Analizar un juego de baile como 'Just Dance 4' no es tarea fácil. Muchos pueden llegar a opinar que los títulos casuales como los que tienen la música como protagonista no pueden incluir muchas mejoras, que nos encontramos año tras año con el mismo título, distintas canciones. Pero el secreto de que la saga de Ubisoft sea la clara vencedora en la batalla por la pista de baile se encuentra en muchos más detalles que simplemente su lista de temas.
Ya no sólo porque fueron los primeros, la saga 'Just Dance' ha sido capaz siempre de sacar todo el partido al mando de Nintendo Wii desde sus inicios, y en esta cuarta entrega vemos por fin esa calidad plasmada en otras plataformas como PlayStation 3. Cuando la precisión es lo primordial, el mando Move y 'Just Dance 4' consiguen ponerse a la altura de la captura de movimiento de Kinect, ofreciendo por fin puntuaciones bastante fieles de cada jugador. Y otra cosa que es evidente, la pelotita de luz es estéticamente perfecta para acompañar nuestros bailes.
Otra de las claves de 'Just Dance 4' es, sin duda, su estética. En otros títulos del estilo, el videoclip suele acompañar al baile, pero las coreografías no suelen casar, siendo un mejunje demasiado incompatible. Ubisoft sigue apoyando a todo el equipo de diseño para que cree a los característicos (y bastante imitados) personajes fluorescentes que tanto nos recuerdan a los cantantes originales, pero que, en el fondo, cuentan con identidad propia. Sin más distracción que un fondo discotequero, en esta versión todo el diseño está más cuidado, con cambios en los fondos y el color suficiente para convertir nuestro salón en una discoteca.
En cuestión de modos de juego, han optado por no incluir muchas novedades más allá de un menú más cómodo; sino más bien condensarlos en los dos modos clásicos: "Just Dance" y "Just Sweat". El primero nos lleva a la ruleta de canciones, mientras que el segundo diseña una tabla para quemar calorías bailando, que podremos ir ampliando a través de los conocidos puntos de "Mojo" del baile principal.
Ahora, cuando escojamos una canción, tendremos la posibilidad de aumentar esos puntos con retos concretos, como ganar las cinco estrellas o cantar bien la frase característica del tema, gracias al micrófono integrado de PlayStation Eye. También iremos desbloqueando nuevas opciones, como puntuadores dobles de Mojo que se sitúan en canciones aleatorias de la ruleta, o si somos muy seguidores de la saga, disfrutaremos recordando pasos de todos los juegos con las versiones de temas como "Call Me Maybe" con estilos cambiantes de baile.
Una de las novedades son las batallas, en las que cada jugador tendrá una canción distinta y tendrán que turnarse para demostrar quién es mejor bailarín. Por supuesto contaremos con temas diseñados para bailar en pareja, coreografías grupales... 'Just Dance 4' es un título para jugar bien acompañado. El nivel es lo suficientemente aceptable para que cualquiera se anime a sudar la camiseta, pero también supondrá un reto para los que quieran convertirse en ases de la pista. Las coreografías son creaciones para el juego, por lo que están adaptadas para que sean divertidas aunque no seamos el mismísimo Michael Jackson.
Modo repetición: Activado
Pero, donde 'Just Dance 4' pulveriza a los demás es en su corazón: las canciones. Una fiesta puede ser apoteósica u horrible dependiendo de la selección musical que realice el DJ. El título de Ubisoft ha conseguido una selección casi perfecta. No sólo tenemos éxitos básicos de las listas actuales, como el ya mencionado de Carly Rae Jepsen, sino que también se mezclan temazos de años anteriores, como "On the Floor" de Jennifer Lopez, con clásicos como "Wild Wild West" de Will Smith o grandiosas rarezas como "Time Warp" de la banda sonora de 'The Rocky Horror Picture Show'. Hasta los Rabbids se incluyen en "Make the Party (Don't Stop)", con una canción tremendamente bailable. Si además la posibilidad de comprar más temas en la PlayStation Store se inicia con "Gangnam Style", la fiesta no puede ir más que para arriba. Pocas canciones sobran de una lista que, más que nunca, está confeccionada al milímetro para asegurar horas de diversión.
'Just Dance 4' siempre tendrá que arrastrar el estigma de que muchos lo considerarán un título tonto para hacer lo propio con los amigos, y por eso ser considerado un juego de segunda categoría. Por lo pronto es el que más partido consigue sacarle a los mandos de movimiento, y si nos quitamos la vergüenza podemos disfrutarlo como enanos tanto solos como acompañados. Pero fiesta que lo tenga, fiesta que triunfa. En su campo es un valor seguro.