El 6 de Abril 2012 | 11:25
Los chicos de Team NINJA no han sabido desarrollar sus ideas de forma del todo correcta, dado que sus intenciones eran una cosa, y sus resultados han sido otra completamente distintos. 'Ninja Gaiden 3' quería coger lo mejor de la saga y hacerla accesible a más público, pero no lo han logrado. En su lugar, el título ha perdido el "mojo" que lo hacía especial, y la dificultad seguirá siendo elevada para aquellos que no estén acostumbrados a los títulos anteriores de la saga.
Elementos clásicos como las amputaciones o la variedad de armas y magias han desaparecido, y con ello la variedad de enemigos. En 'Ninja Gaiden 2' había que pensar que tipo de arma usar contra cada tipo de enemigo, cuales mejorar primero, hacer uso estratégico de hierbas para recuperar la vida y Ki... y ahora, simplemente tenemos que usar nuestra única arma, que no se desarrolla, para acabar con los enemigos, de los cuales hay menos variedad, utilizando ocasionalmente nuestro único Nimpo para limpiar la pantalla.
Analizaremos el juego punto por punto, pero me parece que el tono general de este texto es fácilmente entendible: el juego ha empeorado en todos sus aspectos excepto en el apartado gráfico, y los fans de la saga (como un servidor) se van a quedar con un sabor de boca muy amargo tras haberlo completado.
Gráficos
El apartado visual del juego, a rasgos generales, ha sido mejorado respecto a 'Ninja Gaiden 2', pero tampoco se puede decir que haya evolucionado demasiado. Ryu ahora tiene un aspecto más fuerte, con músculos más marcados, y en general los personajes protagonistas lucen ligeramente mejor de lo visto hasta el momento, pero tampoco es para tirar cohetes. El juego se mantiene en su linea, con calidad, pero sin alardes.
De hecho los modelos de los enemigos se repiten ocasionalmente, cambiando tan sólo el color, dando una sensación de repetitividad bastante evidente, e incluso de tomadura de pelo. Si te enfrentas a fuerzas militares de un grupo armado en la selva, y luego vas al desierto a acabar con otros, ¿por que razón son exactamente iguales pero con otro tono? Es un poco absurdo, y no da buenas vibraciones.
De la misma forma, este juego les ha tenido que salir más fácil de programar, dado que en lugar de poner las mismas animaciones que en el anterior, Ryu tiene menos, debido a que sólo hace uso de un arma, la Katana. Si, es cierto que con DLC's gratuitos uno se puede descargar armas nuevas, pero no todo el mundo tiene acceso a internet, y por lo tanto lo que un servidor valora es el juego en sí, y no los contenidos descargables futuros o presentes.
Por lo tanto, gráfica ligeramente superior, menos animaciones y enemigos repetitivos. Con los Nimpos, más de lo mismo: los han quitado todos y en su lugar han puesto uno nuevo, que provoca que un dragón en llamas envuelva el escenario y acabe con los enemigos. En ese sentido es más impactante visualmente que lo visto en 'NG2', pero el hecho de que tan sólo haya uno le resta puntos. A su favor podemos decir que el motor gráfico es capaz de mover en pantalla a muchos enemigos sin sufrir tirones ni ralentizaciones, lo cual está muy bien, pues la falta de diversidad de enemigos se compensa con una mayor cantidad de los mismos.
Sonido, Historia y Ambientación
A la hora de ponerte dentro de la piel de Ryu Hayabusa, hay que admitir que los chicos de Team NINJA han intentado hacer un esfuerzo considerable: la historia es más introspectiva que nunca, y todo gira entorno al pasado y al presente del protagonista, algo que había pasado desapercibido en otros títulos de la saga. Pero el problema es que la historia es poco creíble (incluso para este tipo de juegos) y no engancha, y si realmente querían que los jugadores se sumergieran en la historia tendrían que haberle dedicado más tiempo.
El resultado final es un título que tiene una historia que intenta más de lo que consigue, y el resultado puede ser un poco decepcionante. Al final la historia, como siempre, se convierte en tan sólo una excusa para seguir matando, como en las entregas anteriores, por lo que el objetivo que pretendían conseguir con ella no ha sido alcanzado. Respecto a la banda sonora, podemos decir que no desentona, pero tampoco ayuda sobremanera a recalcar los momentos de ansiedad o tensión. Se mantiene constante, y cuando te fijas en ella te das cuenta de que no está nada mal, pero le falta ese toque mágico que tienen otros juegos, que te provocan sentimientos y sensaciones, ayudando así a la imagen a conseguir lo que pretende, afectar al espectador o jugador.
Los escenarios están bien logrados, tienen profundidad y pegan con la historia, el problema es que yo no me habría imaginado a Ryu en ciertos sitios en los que peleamos, combatiendo ciertos enemigos o realizando ciertas maniobras, pero el problema de eso es, como siempre, de la historia, y no del escenario en si. Muchas veces te preguntas, al cabo de un rato avanzando en un mismo mapa, el motivo de tus acciones: ¿Cómo puede ser que tras 10 minutos de historia no haya entendido que diablos tienen que ver los tipos que estoy machacando con la historia? Es un fallo de la narración, pues realmente sí que te han explicado los motivos de tus acciones, pero su ubicación dentro del contexto narrativo en ocasiones carece de fundamento o lógica. Al menos matar es divertido.
