CONDUCCIÓN TEMERARIA

'DiRT Showdown', diversión a raudales en un juego sucio, rápido y destructivo

Codemasters Racing presenta una nueva entrega de la saga 'DiRT', que esta vez se aleja de la simulación y de los rallies para presentar un arcade de choques y destrucción

Por Sergio Castaño 26 de Junio 2012 | 15:30

Cuando a uno se le viene a la cabeza la palabra 'DiRT' lo normal es pensar en un juego de rallies exigente y técnico. Pues 'Showdown' es todo lo contrario. Es un juego frenético, con un control sencillo y donde la simulación deja paso a los golpes y la velocidad pura y dura. En este sentido, 'DiRT Showdown' es un spin-off, que toma el nombre de la franquicia y poco más.

El juego presenta dos modos de juegos. El primero es el modo carrera, llamado aquí Showdown Tour. Consta de cuatro temporadas: Pro, AllStar, Champion y Legend, cada una de las cuales con 13 pruebas. Las pruebas estarán bloqueadas al principio (salvo las dos primeras), y se irán desbloqueando a medida que superemos las anteriores. Estas pruebas se presentan a su vez en tres categorías: carreras, destrucción y habilidad.

Escoge vehículo, la pista nos espera

Cada una de las tres categorías tendrá sus propios vehículos. Las pruebas de carreras y de destrucción tendrán coches inventados, deportivos o con diseños de muscle car para las primeras, y vehículos pesados como camionetas, grúas y hasta un coche funerario para las segundas. Finalmente, las pruebas de habilidad contarán con coches licenciados, como el Ford Fiesta, el Mini Cooper, el Subaru Impreza o el Saturn Sky, hasta un total de 30 entre las tres categorías.

Respecto a los vehículos, las opciones de personalización son nulas, y todo se reduce a poder elegir el diseño antes de cada carrera, entre seis o siete predefinidos para cada coche. También podremos comprar mejoras en potencia, resistencia y manejo. En cualquier caso, lo cierto es que no se aprecian grandes diferencias entre los distintos vehículos.

Tonto el último

Dentro de las pruebas de carreras encontramos aquellas en las que el objetivo es simplemente llegar el primero (Race Off), pruebas de eliminación, donde se va eliminando al piloto que vaya en última posición en cada ronda, o pruebas de dominación, donde el circuito se divide en cuatro tramos y se obtienen puntos en función de la posición relativa en cada tramo. En las pruebas de destrucción, el objetivo será conseguir puntos a base de chocar y destrozar a nuestros rivales. Finalmente, las pruebas de habilidad consistirán en completar un circuito en el menor tiempo posible realizando unos trucos concretos, o bien se nos dará un tiempo para realizar los trucos que queramos, por los cuales se nos puntuará.

Lo cierto es que gracias a toda esta variedad de pruebas, el Showdown Tour nunca nos resultará repetitivo. Además consta de un buen número de localizaciones, desde el desierto de Baja a las luminosas calles de Tokio o las playas de Miami. Sin embargo, tiene dos problemas importantes: es corto, y es fácil. Completar todas las pruebas de las cuatro temporadas no nos llevará más de cinco o seis horas, especialmente si tenemos en cuenta que para desbloquear las siguientes pruebas solo hay que hacer podio, y no ganar. Por otro lado, el juego nunca supondrá un verdadero reto, y solo nos pondrá en un aprieto si jugamos en el modo más alto de dificultad.

Sal ahí y diviértete

El segundo modo de juego es el llamado Joyride. Consta de dos escenarios abiertos en los que seremos el único coche sobre la pista y deberemos ir superando las distintas misiones que se nos plantean, como pasar derrapando debajo de unos andamios o por debajo de una grúa, hacer dos trompos sobre un tráiler, o dar un salto con vuelta de campana incluida y aterrizar correctamente. Aparte de esto, los escenarios tendrán escondidos "paquetes ocultos", que podremos recoger.

Respecto al Joyride, es un modo en el que se pondrá a prueba nuestra habilidad, porque si bien algunas de las misiones son bastante sencillas, otras nos pondrán en serias complicaciones, y algunos "paquetes ocultos" estarán verdaderamente ocultos.

En el apartado técnico, el juego cumple en cuanto a gráficos, sin grandes alardes. Sin embargo, sí que son muy destacables los deterioros en los vehículos causados por las colisiones, con un sistema de daños que si bien no llega a ser completamente realista, es espectacular, y hará que a veces terminemos una prueba con poco más que el chasis del coche. También están muy conseguidos los efectos del terreno, y así a veces nuestro coche acabará blanco por la nieve o marrón y lleno de barro. Respecto al sonido, la música rock acompaña sin molestar, y además habrá un speaker que en perfecto castellano soltará frases irritantes cada vez que nos choquemos o adelantemos a alguien.

Finalmente se hace necesario hablar del modo multijugador, y es que es sin duda lo mejor de este juego. Aquí si que encontraremos un verdadero reto, ya que los rivales no nos lo pondrán nada fácil, y además vendrán equipados con la mala leche de la que no dispone la IA. Es necesario remarcar que el multijugador va muy fluido, sin lag y con suficientes participantes como para que podamos encontrar partidas rápidamente. Además, es un elemento que contribuye a alargar mucho la vida del juego, y la satisfacción de destrozar los vehículos de nuestros oponentes o de hacer una vuelta perfecta en una prueba de habilidad es impagable.

Conclusión

En definitiva, 'DiRT Showdown' es, ante todo, un juego muy divertido que nos planteará carreras asequibles desde el primer momento y donde la simulación y la técnica se hacen a un lado para ofrecer velocidad, destrucción, y sobre todo, hacernos pasar un buen rato, sin más pretensiones. Sin embargo, dejara insatisfechos a los más puristas del género o a los que esperen algo parecido a los 'DiRT' anteriores.