'The Darkness II', una bocanada de aire fresco aderezada con toques sangrientos y demoniacos

Nos encontramos en una generación en la que los shooter en primera persona azotan el mercado quizás de manera desmesurada. Lo negativo no es la abundancia de títulos de un mismo género, sino que el contenido de los mismos resulta excesivamente análogo. Afortunadamente, siempre hay una excepción que confirma la regla, y ahí entra en juego 'The Darkness II'.

Todo por su amada

Jackie Estacado vuelve a las andadas con los mismos problemas que acarreaba en su predecesor; la oscuridad y su novia Jenny son los principales ejes sobre los que se sustenta la trama argumental del personaje de cómic creado por Garth Ennis.

Aunque pueda parecer un factor negativo, la historia del juego es mero atrezzo. Peca de plana, previsible y en determinados momentos de algo confusa. Pero cumple con el cometido de mantener al jugador con la sed de seguir avanzando. A grandes rasgos, este viaje demoníaco a la locura se centra en que una organización llamada "La hermandad" quiere arrebatar la oscuridad a Jackie, quien había tratado de olvidar la presencia de la misma en su cuerpo durante los dos últimos años. Pero a Estacado no le queda otro remedio que sacar a relucir la maldad que posee su cuerpo, que además es el único recurso que le queda para intentar recuperar a su malograda novia.

Sangre a raudales

Pero esto da igual, porque una vez metidos en harina y aunque en ciertos momentos se pretenda transmitir algo con la narrativa, lo que importa es la acción. Porque 'The Darkness II' consigue algo realmente difícil. Aportar ese toque diferencial no sólo a un género, sino lo que es más complicado todavía tratándose de una secuela. Consigue plasmar una renovación general y aportar más dinamismo, frescura y al fin y al cabo, mejorar magistralmente las bases impuestas en su anterior entrega.

Probablemente la mayor virtud del juego la encontramos en la sensación de poder que otorga al jugador desde el inicio de la aventura. Hay multitud de videojuegos protagonizados por súper-héroes, pero me atrevería a decir que en ninguno se tiene el sentimiento de ser prácticamente invencibles, casi de dar miedo a los enemigos aunque éstos traten de decir con voz temblorosa que no les asustas. Tú vas por el escenario armado con dos brazos maléficos y con todas las armas que te encuentras por el camino. Eres la oscuridad y puedes destruir todo lo que se te ponga por delante. Y así te sientes durante las siete u ocho horas que dura la aventura.

Los tentáculos demoniacos son la guinda del pastel y motivo del disfrute continuo. Porque con ellos sale a relucir uno de los juegos más violentos y sanguinarios de los últimos años. Desmembramientos de las extremidades o la cabeza, desgarramiento de órganos internos del cuerpo humano o lanzamiento de objetos puntiagudos -o no tanto- ideales para empalar a todo el que se ponga por medio. Y por si esto fuera poco, la recuperación de la vida de Jackie se realiza comiendo los corazones de los enemigos caídos. Lo mejor de todo es que todo esto lo hace por amor.

A pesar de la linealidad, la diversión es constante

Por tanto tenemos un cóctel de lo más temible; Todo tipo de armas de fuego y los mencionados brazos, ¿cómo no nos vamos a sentir poderosos?. Además, el uso de tantos medios resulta sorprendentemente intuitivo. Probablemente sea una exageración, pero los gatillos de los mandos justifican su presencia con juegos como 'The Darkness II'.

Si esto fuera poco, las habilidades de Estacado se pueden incrementar con la esencia que sueltan los enemigos que vamos derrotando. En determinados puntos de los niveles encontramos un portal para acceder a la rueda de habilidades gracias a la cuál podemos mejorar todos los poderes y las armas. E incluso desbloquear nuevos ataques como lanzar abejas para que aturdan durante unos segundos a los enemigos o un agujero negro muy similar al de la primera entrega que traga todo lo que pase por allí.

Los enemigos estándar no nos pondrán las cosas excesivamente difíciles. La gran mayoría de ellos se dedican a disparar sin sentido. Aunque hay alguno de ellos con características especiales que pueden ponernos en más de un aprieto. Especialmente los que van equipados con un enorme foco que nos apunta directamente con la consecuente debilitación de Jackie, y otros portadores de una especie de látigo capaces de arrebatarnos las armas de fuego como si de un jinete del lejano oeste se trataran.

Por achacarle algún defecto, quizás el desarrollo del título sea excesivamente lineal y simple. Se ha optado por una acción más frenética y directa que en la primera entrega, que se caracterizaba por hablar con diversos NPC's y trasladarse por los diversos niveles usando el metro como nexo. Ahora todo se desarrolla de una forma más directa, lo que convierte las fases en pasillos rectos cuya única finalidad es que pensemos cómo vamos a desguazar al primer pobrecillo que se nos plante delante con la única preocupación de apagar todas las luces que nos rodean para que Estacado muestre toda su fuerza en su máximo esplendor.

Además, aunque la ambientación insta mucho a la imaginación, no hay fases que se queden guardadas en la retina. Quizás un peculiar paseo en una mansión del terror de un parque de atracciones -y el nivel en general- sea lo más destacable por su originalidad. También dejan que desear los enfrentamientos contra los jefes finales. El primero que nos encontramos destaca mínimamente porque hay que vencerle con una particular estrategia, pero los posteriores son prácticamente clónicos entre sí y no aportan nada de diversión.

Un cooperativo que adorna el producto

Para tratar de paliar la escasa duración de la historia principal se ha incluido un modo cooperativo llamado "Vendetta". Narra tramas paralelas y permite jugar hasta a cuatro personas en red. Cada uno de los cuatro personajes seleccionable posee su propia rueda de habilidades y un tipo de ejecución especial. Es un buen complemento, pero utilizar sólo armas de fuego como miserables humanos le resta bastante gracia.

Todo está aderezado con un aspecto visual en cell shading que realmente le siente de fábula con la atmósfera que pretende transmitir. No hay que olvidar que nos encontramos ante la adaptación de un cómic. Además, un acabado realista quizás desentonaría con el gore que atesora el título. El doblaje al castellano es más que correcto, pero en cualquier momento se pueden poner las voces en versión original.

'The Darkness II' es una de las sensaciones de este comienzo de año. Su planteamiento aporta un soplo de frescura y dinamismo a un género que cae siempre en las mismas pretensiones. Es de agradecer que haya estudios que aun se preocupen por ofrecer algo diferente. Aunque se pueda finalizar en apenas dos tardes, es de esos títulos que merece la pena tener muy en cuenta por su planta, puesta en escena y su frenético ritmo. Y porque todos queremos tener dos brazos más.