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Análisis de 'Dishonored: La Muerte del Forastero', una expansión de alta calidad

ASESINO EN LAS SOMBRAS

Análisis de 'Dishonored: La Muerte del Forastero', una expansión de alta calidad

Por José Antonio Rodríguez Gómez

El 20 de Septiembre 2017 | 16:20

La saga 'Dishonored' vuelve a la carga con una expansión de su segunda entrega que amplía la narración.

'Dishonored: La Muerte del Forastero' es uno de esos productos que llaman la atención por haber pasado de ser una simple expansión a venderse como un juego aparte. Claramente estamos ante una ampliación del contenido de 'Dishonored 2', una historia que ahonda en el argumento en otra dirección y que ha ganado entidad, duración y cualidades suficientes como para convertirse en el episodio de la saga que cierra la experiencia de la secuela y abre la puerta a la decisión de continuar la serie tal vez con un juego completamente distinto. Pero adelantarse es innecesario, y de por sí este título de Bethesda tiene mucho que ofrecer. Nos escondemos en las sombras de Karnaca para acabar con el Forastero en la versión para Xbox One.

Quien no conozca al personaje, es recomendable que antes de nada eche mano de jugar a 'Dishonored 2'. De hecho, aunque podamos comprar el juego por separado y sin necesidad de contar con el original, iniciar La Muerte del Forastero sin haber pasado por la experiencia de la segunda entrega puede resultar una experiencia que desorienta. No por sus entornos, por supuesto (los hay nuevos y hay alguna repetición que encantará a los fans), sino porque en cierto modo notamos que se da por sentado que ya sabemos qué clase de personaje tenemos entre manos. Y 'Dishonored' es, ante todo, una saga en la que hacemos un uso de los escenarios y de las habilidades bastante particular. Si hay algún juego con el que comparar la experiencia, tal vez podríamos nombrar la última versión de 'Thief'. Volviendo a la aventura del juego que nos ocupa, y ya pensando en el usuario que, medianamente, conoce la saga, en seguida nos sentiremos cómodos.

Nuevas y espectaculares habilidades

Espectacular ambientación una vez más que mezcla magia y tecnología

Y eso que las habilidades de Billie Lurk mezclan lo conocido con ciertas novedades. Nada más empezar se nos demuestra que la asesina es capaz de oír los pensamientos de las ratas, pero esa es sólo la punta del iceberg. Por un lado tenemos las posibilidades típicas de la saga: nuestra arma principal es el puñal que servirá para asesinar de manera silenciosa, en la mano derecha. En la izquierda tendremos un arma secundaria, capaz de atacar a distancia (si es lo que queremos, todo depende del uso que le demos); Lurk puede ir despacio y agazapada, provocando muertes por la espalda y colándose por resquicios mientras pasa desapercibida al abrigo de las frías calles de Karnaca. Con grandes dotes para el equilibrio, por cierto. Podemos interaccionar con personajes, activar mecanismos y resolver diversos puzles; todo lo ya conocido. Y luego están las habilidades especiales, el apartado más "mágico" y que demuestra que no estamos ante seres "humanos" al uso. Por un lado está la opción de teletransportarnos, que siempre es útil, sobre todo para no ser vistos. Pero ese teletransporte puede efectuarse dentro de algún enemigo... que nadie empiece a hacer cábalas sobre el efecto que puede tener un teletransporte que tiene lugar dentro de otro ser con materia: el enemigo va a explotar y punto. Y esto es poco menos que una maravilla.

