El género musou siempre ha contado con cierta controversia a su alrededor. Es un género muy particular, con un público muy específico y unas costumbres demasiado extendidas como para atreverse a renovarlas con nuevas entregas. Así, es común que los lanzamientos dentro de su plantel siempre se muevan sobre las mismas líneas. Algo que los limita dentro de sus propias características.
La gente de Omega Force son especialistas en esto y se les reconoce a lo largo y ancho del medio como los líderes indiscutibles del género. No son pocas las entregas con las que cuentan ya bajo el brazo e incluso se han atrevido con algunas licencias como 'The Legend of Zelda', 'Fire Emblem' o 'Dragon Quest'. Intentos de renovar el género que han servido como base para esta evolución a paso lento. Una que nos lleva, inevitablemente, a 'Warriors Orochi 4'.
Regresando al musou bajo la mirada de los dioses
Porque los expertos de Omega Force y Koei Tecmo vuelven a ofrecernos una de sus obras más características para fusionar los universos de dos de sus clásicos. 'Samurai Warriors' y 'Dinasty Warriors' se dan la mano para sumar una nueva experiencia bajo el sello de 'Warriors Orochi 4'. Un resultado que lleva dando guerra desde PlayStation 2 y que llega con la idea de demostrarnos todo su potencial. Porque ha tenido tiempo de madurar en esta década de batallas incesantes.
Algo, sin embargo, que no sigo los pasos del polémico 'Dinasty Warriors 9'. Un título que apostaba, precisamente, por cambiar estos compases establecidos dentro del musou pero que no consiguió conquistar al público con su mundo abierto y sus nuevas mecánicas, cayendo estas en saco roto.
Precisamente por este motivo, 'Warriors Orochi 4' regresa a los inicios. A la fórmula clásica. Hay cambios, añadidos y mejoras, por supuesto, pero lo importante para sus desarrolladores parece ser precisamente esta forma de mantener las líneas que hicieron grande a la saga y que siguen demostrando funcionar sin problemas. Tanto es así que el juego continúa su historia en el punto donde lo dejó su anterior entrega, 'Warriors Orochi 3 Ultimate'.
Algo que no debe preocupar a quienes se inicien en esta nueva aventura, ya que todos los personajes que forman su plantel pierden la memoria al llegar al nuevo mundo que se plantea, por lo que su argumento se plantea como algo completamente nuevo donde el haber pasado por sus predecesoras ayuda al entendimiento general de la situación pero nunca se convierte en un requisito indispensable para disfrutarla.
Una historia que evoluciona para llevarnos a combatir contra deidades. Y es que volveremos, por supuesto, a encontrarnos con los míticos personajes extraídos de la época feudal nipona y china, pero también se unirán otros nuevos con una vuelta de tuerca original. Porque nuestro querido Nobunaga será uno de los principales enemigos a batir, de nuevo, pero el mismísimo Zeus llegará a la saga en forma de enemigo, junto a su panteón de divinidades griegas para ponernos las cosas difíciles en un enfoque argumental que resulta, cuanto menos, original.
Más grande que nunca
Así 'Warriors Orochi 4' se plantea a si mismo como el título definitivo de la franquicia. De nuevo, no solo recoge sus mecánicas más funcionales, sino que añade todo un seguido de novedades que hacen de la experiencia algo mucho más extenso; obviando también esa sensación de repetición que puede acechar a quienes hayan pasado ya por otras entregas.
Precisamente es en su extensión en lo que brilla mayormente el juego. Y es que hablamos de una entrega, como poco, ambiciosa. No solo cuenta con un largo listado de misiones que deberemos completar para vivir su historia, sino que añade todo tipo de misiones alternativas con las que podremos acercarnos más a sus personajes.
Algo completamente necesario, ya que sus desarrolladores han apostado por montar la fiesta más grande posible y han invitado a nada más ni menos que 170 personajes al juego —batiendo incluso su particular récord Guiness. Un plantel difícil de imaginar y que supera con creces cualquier expectación y donde, por supuesto, veremos prácticamente a todas las caras que hayan pasado tanto por la franquicia como por las dos sagas que aúna el crossover — obviando únicamente la aparición de algunos personajes invitados, como podría ser Ryu Hayabusha de 'Ninja Gaiden'.
