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Crítica 'To the Bone': una película vacía

TO THE BONE

Crítica 'To the Bone': una película vacía

Por Maribel Baena

El 20 de Julio 2017 | 15:10

Crítica 'To The Bone': una película vacía y unos personajes con los que es difícil empatizar.

Hay películas que, por un motivo u otro, llaman la atención incluso antes de salir a la luz. Eso pasó con 'To the Bone', aunque en este caso el motivo de su polémica estaba claro: en el propio tráiler se veía que la forma de tratar los Trastornos de la Conducta Alimentaria quizás no era la más apropiada.

Desde el momento en el que se puso el foco en la película, todos los seguidores de Netflix esperaban con ansias su estreno. Se la comparó con la serie '13 Reasons Why' (criticada y amada a partes iguales), y se dijo de ella que sería una película que conseguiría sembrar el debate. Quizás el problema es nuestro, como futuros espectadores, por hacernos demasiadas ilusiones, por esperar demasiado de una película. Pero lo cierto es que 'To the Bone' es decepcionante a prácticamente todos los niveles, excepto el visual.

Es decepcionante porque, al menos yo, esperaba mucho más. Esperaba una película capaz de desgarrar, sea esto positivo o negativo. Pero no. Es una película vacía, que se alimenta de un tema bastante controvertido a nivel social para ganar visualizaciones, pero que ni consigue concienciar a nadie sobre un TCA ni hacer que sintamos ningún tipo de empatía por los protagonistas.

Para ser sincera, y a modo de anotación personal, he de decir que esperaba una película capaz de removerme. Algo parecido a 'Prozac Nation', pero hablando de los Trastornos de la Conducta Alimentaria en lugar de la depresión. Incluso algo cercano a 'Inocencia Interrumpida', que aunque sea una película bastante tóxica en según qué momentos, también es una obra magistral. No obstante, la sensación que da es la de haberse quedado en la superficie, no haber sido capaz de ahondar en ningún momento, en casi ningún aspecto.

Una trama mediocre, unos personajes planos

La película comienza con, más o menos, fuerza. Ellen es una chica que padece anorexia, y cuyo peso corporal es más bajo del saludable; es más, se encuentra muy por debajo de lo que debería. Su familia teme por su salud, y eso les lleva a buscar un especialista que sea capaz de tratarla. Por supuesto, estamos hablando de una chica con una familia "desestructurada"; y aunque no se achaca directamente el motivo de su enfermedad a esto, sí que se deja caer que podría haber influido. El hecho de que su madre sea homosexual y tenga pareja, por ejemplo, es algo que mencionan en más de una ocasión. Y, repito, no se dice de forma directa, pero sí que se deja caer.

Ellen y Luke, protagonistas

Ellen se ve obligada a internarse de nuevo para salvarse, y comienza la terapia en una especie de casa para personas con trastornos. La terapia es diferente a lo que ella dice haber probado hasta ese momento, puesto que no la obligan a comer; funciona de otra forma, mediante refuerzo positivo. Si ella va comiendo, va consiguiendo puntos y, poco a poco, va consiguiendo privilegios. Hasta aquí todo bien, o relativamente bien.

El problema viene cuando la película trata de profundizar, porque no lo consigue. En el tema de los TCAs, solo se habla de la importancia de su estado de salud físico. Sí, el terapeuta sí que menciona que a él no le interesa lo que ella haga con la comida, que lo realmente relevante es cómo se sienta a nivel interno. Pero, aún así, no se hace hincapié en este aspecto. No solo no se profundiza aquí, sino que no se profundiza en general. La sensación constante es que se está viendo una película bastante vacía, que no sabe ir más allá de lo que ya nos mostró en un primer momento en el tráiler; es más, el tráiler contiene mucha más emoción que la película en sí.

