El 21 de Septiembre 2015 | 11:25
Quién iba a decirnos hace apenas un año que 'Destiny' iba a convertirse en lo que ahora mismo disfrutamos en nuestras consolas. Un juego incomprendido que no supo destacar sus virtudes ante toda la comunidad de jugadores con su primer paso, al otorgarnos un título base bastante corto de contenido que echó para atrás a muchos que esperaban algo totalmente distinto (Bungie alimentó esas expectativas, todo hay que decirlo).
Con la reciente llegada de la actualización 2.0 -con cambios suficientes para variar en gran medida la forma de jugar a 'Destiny'- y con la llegada de la nueva expansión, 'El Rey de los Poseídos', algo ha cambiado para bien. Parece que casi todos los problemas y características que no gustaron en su día han sabido solucionarse por parte del estudio desarrollador, aunque eso sí, mucho tiempo después y con mucho dinero gastado por parte de los aficionados, que han tenido que comprar todas las expansiones para poder disfrutar realmente de todo lo que el título puede llegar a ofrecer.
'El Rey de los Poseídos' es lo mejor que ha recibido 'Destiny' hasta la fecha, sin más. Además de aportar mucho contenido adicional al juego, todo ese contenido está muy bien pensado y resulta inmensamente satisfactorio superarlo. Aquellos que se quejaban del poco contenido del título ahora descubrirán la inmensa cantidad de contratos que realizar, restando un poco esa sensación de continua repetición. Y aquellos que pensaban que Bungie no había contado (o no había sabido contar, mejor dicho) su historia, también encontrarán motivos para regresar al juego.
Mayor importancia en la trama y en los personajes
La primera secuencia cinemática de 'El Rey de los Poseídos' lo deja claro: Bungie ha puesto toda la carne en el asador para ofrecernos un nuevo contenido a la altura, muy trabajado, con mucha más presencia de la historia, que hasta ahora había sido totalmente anecdótica y muy poco interesante. Tampoco vamos a engañaros: no es que ahora la historia haya alcanzado una importancia mayúscula y vayamos a quedar atrapados en su trama, pero al menos se nota el esfuerzo por contarnos los sucesos que ocurren y por dar un mayor protagonismo a los personajes que nos encontramos y también a nosotros mismos.
Ahora habrá secuencias cinemáticas que aportan personalidad a esos personajes que hasta ahora solo habíamos visto en La Torre para aceptar sus contratos, sin tener ninguna importancia. Ahora sabemos cómo son, reaccionan ante nuestras acciones, nos cuentan sus motivaciones, existen relaciones positivas y negativas entre ellos... ahora todo parece más vivo. Ya no eres un jugador que pasa a por más contratos para seguir jugando, sino que todo parece tener un sentido mayor.
Lo mismo ocurre con el enemigo principal de 'El Rey de los Poseídos'. Antes los jefes finales de las fases y de las raids no eran más que un reto, un bicho más grande que nos ponía las cosas más complicadas que el resto de enemigos estándar. Ahora tiene un objetivo y tiene sentido ir a por él. Tiene sentido realizar lo que realizamos, aunque sea con un guión muy sencillo. Algo tan simple como aportar más trama y personalidad a los personajes secundarios y a nuestros enemigos da un giro de tuerca a 'Destiny' muy necesario, que necesitaba.
Más disfrutable para un solo jugador
Otro aspecto muy necesario a mejorar por parte de Bungie eran las misiones de la historia principal. Uno de los peores aspectos del juego hasta la fecha es que estas misiones no ofrecían un reto más allá de llegar hasta un lugar concreto del mapa, acabar con los enemigos, dirigirnos hacia otro lugar del mapa y volver a acabar con otra oleada de enemigos. No había interés más allá de superar una misión porque sí, porque no aportaba nada a nivel de trama ni a nivel jugable. Ahora, con 'El Rey de los Poseídos' la cosa también cambia de forma radical.
