Ya no nos extrañamos a ir a nuestro cine más cercano, ver la cartelera y encontrarnos en ella más de un remake o secuela. La industria parece que se está quedando sin ideas y opta por adaptar los clásicos de siempre a nuestro época actual. El género del terror no iba a quedarse fuera y es que son innumerables las adaptaciones y remakes que encontramos en él. Desde los inicios del cine, la literatura siempre ha ido de la mano del mismo, siendo el séptimo arte uno mucho más nuevo, pero que ha sabido hacerse amigo de los libros para rellenar los guiones con esas interesantes historias.
¿Un nuevo Universo?
Recordando las décadas de 1930 o 1940 podemos observar que se vivió un gran auge en el cine del terror. Universal nos presentaba sus peculiares monstruos, algo que aterraba a los espectadores. Drácula, el monstruo de Frankestein o la Cosa del Pantano son sólo algunos ejemplos de lo que la productora nos trajo, algo que ha seguido haciendo a lo largo de los años. El pasado año 2017 se quiso dar otro enfoque a esta peculiar franquicia, iniciándola desde cero con la cinta protagonizada por Tom Cruise, 'The Mummy'. Por desgracia, este estreno fue todo un fracaso y la misma Universal se echó para atrás a la hora de crear el Dark Universe. Tres años después nos muestran su nuevo filme 'El hombre invisible' que, pese a no pertenecer de forma oficial a este universo, se puede intuir que en un futuro cercano esto sea una realidad y más viendo el gran éxito que ha tenido la película estrenada el pasado 28 de febrero.
Director joven
'El hombre invisible' es la nueva película de terror producida por la famosa Blumhouse y, ¿por qué decimos que podría ser incluida en el Dark Universe? Pues porque se trata de un remake de un clásico de Universal, una cinta con el mismo nombre realizada en el año 1933. Esta, a su vez, se adaptaba del clásico de la literatura de terror escrito por H.G. Wells. La nueva adaptación de 2020 cuenta con el guión escrito y dirigido por Leigh Whannell, quien ya nos dejó muy sorprendidos con 'Upgrade' y está demostrando que es todo un director con una carrera muy prometedora. Dicho guión es quizás, el punto fuerte de la cinta. Todo un clásico del terror adaptado a nuestros tiempos con la tecnología como principal villano de la historia. No queremos centrarnos demasiado en la historia del filme para evitar spoilers pero diremos que es de lo más interesante y nos mantiene enganchados desde el primer momento. La sinopsis es, a priori, bastante simple: Cecilia es una mujer que ha sufrido de abusos por parte de su pareja. Esta decide un día abandonar su hogar actual y huir de todo ese sufrimiento. Cuando parece que todo empieza a mejorar, recibe la noticia de que Adrian ha sido encontrado muerto en su casa. Todo indica que ha sido un suicidio pero Cecilia está segura de que todo es un plan maquiavélico de su ex pareja para seguir haciéndole la vida imposible.
Una protagonista inolvidable
En el elenco protagonista podemos ver a Elisabeth Moss y Oliver Jackson-Cohen. Podemos decir que Elisabeth ya es una actriz con una carrera más consolidada y se trata de un rostro más que conocido en el cine y la televisión. Salvo por su actuación en 'Nosotros' en pocas ocasiones la hemos podido ver en cintas de suspense y, esta vez, podemos ver que la actriz sigue superándose. Recordemos que el principal villano de la historia es algo invisible, no puede ser visto ni tocado, algo que suma una gran dificultad a la actuación de la protagonista pero Moss sabe suplirlo con creces y ser lo mejor de la película. Todo esto sumado a un gran desarrollo del personaje siendo una mujer de armas tomar que nos dejará con la boca abierta en más de una ocasión y que cuenta con una gran evolución a lo largo de la película. El resto del reparto lo completan Storm Reid, Harriet Dyer y Aldis Hodge pese a no estar a la altura de Moss hacen muy buen trabajo en sus respectivos papeles. Quizás destacaríamos el trabajo de Storm Reid como secundaria que, aunque no cuente con muchos minutos en pantalla, hace que nos preocupemos por ella y por lo que está pasando.
Cae en algunos jumpscares
El cine de terror, al cabo de los años, se ha convertido en un festival de jumpscares que más que asustarnos lo que consiguen es enfadarnos. La cinta de Whannell no deja de caer en este cliché pero es algo que le perdonamos gracias a la gran ambientación que ha sabido crear. La tensión comenzará desde el primer minuto de la cinta y no decaerá hasta el tramo final, uno de lo más satisfactorio. Entre medias de la cinta podremos ver un punto de giro espectacular, una escena que se nos quedará grabada en la mente durante mucho tiempo y que marcará un antes y un después en el desarrollo de la protagonista. Quien haya visto la cinta, sabrá de qué escena estamos hablando. La ambientación es un punto clave en el cine de terror. En esta ocasión será algo muy bien conseguido. Salvo por la primera parte de la película, el resto tendrá lugar en localizaciones que cualquiera puede haber visitado (una casa, un hospital, un restaurante...) por lo que consigue que nuestro miedo se incremente al sentir que son sitios en los que el espectador puede visitar sin problema. No es una mansión encantada o un cementerio inhóspito estamos hablando de lugares del día a día, lo que nos hace que empaticemos más con la historia y nos sintamos mucho más indefensos.
Aspecto técnico muy correcto
En cuanto al aspecto técnico podemos decir que cumple con creces. Nos toparemos con planos casi imposibles y giros de cámara muy bien conseguidos. Esto último parece ser una tendencia entre los directores más jóvenes algo que agradecemos ya que consigue dejarnos con la boca abierta por la complicidad de la escena. El sonido es una parte fundamental de la historia. Recordemos que no podemos ver al enemigo, por lo que habrá más de una ocasión donde el sonido ambiente sea el claro protagonista. Merece la pena disfrutarla en pantalla grande y dejarnos llevar por el gran sonido que sólo un gran cine puede ofrecernos.
Una cinta muy disfrutable
En general, 'El hombre invisible' es una cinta de lo más disfrutable. Debemos decir que cuenta una historia que hemos visto miles de veces pero consigue darle una vuelta de tuerca y ser contada de una manera muy original pero, sobre todo, muy actual. El guión conseguirá crearnos interés desde la primera escena y no dejar de aburrirnos hasta el final de la misma. Todo esto sumado a una gran protagonista con un desarrollo increíble y con un final aún más satisfactorio. Quizás la motivación del villano es algo escueta pero gracias a la actuación de Moss esto queda totalmente eclipsado. Técnicamente es una delicia y estamos seguros de que este director va a dar mucho de qué hablar a lo largo de su carrera, ¡ya estamos esperando con ganas su próximo filme! Y a Universal, decirle que esta cinta sería una buena candidata para iniciar el Dark Universe.