venta el primer 'Puzzle & Dragons', también conocido como PaD, el país del Sol Naciente vivió una pequeña revolución en dispositivos móviles.
Uno de esos mercados emergentes, como le gusta decir a Satoru Iwata, comenzaba a restarle cuota de mercado a ese apartado donde la Gran N podía serigrafiar su nombre casi con total impunidad: el concepto portátil. Ahora entraba en juego un nuevo competidor, los smartphones llegan para quedarse y Nintendo tiene que tomar medidas; no es viable que Nintendo 3DS, en este caso, deje de ser la gallina de los huevos de oro para los de Kyoto.
Fenómeno de masas buscando ampliar fronteras
Tras innumerables versiones de este fenómeno nipón que recrea como ninguno el género de los puzles con micro-pagos, profundidad y mucha personalidad, Nintendo empieza a dar su brazo a torcer; esa conciencia tozuda que le impedía desde hacía tiempo depositar sus licencias en terceros había terminado con un más que decente 'Hyrule Warriors' y era ahora, con GungHo Online y por la iniciativa de un tal Shigeru Miyamoto cuando 'Puzzle & Dragons' tendría su propia entrega con el fontanero como protagonista. Eso sí, hay una condición inquebrantable y en la que no hay lugar a la discusión: debe ser para Nintendo 3DS, con todo lo que ello conlleva.
Esto es, sin más, que se trate de un juego completo, sin micro-transacciones y que permita al usuario disfrutar de una experiencia idéntica a lo visto tiempo atrás con la primera incursión de la saga en consolas, 'Puzzle & Dragons Z'. En el caso de este último hablamos de más de 1.5 millones de copias en Japón siendo uno de los únicos juegos del pasado año capaz de superar la frontera del millón de unidades. La serie acumula más de 40 millones de descargas en dispositivos móviles y no es casualidad.
Hazte con todos, resuélvelos todos
Ahora nos llega a Europa y Norte América un pack muy apetecible, una ganga si obedecemos a los criterios de horas de juego, diversión y profundidad, que puede mantenernos enganchados decenas de horas a la par que mejoramos y conocemos las mecánicas juables. Recordad esta frase, porque aquí se repetirá desde el minuto uno: "Easy to start, hard to master". Y tanto.
'Puzzle & Dragons Z + Puzzle & Dragons Super Mario Edition', uno de los máximos estandartes de la compañía nipona para 3DS en esta primera mitad de año, es un riesgo, pero es una realidad y tiene todas las de triunfar, en primer lugar porque la fórmula se ha demostrado que funciona; no es un conecta tres al uso, aquí hay mucha más complejidad en el sistema de juego. Si me permitís, comenzaré hablando de 'Z', el verdadero atractivo de este bundle, el verdadero juego con todas las letras.
Modo historia interesante y plagado de clichés de los shonen más puros, coleccionismo de criaturas, decenas de reminiscencias a la saga 'Pokémon', subida de nivel de criaturas, exploración de mazmorras, toques de rol bien ejecutados, combinaciones, estrategia... Lo primero que me ha llamado la atención de 'Puzzle & Dragons Z' es que enseguida se te olvida que originalmente era un free-to-play amén de una ingente cantidad de misiones y demás menesteres por realizar; está perfectamente pensado para una consola portátil y parece haber sido desarrollado, de cero, para Nintendo 3DS.
Decenas de horas donde la sensación de progreso es constante
Tras más de 25 horas de juego me he dado cuenta de lo bien complementadas que están ambas pantallas. La de arriba deja a su aire las batallas, el HUD, la información de nuestros monstruos y los del rival/salvajes. No te agobias ni te saturas. Abajo, por su parte, está la carne del asunto, una cazuela donde se va forjando la pócima.
Hay que hacerse a la idea de que es una historia fantástica donde tú, jugador, tomas un rol. Eres un héroe, un Ranger que tiene que salvar al mundo y con nuestras habilidades recibidas por ser uno de los elegidos tendremos que controlar, educar y mejorar a nuestros compañeros de fatigas. ¿Alguien ha dicho hazte con todos? Así es, la fórmula 'Pokémon' en todo su esplendor con una enciclopedia donde almacenar información de más de 200 especies distintas.