Se mantienen las habilidades de Dishonored pero con ciertos añadidos y diferencias

Pero también está la opción de paralizar el tiempo y flotar como si fuésemos una bola de energía, algo que permite que atravesemos paredes y veamos la disposición de los elementos de las salas aledañas, anticipándonos a los acontecimientos, entrando preparados y siendo más eficaces tanto a la hora de dar muerte a los enemigos como la de recoger ítems. Y es que los objetos son tan importantes aquí como en cualquier otro título, pues son parte irreemplazable de los puzles. Vamos, con frecuencia, a ir de un sitio a otro buscando el elemento necesario: una llave que podremos robar, un objeto que sustraeremos y para el que podemos optar por el sigilo absoluto o por montar una bacanal de sangre... Como siempre, depende del perfil del jugador, si bien ocultarse suele ser, además de más adecuado, lo más satisfactorio y el enfoque inicial con el que se ha programado una vez más esta entrega de Dishonored. Mucho más en contacto con la modalidad de sigilo está la habilidad de cambiarnos de rostro, haciéndonos pasar por otros personajes... siempre que no se den cuenta de que han muerto, claro.

No todo funciona igual

Es también un juego con cambios, y el más notable lo notamos en el desarrollo del personaje. Podríamos llamarlo simplificación, pero quien escribe preferiría nombrarlo como una elección sabia. Consiste simplemente en que no vamos a evolucionar según el esquema de otras entregas, sino que es el título en el que han optado por ir añadiendo habilidades según la necesidad de las situaciones a lo largo del argumento. Esto añade un plus de variedad y nos obliga a desarrollar nuestras propias estrategias y a tomar decisiones que dan como resultado la preparación de cada jugada de manera muy concienzuda. Por supuesto no faltará quien diga que esto no es más que una simplificación del contenido; no nos decantamos por verlo así, y menos aún cuando se trata de una simple expansión. Pero esta crítica se repetirá sin duda más de una vez, ya que el hecho de no tratarse de un juego de la duración de la primera o segunda entrega, hacen que en general notemos que Karnaca ofrece algo menos de variedad, tal vez las opciones a la hora de atajar las diferentes situaciones mermen un poco. Eso no la deja exenta, no obstante, de muchos secretos y objetos por descubrir. Es una experiencia algo más "concreta", tal vez, como ya dijimos en el avance del título; un título cuya campaña puede superarse en una media de 6 horas (dependiendo del nivel de implicación del usuario, claro está), pero que puede extender su duración hasta cerca de 20 si nos dedicamos a conseguir todos los secretos y hacernos con toda la información posible.

El ambiente sigue siendo steampunk

No faltan los personajes con los que interactuar, enemigos especiales a derrotar (se incorporan los guardias mecánicos, que aportan un mensaje aún más steampunk) y situaciones que resolver, como siempre, en primera persona y con diversas opciones a la hora de atajar cada nuevo desafío. Todo esto con la fluidez en el control de que suele hacer gala la saga; la respuesta es perfecta y eso se agradece. sería impensable superar el desafío de un juego como este sin esta cualidad. Además, estamos una vez más ante un auténtico alarde técnico. En nuestro caso, Xbox One ha vuelto a mostrar todo su potencial a la hora de ofrecer personajes de modelado espectacular, junto con un estudio del claroscuro absolutamente alucinante. Una recomendación: ajustar el brillo del juego hasta el punto en el que realmente, las sombras sean casi negras; aporta una calidad y una sensación lúgubre que sin duda son la seña de identidad de la saga.

Conclusión

'Dishonored: La Muerte del Forastero' es, si sabemos tratarlo como una expansión más que como un juego aparte (que también lo es), un absoluto obligatorio en nuestro catálogo si somos fans del género y sobre todo si ya hemos jugado a los anteriores episodios de la saga. Retorcido, violento, lleno de opciones y con muchos modus operandi a la hora de atajar las diferentes situaciones; la protagonista es tan carismática como cabe esperar y el retorno a la ciudad de la segunda entrega sienta de maravilla. Ahora sólo queda esperar y ver en qué dirección continúa la saga... y siempre que se mantengan fieles a esta útil fórmula, estaremos encantados de seguir ocultándonos entre las sombras.

8,5

Lo mejor:

- Argumento absorvente.

- Impresionante ambientación.

- Las nuevas habilidades.

Lo peor:

- Más corto que los juegos principales (obviamente).

- No hay árbol de habilidades.

- Algo más limitado en opciones.

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