El 24 de Agosto 2017 | 16:05
Una de las mayores razones por las cuales asistimos a nuestra sala de cine favorita es porque podemos vivir aventuras y viajar a lugares increíbles sin moverte de la butaca. Esto ha ganado un gran peso gracias a técnicas como el 3D, totalmente inmersiva que hacen que nosotros seamos partícipes de la historia. Luc Besson es, sin duda, uno de los mejores directores franceses del séptimo arte. Con grandes películas como 'El gran azul', 'El profesional' o 'El quinto elemento', el cineasta supo hacerse un hueco en el mercado desde el año 1988 hasta 2006... Me refiero a 2006 porque es ahí cuando su carrera empezó a decaer. Dirigiendo en esos años, películas tan prescindibles como la trilogía de 'Arthur y los Minimoys' o 'Lucy'. Con su última cinta centrada en la ciencia-ficción parecía que Luc volvería por la puerta grande. Una película que prometía ser una mezcla entre 'Star Wars' y 'Avatar'... Pero sólo era eso, una promesa. Un tráiler y unos avances que prometían, pero que al final han quedado en la nada. Hoy vengo a contaros mi descontento con 'Valerian y la ciudad de los mil planetas' y como ha cogido mi ilusión por vivir otra experiencia única en el cine y la ha tirado por el retrete.
Una historia que no termina de organizarse
Pongámonos en situación. No sería capaz de realizar una sinopsis clara de esta película. Si das una vuelta por google ninguna sinopsis que encuentres, habla de lo que la película trata realmente. Y pienso que esto se debe a que el principal problema de 'Valerian y la ciudad de los mil planetas' es su guión. Un guión bochornoso con fallos del tamaño de cualquier planeta que vemos en él. En realidad la trama se trata de ver como Valerian y Laureline van de un lugar a otro con la única motivación de salvarse el culo el uno al otro. No he sacado otra cosa clara de la historia. Quizás es su forma de contarla, o que se trata de una forma cutre de rellenar un guión que no puede llegar a más de 50 minutos, cuando la cinta tiene una duración de 2 horas y 20 minutos. La película tiene un comienzo brutal, con una canción perfecta para la ocasión como lo es 'Space Oddity' del gran David Bowie. Al son de la música vamos haciéndonos una idea de lo que consiste 'Alpha', una metrópolis en constante expansión, donde especies de todo el universo han convergido durante siglos para compartir conocimientos, inteligencia y culturas. A partir de ahí, todo empieza a decaer como si de una cuesta empinada se tratase. Un comienzo genial que parece quedar ahí para el resto de la cinta. Tuve constantemente la sensación de que no había un desarrollo de la historia, sólo un comienzo y un final. Un guión que parece sacado de los años 70, con conversaciones bobas, sin chispa que dan vergüenza ajena. Parece que el guión se ha estancado en la época en la que salió el cómic y no, no puedes hacer eso en pleno 2017 porque el público ha evolucionado y con él la mente de los espectadores.
Personajes muy deficientes
Una cosa muy criticable de la película es, sin duda, sus personajes. Empecemos por el protagonista. Valerian, interpretado por Dane DeHaan, un actor que me dejó boquiabierta en 'La cura del bienestar' por su gran talento interpretativo. Por desgracia, el pobre Dane tiene que lidiar con un personaje desaprovechado, un intento cutre de Han Solo que te sacará de tus casillas en más de una ocasión. Acompañándole tenemos a Laureline, a quien da vida la simpática Cara Delevingne. Cara, pese a no ser una actriz de talento descomunal como su compañero, consigue superar al protagonista. Un personaje un poco más elaborado, con capacidad de actuar por sí misma (en pocas ocasiones, por desgracia), que promete ser una Leia, pero también se queda a medio camino, teniendo que depender del visto bueno de su Valerian en vez de actuar por sí sola. Un romance forzado proveniente de actores que tienen química cero entre ellos, de hecho, en algunos momentos hasta me ha incomodado este ''enamoramiento'' por estar tan fuera de lugar... El resto de personajes, como el de Clive Owen, son de lo más planos y sin sustancia, que actúan sin alguna motivación creíble. Un personaje en concreto ha causado mucho dolor a mi corazón. Este es el personaje que interpreta Ethan Hawke. Todos sabemos que Ethan cuenta, en su mayoría, con una filmografía de lo más destacable con personajes inolvidables. Por desgracia esto no ocurre aquí, ya que escogen a este actor tan increíble para dejarlo en ridículo. Una cosa muy curiosa es que el personaje de Rihanna sea el personaje más interesante de toda la película. Un personaje que podría tener un buen transfondo y segundas lecturas, que pasan desapercibidas, una pena.
Música muy mal colocada
La película vuelve a fallar esta vez en el apartado sonoro. El encargado de la música es Alexandre Desplat, que cuenta con grandes trabajos como los realizados en 'El gran hotel Budapest' o 'El discurso del rey'. Pero Alexandre flaquea en 'Valerian y la ciudad de los mil planetas'. Como hemos mencionado antes, lo único decente en este apartado es el granito de arena que aporta David Bowie, lo demás puede ser descartado de tu mente. Se supone que la música en el cine trata de sumergirte en la película, pero en este caso lo que hace es sacarte completamente de ella, ya que no parece haber una sola nota en su sitio, sobre todo en los momentos impactantes.
Increíble 3D
Como es comprensible, no todo es malo en esta cinta y tiene unos elementos que son dignos de elogiar. Sin lugar a dudas, el principal potencial de esta cinta es el apartado visual. Yo vi la película en 3D y no me arrepiento de haberlo hecho, es lo mejor del film. Es increíble ver los planetas tan coloridos y llamativos que han creado para la película. Un diseño de vestuario y de personajes brillante, cada especie tiene algo característico y, aunque no llegue a ser tan sorprendente como lo fue 'Avatar' en su día, el apartado cumple con creces. Aunque no es el mejor 3D que verás en tu vida, merece la pena verla en esta calidad. Sin duda es una película que puedes ver un día tranquilo de agosto en el que lo único que te apetece es desconectar antes de que llegue el temido septiembre, con todo el estrés que ello conlleva.
Visualmente espectacular, suspensa en todo lo demás
En resumen, 'Valerian y la ciudad de los mil planetas' es una experiencia visual muy placentera. Con nuevos planetas y especies por descubrir gracias a un destacable 3D que hará que en más de una ocasión te marees como si de una nave espacial se tratase. Por desgracia, tendrás que lidiar con un guión y unos personajes desechables y una música que en alguna ocasión puede dejarte ''loco'' de lo mal colocada que está. Luc Besson, fuiste un grande, sólo espero que estos años sean una mala época para ti y no te adentres en ese lado de Hollywood con películas visualmente espectaculares que cuentan historias patéticas y vuelvas a ser el Luc Besson que todos amamos y admiramos.
Lo mejor:
- Visualmente es una delicia.
- Comienzo potente.
Lo peor:
- Guión muy mejorable.
- Personajes sin química ni objetivos.
- Música incorrecta.