Es muy difícil comprender correctamente el sistema de juego de 'Puzzle & Dragons', tanto uno como el otro, sin probarlo por vosotros mismos, así que os recomendamos encarecidamente que accedáis a la demo disponible de la edición del fontanero y entendáis estas breves premisas que vamos a citar a continuación.
Tenemos esferas de diferentes colores que siguen el patrón de piedra-papel-tijera (agua, madera, fuego) y por otro lado luz y oscuridad, que se dañan entre sí. Por último, los corazones para recuperar vida. Evidentemente, cada monstruo tendrá unos atributos determinados y una naturaleza propia, algo que considero se ha introducido de forma muy satisfactoria porque no es complejo ni demasiado simple, lo suficiente como para darte una hoja en blanco y que seas tú durante tu partida el que compruebes empíricamente qué combinaciones son más satisfactorias a la hora de encarar enemigos y cómo lograr una mayor sinergia entre tus camaradas.
Otro de los aspectos que más me han encandilado es la ausencia del límite de movimientos de un orbe antes de terminar el turno, sino que se basa por el tiempo. Desde el momento en que pretendes mover una esfera de fuego hasta que ejecutas el ataque tendrás unos segundos previamente determinados, así que es capital pensar bien la jugada antes de dibujarla, nunca mejor dicho.
Por lo general es un producto muy bien acabado, que insisto ha sabido adaptarse perfectamente a la plataforma en la que ha visto la luz y que es adictivo como él solo, es un salto cualitativo en la saga que demuestra la no equívoca opinión del respetable japonés cuando consideró esta entrega la mejor hasta la fecha sin distinción entre sistemas. Avanzas, progresas, tienes ganas de más... y el juego te da más. Como guinda, una traducción al castellano como las que Nintendo nos tiene acostumbrados.
Es muy gratificante ver como en todo momento 'Puzzle & Dragons Z' te recompensa de alguna manera, algo que últimamente se está obviando en muchos juegos donde la narrativa prima por encima de todo llegando a la incongruencia y falta de sentido entre lo que se quiere contar y lo que realmente sucede ante nosotros. Créetelo, porque ser el mejor Domadragones de la Ciudad Zed gracias a tu Dispositivo-D es posible, y seguro que a tus primos, sobrinas, hijos o hermanas pequeñas les va a encantar. Perfectamente adaptable para todo tipo de edades y sin distinción de género.
Una cita que no se podía perder el bigotudo
Misma suerte para 'Puzzle & Dragons Super Mario Bros Edition', versión que personalmente me ha sorprendido gratamente; se coge el mapa overworld de cualquier 'New Super Mario Bros.' y se propone una aventura de avance por mundos y niveles, como si de un plataformas se tratase, pero con fases de un PaD. Todas las caras conocidas del Reino Champiñón se apuntan a esta fiesta de color y buen hacer. Tanto modelados de los personajes como interfaz, menús y demás aspectos audiovisuales son una gozada, eliminando de tajo cualquier tipo de componente argumental para ir a tiro fijo.
El mayor de sus problemas, en conjunto, es que no te guste al principio, pues entonces será harto complicado que cambies de opinión más adelante. A su vez, no incorporar modo multijugador 1vs1 es una verdadera lástima, así como la no incorporación de más de una ranura de guardado. Ya sabéis, en los detalles es donde se marca la diferencia y aquí hay que tirar de las orejas a GungHo Online por estas flaquezas que podrían haberlo hecho casi redondo en su propuesta.
Sin más, creo que es de sobras recomendada su compra por el precio que tiene, el cual no alcanza los 25 euros en casi ninguna cadena de tiendas nacional y nos ofrece aproximadamente unas 30 horas para cada uno de ellos holgadamente todo ello sin tener en cuenta lo muy rejugable que es, generoso, adictivo y directo. Un imprescindible del catálogo de Nintendo 3DS, muy posiblemente.