Crítica 'Escuadrón Suicida': Cuando los malos no lo son tanto

Otra superproducción relacionada con el mundo de los cómics y los superhéroes acaba de aterrizar en nuestros cines. Una de las películas más esperadas del año como 'Escuadrón Suicida', recoge toda la atención del público, ya sea para bueno para malo, este film va a dar mucho que hablar. En esta crítica no se va a destripar ningún aspecto del guión o de la trama.

En 'Escuadrón Suicida' se nos plantea una interrogante muy interesante, ¿por qué los malos no pueden hacer de héroes? A tenor de esta consideración, la nueva película de David Ayer, recoge un gran elenco de antagonistas, para que cumplan su cometido inverso, es decir, coger a lo peor de lo peor de la sociedad para que éstos salven al mundo. Sin duda es un planteamiento interesante, que nos aleja del concepto original de los superhéroes, personajes guapos, fuertes, altos e ingeniosos que encandilan al espectadores a base de puñetazos y cuerpos esculturales.

En 'Escuadrón Suicida' no tenemos nada de eso, sino que recogemos un grupo de protagonistas mal hablados, locos, irascibles y con pocas ganas de seguir las reglas. Lo que más sorprende de la película, es que a pesar de alejarnos de los iconos clásicos de este tipo de películas, los protagonistas enseguida atraen al espectador, siendo un grupo que al final del film empatiza a la perfección con el público.

Uno de los aspectos menos positivos de la película es su guión. La necesidad de gastar casi la primera hora de película en presentarnos a los diferentes villanos, hace que el resto de guión flojee, sobre todo, porque 'Escuadrón Suicida' no propone nada nuevo a lo ya visto antes en cintas como 'Los Vengadores', con la gran diferencia que la película de Marvel no se tiene que entretener en presentarnos a ningún personaje, ya que éstos tienen sus propias películas, por lo que los guiones son más completos.

Este hecho es el que marca toda el film, y lo que hace que en muchas ocasiones estemos viendo una película con muchos y buenos personajes, pero que puede parecer estar vacía. Asimismo, para los más puristas del cómic, hay que decir que David Ayer no se ha ceñido a seguir la historia por los mismo cauces que el tebeo, lo cual puede empobrecer la visión de de la película a los más aficionados a DC Comic.

Los pesos pesados del grupo

En total contamos con un grupo de siete presidiarios. Como líderes de este grupo, y principales activos de la película, nos encontramos a Deadshot, encarnado por un sobresaliente Will Smith, y Harley Quinn, con una gran interpretación de Margot Robbie. Estos dos personajes son el eje fundamental de la cinta, y los que mueven todo el hilo de la acción. Por un lado Will Smith vuelve a demostrar que es capaz de encarnar a cualquier tipo de personaje, esta vez tenemos un Deadshot movido por la ira y el desprecio por la vida humana, pero que a la vez se abre para mostrarnos un villano el cual demuestra que sí hay un corazoncito debajo de esa mascara manchada de sangre.

Por su parte Harley Quinn es la personaje que más gusta, no solo por sus estridencias, sino porque podemos descubrirla de forma mucho más completa, comprendiendo sus idilios con el Joker, donde podemos ver que detrás de esa locura, se encuentra una cordura mucho más compleja de lo que podamos pensar.

El resto de miembros del 'Escuadrón Suicida' pasan más o menos sin pena de gloria. Este hecho es algo que afecta mucho a la cinta, ya que tenemos dos personajes muy marcados y satisfactorios (Harley Quinn y Deadshot), pero los cuatros restantes ni se abordan de la misma manera que los anteriores, ni tampoco tienen un peso relevante en el guión.

Este grupo lo completan Killer Croc (Adewale Akinnuoye-Agbaje), Katana (Karen Fukuhara), Diablo (Jay Hernandez), Encantadora (Cara Delevingne), Capitán Boomerang (Jai Courtney), y el soldado Rick Flag (Joel Kinnaman) como organizador y jefe de todo el Escuadrón Suicida.

Para comprender el trato diferentes que se ha dado a estos antihéroes, solo hace falta ver a Capitán Boomerang, un personaje que pasa sin pena ni gloria, como el típico graciosos del grupo, el cual la mitad de las veces se basa en un humor vacío y demasiado tópico. Un protagonista que pasa a ser secundario, y que si no estuviera en la película, ésta no se vería afectada en nada. Es una lastima el trato tan diferenciado entre personajes, algo que por ejemplo la saga 'Los Vengadores' no se aprecia, sobre todo por el conocimiento e importancia que se le ha dado a cada uno de los personajes.

El nuevo Joker y Batman

Uno de los grandes alicientes de 'Escuadrón Suicida' era ver al nuevo Joker encarnado por Jared Leto. A pesar de que este personaje se nos presenta como secundario, y viene a explicarnos la historia de Harley Quinn, más que tener un peso en el guión, nos encontramos con un Joker igual de psicópata pero mucho más sofisticado. El personaje recrea muy bien lo que podemos ver en el cómic, y muy diferenciado a lo que hemos podido ver en otras películas. Ahora tenemos a un loco siempre bien vestido, más parecido a un capo de la mafia, que a un demente solitario. Asimismo se puede comprobar una faceta algo desconocida, su adoración por Harley Quenn, y cómo a pesar de su perturbada mente, existe también una pizca de amor sobre esta psicóloga.

La actuación de Jared Leto es correcta, defendiendo bastante bien todas las características que definen al Joker, pero también es cierto que no estamos ante la recreación más magistral que hemos podido ver, por lo que este Joker, a pesar de ser correcto, no vuelve a encumbrar al personaje que dio vida el desaparecido Head Ledger.

En cuanto a la presencia de Batman, se hace más puntual que otra cosa. Aprovechando el positivo tirón de Ben Affleck, la película destaca al murciélago como personaje fundamental en todo lo que significa el mundo DC, pero siendo su paso algo anecdótico y como tirón para todos aquellos amantes del Caballero Oscuro.

Conclusión

'Escuadrón Suicida' se planteaba como una de las películas del año, a pesar de ser entretenida y perfecta para esta época estival, no ha llegado a ser lo que se esperaba. El grupo de antagonistas clásicos está bastante desequilibrado y quizás DC tendría que haber esperado algo más en lanzar esta película para que los espectadores pudieran haber conocido más a los diferentes personajes. Este hecho provoca que el guión no este tan elaborado como se esperara, y que muchas partes del film sean demasiado típicas, como así su humor, que no dejan de ser chascarrillos convencionales, que muchas veces no levantan más una simple sonrisa, sin llegar a encandilar al respetable.

Como suele pasar en este tipo de saga, se supone que 'Escuadrón Suicida' volverá con una segunda parte, ya que tiene mucha pinta que será un éxito en taquilla, aunque la crítica no le acompañe. Esperemos que tomen nota de todo esto, para cuando 'La Liga de la Justicia' vea la luz, sea un competidor serio a 'Los Vengadores', ya que hoy por hoy, los personajes y las películas de DC están un paso atrás de los superhéroes de Marvel.