Puede que la segunda época dorada de lo que conocemos en España como pressing catch haya pasado hace ya algún tiempo, pero no son pocos los fieles que disfrutan año tras año del videojuego a cargo de Yuke's. Tras la bancarrota de THQ, la franquicia pasó a manos de 2K, quien siguió confiando en esta desarrolladora para continuar su trabajo al frente, esta vez, de 'WWE 2K15', con apoyo de Visual Concepts.
El estreno de 2K con la WWE fue realmente bueno, presentando en 'WWE 2K14' el excelente modo 30 Years of Wrestlemania, un recorrido histórico a los 30 años de este legendario evento en el que recrear los combates más emblemáticos con luchadores del prestigio de Hulk Hogan, Andre The Giant, Randy Savage, etc... Evidentemente, la sombra de este modo de juego es alargada, mucho, y lamentablemente, no se ha sabido superar el listón.
2K lleva bien lo de no tener competencia. Lo está demostrando con la franquicia 'NBA 2K', en la que año tras año consigue superarse a sí misma para ofrecer el que en cada temporada, es el mejor simulador posible de baloncesto. Sin embargo, esto no ocurre con el wrestling. Después de la primera toma de contacto del año pasado, se esperaba que el estreno en las nuevas consolas fuera todo un golpe sobre la mesa, pero da la sensación de que se han limitado a ofrecer un producto que sin ser malo, no supone un paso adelante, apenas gráficamente.
Esto se hace evidente, para empezar, en el plantel de luchadores. Cuando juntas a estrellas actuales como John Cena, Kane, CM Punk, etc... con algunos clásicos como Ultimate Warrior o Shawn Michaels para un total de más de 60 luchadores, puede dar lugar a pensar que la plantilla es amplia. Y lo es, pero si la comparamos con la de la anterior entrega, cuando a estos se les sumaban muchos más históricos (Eddie Guerrero, Edge, Ted Dibiase...), se queda un poco corto. Parece que la WWE pasa por una pequeña crisis de carisma, pero a la hora de desarrollar un videojuego no está mal tirar de nostalgia para rellenar ese hueco. Eso no se ha hecho y se nota.
Un punto importante debería ser la recreación de estos tipos (y tipas) y aquí tenemos una de cal y otra de arena. Por una parte, los modelados del cuerpo están a buen nivel en casi todos ellos, salvo quizá, en el caso de las divas, que además lucen unas animaciones un poco más robóticas. La definición de los músculos, la proporción en cuanto a altura y peso de cada uno de ellos cuando se enfrentan, y las diferencias en estas características físicas se notan en combate. Sin embargo, las caras no están todo lo bien definidas que se podría esperar, habiendo casos como los de Triple H o Shawn Michaels donde cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.
En general, gráficamente 'WWE 2K15' es correcto, sin más. Las escenas de entrada, el público menos acartonado, las escenas de corte en golpes especiales... La mejoría está ahí, claro, pero aún hay mucho margen de mejora y es de esperar que Yuke's le vaya cogiendo el pulso a esta nueva generación en este sentido.
Muchas horas y contenido, pero...
Podría haber más. Al igual que el año pasado, contamos con el modo Universo WWE, en el que recorreremos el calendario de la WWE, sus eventos Raw y Smackdown más los Pay per View, viviendo las rivalidades más importantes o, esto es lo mejor, creándolas nosotros mismos a través de un editor de eventos que nos permiten personalizarlo hasta el extremo. Este modo tienen un montón de contenido desbloqueable, que en los tiempos que corren es de agradecer, pero pierde la chicha que sí tenía el modo Mánager de la franquicia cuando esta se llamaba 'Smackdown vs Raw', donde además de combatir y organizar los eventos teníamos que hacerlo pensando en ganar fans para nuestra causa.