Cuando se hace una película de esta temática, se espera que se ahonde en los porqués. Y si bien es cierto que no siempre hay un porqué, se podrían haber ido dando algunas opciones. Se podría haber hablado más de un suceso pasado que marcó mucho a Ellen, y que se menciona dos veces por encima, pese a que se nota que a ella realmente le hizo daño. Se podría profundizar más en los TCAs que sufren sus compañeros de casa, por ejemplo. Es como si hubieran tratado de escribir un libro de mil páginas, y luego lo hubieran resumido en unas escasas trescientas.

Todo se centra en la extrema delgadez de la protagonista

Más o menos lo mismo sucede con los personajes. Es muy importante poder crear conexiones con los protagonistas de una película para, de esta forma, poder sentirlos como algo nuestro. Si no vemos a Ellen como una persona cercana a nosotros, si no nos sentimos reflejados en algunos de sus miedos, o si no los sentimos como reales, la película no sería capaz de transmitirnos nada. Y es justo eso lo que ha pasado. Esto contribuye a la sensación de que estamos ante una película vacía, carente de interés.

Con esto no quiero decir que no se deje ver. Sí, se deja ver, por supuesto. Si tuviera que puntuarla, incluso podría llegar a darle un seis, porque es entretenida y tiene una fotografía muy trabajada. La banda sonora es aceptable, y la historia, pese a ser bastante escasa, es pasable.

El único amor que puede salvarte es el propio

Netflix ya metió la pata con '13 Reasons Why', haciendo ver que si el protagonista se hubiera fijado en Hannah, quizás ella hubiera continuado con vida. Que a ella podría haberla salvado el amor, cuando se encontraba sumida en una depresión tras diversas situaciones de abuso tanto físico como psicológico. Y pese a todo lo que se le ha criticado por eso, parece que no ha terminado de aprender, porque en 'To the Bone' está a punto de suceder algo parecido. Por no hacer ningún spoiler, dejaremos ahí el suceso en particular. Pero sí que veo necesario hacer hincapié en que de las enfermedades mentales no te puede salvar el amor de otros.

Porque cuando sufres TCA, eres tú mismo el que te estás rechazando y despreciando. Por mucho que otros puedan demostrarte su amor, su cariño, necesitas aceptarte y valorarte tú, o será imposible que quieras salvarte. A fin de cuentas, las enfermedades mentales son una lucha contra uno mismo, contra una mente que se encuentra enferma en ese momento.

Una película muy vacía

Sí, es muy importante contar con un círculo que sea capaz de apoyarte y valorarte en todo momento. Mas también es fundamental que seas consciente de que el único amor que a fin de cuentas va a poder salvarte es el tuyo propio. No le hagáis caso a esa manida frase de "quién te va a querer si no te quieres tú", porque eso es falso; aunque tú no ese momento no te quieras, hay mucha gente que sí es capaz de hacerlo. Refugiaos en ese amor siempre que sea necesario, pero no olvides que debes comenzar por aceptarte tú.

'To the Bone' no es tan tóxica como pudiera parecer en el tráiler

Se ha hablado mucho de la toxicidad de 'To the Bone', de lo peligrosa que podía llegar a ser para aquellas personas que se estuvieran recuperando de un TCA, en plena lucha. Y es que el tráiler es realmente tóxico, así como algunos detalles de la película: mostrar una delgadez tan extrema como síntoma de una enfermedad mental, romantizar su "fragilidad", dar algunos trucos para personas con TCA... Pero no es tan tóxica como otras películas. Sí, es lo que se debe considerar 'trigger warming", o que puede acabar llevando a una recaída de un TCA, pero no es tan dura como pudiera haberse imaginado por el tráiler.

Una película más que pasará a olvidarse pronto, y que, dentro de unos años, solo será buscada en internet por personas que padezcan un TCA y sientan la necesidad de verse reflejadas en la pantalla. Para así tratar de aliviar su dolor, sin saber que eso solo les puede provocar más.

Lo mejor:

- Fotografía.

Lo peor:

- Personajes vacíos.

- Trama inconsistente.

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