Jugabilidad
Sólo un arma y sólo un Nimpo, y ninguno de los dos suben de nivel. Con eso ya está todo dicho. Bueno, realmente no, pero marca mucho el saber que, por mucho que avances en el juego, estás restringido a usar sólo un estilo de combate y una magia, que en realidad ni siquiera se puede considerar tal: el nuevo Nimpo es, sencillamente, un botón limpiapantallas, que elimina a todos los enemigos que hay a tu alrededor. De esta forma, toda la habilidad que podían requerir los Nimpos de títulos anteriores se elimina por completo.
De la misma forma, el arma ahora ya no se carga como antes, cuando apretando Y aumentaba su poder hasta 3 niveles. Ahora sólo aumenta uno, y es tan débil que ni merece la pena. Eso sí, cuando nuestro brazo derecho consigue poder, apretándolo obtenemos un combo que golpea a varios enemigos, matándolos de forma automática. Quiero insistir en el hecho de que, por mucho que regalen armas a través de DLC's, no todo el mundo tiene internet en casa, así que es absurdo pensar "pero en realidad si que hay armas, sólo que te las tienes que bajar". Eso significa, simplemente, que NO hay armas.
Con el arco pasa algo similar al Nimpo: cuando lo sacas apunta automáticamente al enemigo más idóneo: ahora en todos los mapas hay enemigos lejanos inalcanzables a pie, que sólo se pueden vencer de esta forma. Con un flechazo o dos ya basta para eliminarlos, y al no tener que apuntar se hace sencillo y aburrido. Además, el arco no se puede cargar, por lo que sólo hay un tipo de ataque, el cual, por cierto, no afecta a la mayor parte de los enemigos. Sólo los lejanos son realmente vulnerables al arco, el resto mejor matarlos cuerpo a cuerpo si no queréis tiraros un siglo disparando. Ah, y las flechas infinitas también contribuyen a hacerlo todavía más simple.
El resto de armas arrojadizas, excepto los cuchillos que aturden medio segundo al enemigo, han desaparecido. Ni explosivos, ni arma para debajo del agua (que sería inútil, por que no hay agua en la que moverse), ni shurikens: cuchillos arrojadizos que, para lo que hacen, no vale la pena usarlos. Por último, el nuevo sistema de trepar por cuerdas y escalar paredes con Kunais es extraño y al principio más de uno se caerá. Una vez que se le pilla el punto no tiene complicaciones, pero en ciertos momentos se hace monótono y frustrante.
Eso sí, el juego no es más fácil: ahora hay muchos más enemigos en pantalla, por lo que es más probable que te pillen por la espalda y desprevenido mientras realizas un combo. Es frustrante, por que tu habilidad ya no importa, y no sólo eso, sino que además se convierte todo en una cuestión de azar: que los enemigos te ataquen en el momento justo en el que no puedes defenderte ni esquivar. Atacar consiste en alternar X e Y repetidas veces hasta que los enemigos mueran, y usar el nimpo y el brazo cargado cuando estén disponibles. Tan sencillo que, cuando te matan, resulta frustrante.
Conclusión
'Ninja Gaiden 3' ha querido cambiar muchas cosas de la saga de forma muy radical, y eso le ha pasado factura. Querían que las aventuras de Ryu Hayabusa ganaran en profundidad argumental, y lo han conseguido en parte, pero a cambio han descuidado el núcleo del argumento, que es menos interesante que los episodios anteriores. Han pretendido hacer el juego accesible para más gente, pero en lugar de disminuir la dificultad han simplificado el sistema de combate sobremanera, dejando tan sólo un arma y un Nimpo, y haciendo que el resto de opciones que tenía la saga desapareciera, y todo se reduzca a pulsar 2 botones sin mucho sentido. Y, sobre todo, han querido llegar a un público mayor, pero a cambio han perdido el toque que caracterizaba los juegos anteriores de la saga.
Pese a todo, no es un mal juego per se. Los hay muchísimo peores, y otras franquicias han decepcionado mucho más conforme que han evolucionado. Simplemente no parece un 'Ninja Gaiden', parece un juego de acción al uso en el que el protagonista viste de negro y usa una katana con buenos gráficos y animaciones pero poca variedad de situaciones prácticas, y es por eso que se queda en un juego por encima de la mediocridad, pero sin ningún elemento diferenciador que lo eleve a un nivel superior.
Lo mejor:
Ryu Hayabusa sigue siendo espectacular. El juego es mucho más simple y sencillo, que no fácil. Se centra más en la historia, algo que otros títulos dejaban a un lado.
Lo peor:
No convencerá a los más fans de la saga. Sólo un arma y un nimpo hacen que sea más repetitvo y aburrido. La historia, aunque sea mayor en cantidad, es menor en calidad.