Pocas son las desarrolladoras que hoy en día pueden presumir de estar al timón de una franquicia durante más de una década. Una de ellas es AlphaDream, responsable de los 'Mario & Luigi' desde hace 14 años. Pese al éxito continuado de la serie, 'Superstar Saga', el juego que la vio nacer en Game Boy Advance, ha estado fuera del alcance de muchos. Para poner solución a esto, desde Nintendo encargaron a AlphaDream el desarrollo de un remake para Nintendo 3DS que finalmente se ha visto materializado. Bautizado en España como 'Mario & Luigi: Superstar Saga + Secuaces de Bowser', el jugador de hoy en día podrá por fin conocer una versión más renovada del clásico que atrapó a muchos fans y que demostró por tercera vez que a los hermanos Mario el género JRPG les sienta como anillo al dedo.
Una voz explosiva y un reino de Jijí Jajá
Para aquellos que no estén familiarizados con el original, la historia de 'Mario & Luigi: Supoerstar Saga' comienza cuando la Bruja Jijí, procedente del Reino Judía, logra engañar a Peach para arrebatarle su voz y provocarle una peligrosa maldición: cada vez que intente articular un sonido, la princesa del Reino Champiñón provocará explosiones.
Consternados ante la nueva "verbosidad" de Peach, Mario y Luigi deciden viajar hasta el Reino Judía para darle su merecido a la bruja, quien planea conquistar ambos mundos, y devolver la voz a la antaño conocida como Toadstool. El príncipe al rescate de la princesa... y también su captor, ya que Bowser forjará una extraña alianza con los bigotudos hermanos ya que las explosiones provocadas por Peach le impiden acercarse a ella y, por tanto, raptarla. Cuánta caballerosidad.
A partir de este punto, quienes hayan podido disfrutar de la entrega para Game Boy Advance no encontrarán muchas novedades en la historia, como tampoco las habrá durante su desarrollo. Entonces, ¿cuáles son las novedades del juego? Bien, la primera diferencia que apreciaremos nada más comenzar a jugar reside en el apartado artístico. De sprites 2D con colores chillones se pasa a un elaborado prerrenderizado al estilo 'Donkey Kong Country', así como a escenarios más trabajados. De este modo, el primer juego de la serie se pone al día con lo visto en entregas como 'Dream Team Bros.' y 'Paper Jam Bros'.
Si bien hay elementos de este nuevo apartado visual que no terminan de convencerme, como que los secuaces de Bowser pierdan sus diseños personalizados en favor de modelos clásicos y estándares, sí es cierto que los elaborados fondos, así como los interesantes efectos de iluminación, logran que el juego se vea mucho más bonito.
Adaptando al clásico a tiempos presentes
Si pasamos del cambio a la mejora, podemos apreciar que la segunda pantalla de Nintendo 3DS permite aprovechar las nuevas funciones táctiles implementadas para el juego. Ahora resulta mucho más sencillo cambiar entre habilidades especiales y objetos en lugar de recurrir a los tradicionales botones L y R, los cuales pueden llegar a ser un poco molestos cuando la lista de comandos se comienza a alargar.
Aún de mayor utilidad resulta la función que nos permite ver el mapa del juego en la pantalla inferior, un mapa activo que muestra en todo momento la posición de los personajes, así como las marcas que nos indican dónde está nuestro siguiente objetivo. Es cierto que esto resta dificultad al juego al conocer en todo momento el siguiente punto a alcanzar, pero por otra parte nos facilita la tarea de "perdernos" para fortalecer un poco más a Mario y Luigi y resolver con tranquilidad los puzles que se nos vayan presentando.
Facilidad o comodidad, dos caras de una misma moneda que se ven nuevamente mostradas a la hora de guardar la partida. En Superstar Saga para GBA, tan solo podíamos guardar la partida una vez llegábamos a los puntos de guardado repartidos por el mundo. Ahora, si bien estos están presentes, se convierten en algo redundante dado que podremos guardar la partida en cualquier momento gracias al botón Guardar de la pantalla inferior.