Por su parte, el modo WWE Showcase nos presenta dos rivalidades históricas. Por un lado la más reciente, la protagonizada por CM Punk y John Cena, y por el otro, Triple H frente a Shawn Michaels, tras disolverse D-Generation X. Un buen puñado de vídeos de imagen real, combates variados y llenos de luchadores carismáticos, imágenes desbloqueables, momentazos épicos... Mucho fanservice en cuanto a calidad, pero parco en cuanto a cantidad. Alguna rivalidad más no habría sobrado precísamente. Al menos de serie, ya que llegarán otras tres a través del Season Pass. ¡Mal hecho!
Hasta aquí, todo más o menos bien. O casi todo. Queriendo basarse en el modo Mi Carrera de 'NBA 2K', 'WWE 2K15' ha querido incluir el suyo propio, lo que es una idea realmente buena si se implementa bien... que no es el caso. Hay una parte positiva, como es la personalización del personaje. Desde su editor hasta la posibilidad de mejorar atributos y comprar movimientos para customizarlo a tope, todo lo relacionado con crear nuestro luchador ideal está a buen nivel. Sin embargo, es a la hora de lograr sumergirnos en una historia medianamente interesante donde falla este modo, con cinemáticas repetitivas o con poco interés. En conclusión, la idea es buena; el desarrollo, no tanto.
Lucha accesible para todo el mundo
Seguramente sea por la gran cantidad de público infantil que puede llegar a interesarse por este título, pero la realidad es que el sistema de combate de "WWE 2K15' es el más accesible de los últimos años, para bien y para mal. Ello depende de quien se ponga al mando: por un lado, si se empieza con este título, resulta ideal para ello. Pero por el contrario, si se es un veterano de la franquicia, se encontrará incluso casualizado. Los botones principales apenas han cambiado, teniendo un botón para dar puñetazos, otro para el pinfall (la cuenta de tres) y otro para los agarres, que combinándolo con una dirección en el stick izquierdo dará lugar a un movimiento u otro. El cuarto botón está asignado para el movimiento especial, y aquí tenemos una de las principales pegas: hacer un finisher resulta extremadamente sencillo. Es cierto que es complicado implementar un sistema por el cual, para hacer esas populares y letales llaves, sea necesaria una combinación de botones, pero el que sea posible hacerlos con simplemente pulsar un botón es demasiado gratuito.
La principal novedad la veremos prácticamente al comienzo de cada combate, donde si efectuamos un agarre, se pondrá en marcha un minijuego al estilo piedra, papel y tijera, que nos servirá para ganar la primera ventaja. Esto es un poco injusto, ya que no deja de ser una especie de quick time event, y para colmo, con cierto componente aleatorio.
Pero hay que romper una lanza a favor de Yuke's, y es que si alguien a lo largo de su vida se ha sentido mínimamente interesado por este espectáculo, será consciente de la enorme variedad de combates que se suceden: Triple Threat, Fatal for Way (ahora llamado simplemente 4 Man), Last Man Standing, Extreme Rules, Hell in a Cell, Steel Cage... Evidentemente, no es fácil plasmar una jugabilidad que se adapte perfecta e intuitivamente a todos ellos, y este equipo prácticamente lo ha conseguido. Cualquier interactuación con el entorno es extremadamente sencilla, ya sea arrojar a nuestro rival contra las escaleras del ring, coger una silla para golpearlo en la cabeza, colocar estratégicamente una mesa para hacer una llave sobre ella... La verdad es que hay momentos en los que el único límite para repartir cera es nuestra imaginación.
Sirve como primera toma de contacto
'WWE 2K15' es un juego que satisfacerá a los fans, con mucho contenido por desbloquear y reminiscencias históricas, aunque no tantas como en pasadas entregas. Sin embargo, tras el mejor 'WWE 2K14', sobre todo en cuanto a modos de juego, esta temporada se nos ha quedado un poco corto. Aún llevamos un año de generación y conociendo el trabajo y el mimo que pone 2K en sus franquicias deportivas, lo lógico sería ver una mejora palpable en los próximos años. Si es así, algún día veremos un juego disfrutable por absolutamente todo el mundo, incluidos los paladares más exigentes del wrestling. Pero hoy no es ese día, y 'WWE 2K15' aún no es ese juego.