El 30 de Noviembre 2016 | 21:31
La animación moderna goza de una salud de hierro. Títulos como 'Rick y Morty' ofrecen un humor absurdo entrelazado con críticas sociales también presentes en series míticas como 'South Park', que se niega a envejecer ofreciendo cada vez episodios de mayor calidad. Otras como 'Bojack Horseman' tratan temas tan peliagudos como la depresión o la falta de realización profesional y sentimental. Incluso las licencias de la popular cadena de animación Cartoon Network tienen mucho que ofrecer a un público muyo más amplio que el de los niños.
Licencias corruptas
Una de mis series de animación favoritas de todos los tiempos es 'Steven Universe', una serie que ha llegado a ser censurada en países como Reino Unido por supuesto contenido lésbico, demostrando así que sus mensajes subversivos a favor de la igualdad de género y las preferencias sexuales han tocado algunas fibras sensibles. La propia 'Hora de Aventuras' consigue tratar un tema tan tabú como es el de las enfermedades mentales con un personaje como el Rey Hielo y su representación del alzheimer. En la muy absurda 'El asombroso mundo de Gumball' se abordan todo tipo de temas sociales y políticos maquillados con un aspecto de humor estúpido para niños que a menudo no es tal.
Cuando se hizo oficial el anuncio de un nuevo videojuego basado en las licencias de Cartoon Network que mezclaba los mundos de las series anteriormente citadas con otras como Tito Yayo, Clarence o la majestuosa Historias Corrientes, éste lanzamiento se colocó en lo más alto de mi lista de la compra. Cuando se desveló el primer vídeo y se dejó ver que estábamos ante un yo contra el barrio al más puro estilo 'Castle Crashers' la impaciencia era ya incontrolable.
Ahora ya he podido dedicarle las horas pertinentes a este 'Cartoon Network: Battle Crashers' y el resultado me ha parecido poco menos que un insulto a los aficionados de estas series y a los creadores de las mismas.
Sí, estamos ante un juego de acción en dos dimensiones que combina a los personajes de estas licencias con los entornos en los que se desarrollan sus historias. Una mezcolanza de universos que podría haber resultado en uno de los mejores juegos del año de haber tenido detrás al estudio correcto. No ha sido el caso.
Magic Pockets ha sido el estudio encargado de llevar a cabo este proyecto y suyos son más de 30 juegos para Nintendo 3DS, muchos pertenecientes a licencias como Imagina Ser o Petz y otros adaptaciones de todo tipo que van desde un Baldur's Gate para GBA hasta juegos de F1 o un Top Spin.
Como nunca he jugado a ninguno de sus trabajos anteriores no puedo poner en duda el saber hacer de este estudio francés, pero desde luego si tenemos que usar 'Cartoon Network: Battle Crashers' como carta de presentación las primeras impresiones no podrían ser peores.
La introducción de este juego es tan atropellada como simple, algo toquetea la furgoneta de Tito Yayo haciendo que las dimensiones paralelas en las que conviven todos estos personajes animados se colapsen y fusionen. Así se nos suelta en un mapa dividido en los mundos de cada uno de sus protagonistas y se nos lanza a la batalla.
Los primeros cinco minutos de partida confirman el horror que está por llegar, evidenciando la terrible simpleza con la que se ha enfocado la parte mecánica. Al principio contaremos con un único ataque principal cuya animación no cambiará en las horas consecutivas de juego, con el paso de los niveles desbloquearemos otras dos habilidades que en ningún momento darán lugares a combos o cualquier otra cosa que recuerde a un beat 'm up medianamente digno.
Las batallas se presentan todas iguales y aunque el juego intente maquillar su monotonía co la presencia de algunos obstáculos como nubes malolientes, fuego o barreras mágicas que solo pueden ser eliminadas con cierto tipo de personaje, nada consigue hacer que nos divirtamos ni un solo segundo.
De la personalidad de los personajes que aparecen en esta aventura tan solo queda su aspecto físico, quedan reducidos a meros sprites que en ningún momento hablan o interactúan con el entorno o la historia.
La forma de avanzar y la estructura de los niveles no es menos vergonzosa. Todo se basa en ir de izquierda a derecha combatiendo con enemigos salidos de las series en cuestión y cuyos movimientos están recreados con la misma pereza con la que se ha hecho el resto del título. Más sangrante es la situación que se da a menudo cuando al completar un nivel un personaje secundario te dice que no se puede pasar, que para ello necesitas un objeto que se encuentra en uno de los niveles que has completado de forma previa, obligándote así a volver a jugar un nivel que no cambia prácticamente nada y alargando la tortura artificialmente sin ningún descaro. Esto pasa muy a menudo a lo largo de todo el juego, siendo cada vez más sangrante.
'Cartoon Network: Battle Crashers' despoja de toda su personalidad y su atractivo a los personajes que utiliza para su macabro juego de marketing. No sería un mal juego para la plataforma de juegos de navegador de Cartoon Network, donde se publican pequeños juegos flash destinados a entretener a los más pequeños haciendo que sus dibujos animados favoritos bailen a su son en juegos de fútbol y derivados. Pero estamos hablando de un juego para 3DS, PS4 y Xbox One que se vende por la nada desdeñable cifra de 29,99 €. No podría ser yo más contrario a valorar un juego por su precio, pero en este caso estamos ante una tomadura de pelo de proporciones bíblicas.
Puede que encuentres en este lanzamiento un atractivo mínimo, uno que te haga comprarlo para los niños que tengas en casa y que así puedan dedicar algunos minutos a controlar a esos muñequitos adorables que ven todas las tardes en televisión. Pero sinceramente, si eso es lo que buscas, antes deberías echar un ojo a 'Hora de Aventuras: ¡El secreto del Reino Sin Nombre!', 'Hora de Aventuras: Explora La Mazmorra Porque Paso' para 3DS y 'Hora de aventuras: Finn y Jake, investigadores' en 3DS y PS4 e incluso 'Regular Show: Mordecai and Rigby In 8-Bit Land'.
Resulta profundamente decepcionante que un videojuego pueda tratar tan mal a series de televisión que tratan a los videojuegos tan bien. Es habitual ver en estas series de animación homenajes al mundo del videojuego e incluso imaginar los suyos propios. Magic Pockets podría haber trabajado en adaptar Guardians of Sunshine de Hora de Aventuras como un nivel entero, se podrían haber creado metabromas entre personajes de series distintas, usado objetos, armas y combos de todo tipo con referencias constantes a un mundo que es tan rico como inabarcable.
Pero valorar un videojuego por lo que podría haber sido no es nunca lo correcto. Por desgracia para 'Cartoon Network: Battle Crashers' lo que sí ha sido es un montón de ideas vagas que de no contar con los grandes nombres de Cartoon Network no habría pasado de juego mediocre publicado de forma anónima en Kongregate o cualquier portal de juegos flash para navegador.
Seguimos a la espera de un estudio con dedicación y pasión que decida adaptar estas queridas licencias al mundo del videojuego con un mínimo de respeto.
Lo mejor:
- Puede resultar atractivo jugar con los personajes de estas licencias si eres aficionado...
Lo peor:
- ...hasta que te das cuenta de que sus representaciones son nefastas.
- Pobre apartado técnico.
- Mecánicas jugables repetitivas hasta el hastio.
- Estructura de niveles artificial y pensada para aumentar la duración.
- El peor uso posible para licencias tan potentes.