Con todo, esta baza que intentan abanderar como uno de los principales atractivos del juego no siempre juega en su favor. Y es que son tantos los personajes existentes en el mismo que de la impresión de estar nadando en un mar enorme sin saber a donde acogerse. Para paliar con esto contamos con una división en tres tipos diferentes de personaje. Power, capaces de destrozar al enemigo sin ser bloqueados, Technique, especializados en el combate aéreo y Speed —a falta de Wonder, que desaparece en esta entrega— que se centra en la velocidad y la ejecución de combos.
Las misiones se realizan en grupos de tres luchadores, más cuatro que aguardan en recámara y sirven de apoyo, por lo que resulta esencial asegurarse de escoger de forma correcta las cientos de combinaciones posibles para resultar lo más letales posibles frente al ejército enemigo. Un factor que introduce ese punto estratégico que tanto bien le hace a la franquicia y que se ve totalmente expandido ahora, con este enorme plantel.
Innovando a base de magia
Otra de las grandes novedades que llegan a 'Warriors Orochi 4' es la versatilidad con la que cuentan sus nuevas mecánicas. Unas que llegan, quizás no para revolucionar el sistema, pero si para convertirlo en algo más fluido y original. Y es que cada personaje contará ahora —recalcando además la idea de contar con tal cantidad de combatientes— con una reliquia sagrada que podrá utilizar para desatar ataques mágicos.
Al margen de lo que representa este revuelto de ideas (guerreros orientales históricos, dioses griegos y uso de la magia), lo cierto es que la implementación le sienta francamente bien al juego, haciendo de cada combate algo más intenso. No solo contamos con diferentes tipos de ataque por cada personaje —con un estilo y animación propios y diferenciados, además— sino que incluso se ha añadido una suerte de "ataque final" en el que nuestros siete personajes aúnan fuerzas para lanzar un hechizo absurdamente poderoso que dice mucho de donde deja el listón esta nueva entrega.
No son los únicos, por supuesto, que se ven afectados por estos cambios. Y es que entre los enemigos también encontraremos a soldados con la capacidad de aplicar ataques mágicos. Unos que nosotros mismos podremos repeler para no resultar dañados. Y es que incluso el nivel normal supone un desafío —aunque ligero, por supuesto— frente a las habilidades de la IA, por lo que es importante aprender a defenderse de ellos. Hay más sorpresas, como un nuevo tipo de enemigo inmune a los ataques físicos y alguna que otra que no queremos destripar porque se encuentra directamente relacionada con la historia del juego, pero os adelantamos que hace mucho por sus mecánicas.
Definiendo el género
Por otro lado, y aunque lo cierto es que no consigue igualar el nivel de 'Dinasty Warriors 9', 'Warriors Orochi 4' cuenta con un despliegue interesante. Entre otras, parece que el número de enemigos en pantalla ha vuelto a crecer, pero no nos encontramos con las molestas ralentizaciones que se daban en el mencionado título por lo que no todo es algo negativo. Su banda sonora también consigue mantener el tipo, mezclando algunos temas ambientales con las clásicas pistas frenéticas que tan bien se mimetizan con la acción en medio de la batalla.
Otro espacio por donde el juego suma puntos es a través de su modo multijugador, que cuenta con un abanico de posibilidades simple pero notable. No solo contaremos con la posibilidad de disfrutar de todas las misiones a través de sus funcionalidades online, sino que volveremos a poder hacerlo a través de la clásica pantalla partida en modo local. Para rematar la jugada, el título añade un sistema bautizado como Battle Arena, donde podremos enfrentarnos en un modo tres contra tres con la misión de hacernos con más territorios que el equipo rival.
Una combinación de elementos que nos lleva a pensar en 'Warriors Orochi 4' como una de las entregas más pulidas que nos haya traído su equipo hasta el momento. Es notable la evolución de sus mecánicas con el paso de los años y cuenta con puntos tan refrescantes como el de la inclusión de la magia. Unos que chocan con otros que se llevan arrastrando mucho tiempo, como la forma tan plana de contar su historia, en un formato de novela visual, pero que consiguen destacar y hacer de la obra todo un exponente para la franquicia. De nuevo, quizás no se convierta en una revolución —y seguramente no tenga la fuerza para convertir a los detractores del género o la franquicia— pero es toda una delicia para quienes disfruten de ella.