Un Goomba con agallas
Tras unas pocas horas de juego desbloquearemos la gran novedad que este remake nos presenta, el episodio Historia de un secuaz: En busca de Bowser, una aventura que se desarrolla de manera paralela a la de Mario y Luigi que nos muestra la acción desde la perspectiva de un Goomba tras caer del Turbokoopa en destrucción.
Este valiente Goomba adquiere el coraje suficiente como para lanzarse a la aventura en busca de otros secuaces que le ayuden en su tarea de rescatar a Bowser. Mientas que el desarrollo de esta historia se produce a modo de cinemática, los combates a librar nos permitirán formar parte de la acción, aunque de manera algo limitada ya que muchos elementos sucederán de manera automática.
Antes de dar comienzo, cada batalla nos invitará a escoger a ocho secuaces que lucharán por nosotros, incluyendo un capitán que les guíe en su valerosa tarea. Es aquí donde entra la interacción con los amiibo, ya que si leemos el chip NFC de Boo o de Koopa Troopa podremos ponerlos de capitán. Al dar comienzo la batalla los secuaces tendrán que hacer frente a oleadas de enemigos de manera automática, mientras que nuestra función se verá limitada a pulsar ocasionalmente el botón que desate un ataque especial. Para ciertas ocasiones tendremos que reservar una serie de órdenes, conocidas como acciones del capitán, ya que consumen puntos de liderazgo.
Esta novedad es de las que sesgan opioniones: o la adoras o te resulta prescindible. No obstante, cualquier veterano en la franquicia sabe perfectamente que estos complementos extraños son parte del sello de identidad de AlphaDream. Nuevamente, tengo sentimientos encontrados, ya que si bien me entretiene y me ayuda a evadirme ocasionalmente de la historia principal, también es cierto que una participación más activa del jugador habría convertido a este minijuego en un complemento sólido. Sin embargo, la parte más criticable de Historia de un secuaz: En busca de Bowser es, sin lugar a duda, el guión, ya que cae al nivel de fanfic escrito por un menor de edad.
Cuando el clásico se convierte en algo viejo
He de reconocer que 'Mario & Luigi: Superstar Saga + Secuaces de Bowser' es un remake de calidad, pero no lo considero un remake completamente perfecto. Hace tiempo escribí un artículo divagando un poco sobre cuál debería ser la función de un remake, y mi opinión no ha variado lo más mínimo desde entonces: un juego que no convierta en viejo, caduco o incluso un error al clásico, sino que en su lugar lo respete para experimentar con nuevas ideas y aplicarlas tanto en la historia como en otros apartados. Y creo que este 'Secuaces de Bowser' convierte al clásico de GBA en un abuelo con la barba sin afeitar, ya que no solo aporta exactamente la misma historia y, esencialmente, la misma experiencia -con algún que otro leve cambio de por medio-, sino que además añade contenido adicional que nuevamente hace que en su lugar el clásico parezca incompleto o menor.
Claro está, hay excepciones como es el caso de 'Metroid II: Return of Samus', que era un juego que con el paso del tiempo lamentablemente no pudo envejecer tan bien debido a las limitaciones de la máquina para la que fue desarrollado, y un remake como 'Metroid: Samus Returns' ayudó a sacar de la tumba al muerto para revivirlo y aportarle profundas e interesantes mejoras jugables y visuales.
No hay riesgo en el conformismo
'Mario & Luigi: Superstar Saga + Secuaces de Bowser' es un remake conformista que se limita a aprovechar un clásico exitoso y sólido para mantener el nivel y agregar algún que otro añadido más o menos curioso y útil. Se le puede culpar de no haber aprovechado la ocasión para ofrecer nuevas ideas en cuanto a historia y combates, pero tampoco se le puede terminar de sentenciar por ello, ya que divierte y conserva la esencia de un juego muy querido por la que hoy en día será una retahila de nostálgicos de la Game Boy Advance. Su principal aliciente, el apartado visual y la serie de atajos y comodidades que la pantalla táctil ofrece tanto en combate como en campo abierto. El modo Historia de un secuaz: En busca de Bowser es un añadido interesante, pero que nuevamente nos ofrece poco margen para interactuar.