No hace falta más que jugar a la primera misión de la Historia de la expansión para darse cuenta: ahora Bungie ha tratado de narrarnos una historia también a través de los escenarios (aunque sea de forma sencilla); ya no solo se trata de avanzar y disparar sin descanso, ahora ocurren más cosas y deberemos utilizar otras mecánicas que hasta el momento no habían sabido ser aprovechadas en 'Destiny'.
Zonas de plataformas, pequeños puzles muy sencillos, sigilo, huidas... junto a un apartado artístico excelente, hacen que las misiones de la Historia de 'El Rey de los Poseídos' sean una auténtica gozada. Ya no solo son misiones sencillas en las que podemos divertirnos gracias al saber hacer de Bungie en el control y en el gunplay excelso con el que cuenta 'Destiny', sino que ahora también es disfrutable como título para un jugador, con el que poder hacer misiones mientras se nos narra una historia.
En este aspecto y desde la actualización 2.0, también nos encontramos con unos gráficos mejorados respecto a lo que estábamos acostumbrados a ver durante este año. Más y mejores efectos, escenarios más grandes, un nivel de detalle muchísimo más cuidado... 'Destiny' sabe entrar por los ojos y, unido a ese apartado artístico antes mencionado, hace que resulte inmensamente bello recorrer cualquiera de sus escenarios.
El concepto sigue siendo el mismo
Aún así, debemos tener en cuenta una cosa: aunque 'Destiny' haya corregido muchos de sus evidentes errores gracias a la actualización 2.0 y a la llegada de 'El Rey de los Poseídos', el concepto de juego sigue siendo el mismo. Cumplir contratos, realizar misiones, conseguir ítems para poder mejorar nuestro equipamiento y nuestro nivel, repetir zonas y repetir misiones... ahora hay algo más de variedad y da gusto enfrentarse a objetivos distintos, pero el contenido anterior sigue estando presente.
Si estás pensando en retomar 'Destiny' con esta expansión debes tenerlo claro, ya que si no te atraía desde un primer momento su planteamiento jugable, puede que siga sin ser suficiente para ti. Eso sí, ahora sí que hay contenido suficiente y variado, se han mejorado algunos aspectos para que no sea tan complicado avanzar, hay una mayor presencia de la historia, se utilizan más mecánicas además de avanzar y disparar... si abandonaste el juego por hastío, quizás sí que merezca una nueva oportunidad, el título sabe enganchar y hacer que el jugador quiera pasar por allí por lo menos un ratito diario.
Otro juego distinto
Como decía al principio, parece mentira que 'Destiny' haya mejorado tanto a lo largo de un año. Bungie ha sabido escuchar a los aficionados y sus críticas para ir evolucionando y dirigiendo el juego hacia un lugar mucho más disfrutable por todos. Todos los elementos comentados dan fe de ello, pero claro, también hay que tener en cuenta que si quieres disfrutar del juego en su plenitud debes hacerte sí o sí con las expansiones. No servirá únicamente con el juego base, ya que incluso avanzar niveles y conseguir ser más poderoso para poder enfrentarse a otros rivales requiere de las expansiones.
Ha costado mucho tiempo -demasiado para algunos, quizás- y ha costado el dinero de tres expansiones para sus jugadores. Pero 'El Rey de los Poseídos' deja bien claro lo que Bungie quería conseguir con 'Destiny' y lo que puede estar por llegar. Desde luego, el futuro pinta prometedor para un juego que arranca en su segundo año con fuerzas renovadas y sabiendo corregir todos esos defectos que hace un año muchos evidenciaban.
NOTA: La puntuación otorgada debe tenerse en cuenta para lo que hoy en día significa 'Destiny: El Rey de los Poseídos'. Es decir, el juego junto a todas las expansiones, no solo el juego base.
Lo mejor:
- Mayor presencia de la historia y personalidad para los personajes secundarios. - Ahora no solo se trata de avanzar y disparar. - Las misiones de la nueva Historia son muy satisfactorias. - Engancha.
Lo peor:
- El concepto del juego sigue siendo el mismo, aunque con mayor variedad. - Es necesario contar con amigos para disfrutar de todo el contenido en plenitud. - Requiere tiempo y compromiso por parte del jugador.