'Sword Art Online' vuelve a la primera línea de lanzamientos, ahora con una nueva aventura que llega de manera simultánea a PS Vita y PS4 llamada 'Sword Art Online: Hollow Realization'. La nueva entrega creada por Aquria, desarrolladores también de Hollow Fragment e Infinity Moments, y publicada por Bandai Namco, se define como el acercamiento más ambicioso de la saga hasta el momento, y probablemente lo sea, acumulando unas 40 horas sólo de trama principal, que crecen exponencialmente hasta el punto en el que tú quieras invertir en él. Para mí, analizar 'Sword Art Online: Hollow Realization' ha sido una buena excusa para adentrarme en el mundo del 'Sword Art Online', algo que llevaba teniendo pendiente desde hace más tiempo del recomendable. El anime que adapta la obra de Reki Kawahara es una de las series de moda, disponible en buena parte en España a través de Netflix, y que logra encajar en nuestro tiempo por proponer un 'Black Mirror' a la japonesa. Probablemente todos conozcáis el punto de partida de esta historia, pero un par de líneas para que nos situemos. En un futuro cercano, en Japón, un MMORPG en VR llamado 'Sword Art Online' se convierte en el juego de moda. Miles de jugadores se agrupan en sus servidores sin saber que se están jugando su vida. Si mueren en el juego, el casco VR da una descarga que también les mata en el mundo real. Esta situación abre un cisma en la sociedad japonesa, que se replantea el uso de tecnología inmersiva, y a partir de este hilo es donde comenzamos a tirar en 'Sword Art Online: Hollow Realization'. Nuestro grupo de aventureros pasó por la pesadilla del 'Sword Art Original' y ahora, con mucho recelo, comienzan a jugar a 'Sword Art: Origin', un nuevo juego que nos lleva al contexto donde se desarrolló el criminal juego original, pero ahora se supone que simplemente se trata de una experiencia lúdica.
Esta historia, que pese a lo colorido tiene un poso macabro extenuante, cuenta con el guión del propio creador del manga, Reki Kawahara, lo que aporta un manejo muy preciso en el curso de la historia, familiar en el tono para el habitual de la saga. El desarrollo de la trama de 'Sword Art Online' tiene un ritmo lento, el ritmo japonés al que ya estamos acostumbrados, sin embargo, rápidamente sabe contextualizarse para comprender la situación que están viviendo los personajes. Se crea desde los primeros momentos de la aventura un clima de tensión disfrazada entre chascarrillos que esconde un halo de misterio. Los jugadores vuelven, pero vuelven, como decía, envueltos en recelo; que impulsan al que está a los mandos a entrar en un círculo de paranoia y sospecha. El personaje sobre el que gira la historia es Premiere, también muy misterioso, un PNJ que se comunica prácticamente a base de monosílabos; una chica sin futuro, pasado, ni presente, de la que el grupo principal se siente responsable. En las primeras horas se abren preguntas, y más preguntas, mientras me daba cuenta de que las agujas del reloj corrían sin descanso pegado a este 'Sword Art Online'. Como un conejo tras una zanahoria, la intriga que despierta me arrastró, casi sin quererlo, en una carrera sin descanso para tratar de ir dando respuesta a las preguntas clave del juego. Llegar a una respuesta normalmente es también el primer paso para una pregunta y, de esa manera, envuelto entre cientos de líneas de diálogo en castellano, que habitualmente no llevan a nada, a base de momentos cruciales desarrolla una historia de forma íntimamente japonesa, pero indiscutiblemente absorbente.
MMORPG + Visual Novel
Continuista en su estructura, 'Sword Art Online: Hollow Realization' combina el rasgo inconfundible de la visual novel japonesa, con un estilo de juego que trata de emular el MMORPG sin estar jugando en línea. El grueso de la historia se desarrolla a través de diálogos de personajes estáticos, diálogos muy densos, por eso más cercanos a la novela visual que al JRPG convencional, pero perfectamente localizados a nuestro idioma. Seguramente arrastra lo bueno y lo malo de las novelas visuales tradicionales, ya que expone un hilo descriptivo de personajes y situaciones demasiado preciso, dejando muy poco trabajo de elaboración al jugador. Por otra parte, esa densidad en el texto también invita a que rápidamente se comprenda y conecte con los personajes.
Sin embargo, lo curioso es el plano jugable y esa intención de emular el MMORPG sin realmente serlo. Encontramos una propuesta de rol acción en grupo, ahora con un equipo de hasta cuatro personajes, en la que nosotros manejamos a Kirito como cabeza de grupo que guía las acciones de sus acompañantes. De esta forma, cuando te zambulles en las llanuras y mazmorras estás saliendo de raid offline: te cruzarás con otros grupos de personajes que están realizando sus misiones, habrá eventos multitudinarios en medio de los escenarios, y tiene ese envoltorio de MMO en el que en realidad nadie está presente. Es un rasgo identitario que convive con la saga, que sobre todas las cosas es fanservice para el aficionado, pero al ser un juego single-player se permite ir más centrado por la historia de lo que suelen los MMO. Funciona, pero también arrastra lo bueno y lo malo del género, ya que, si bien por un lado tenemos libertad total de movimiento en las instancias que recorremos, también aceptamos muchos de esos encargos de recadero que dan en conclusión una lista de misiones muy larga pero poco interesante. Por otra parte, este es un juego de grindeo muy evidente, un "comehoras" de los que hacen época... perdí demasiadas horas de mi vida jugando a Diablo 2 como para ser tan hipócrita de ver esto como un problema, pero deberías tenerlo en cuenta.
Recuerda en esta estructura de falso MMO a 'Xenoblade Chronicles', organizado bajo unas reglas similares; tampoco puedo evitar pensar en uno de mis juegos favoritos, 'Phantasy Star Online'. 'Sword Art Online: Hollow Realization' es claramente fruto de esa herencia, pero diría que se acerca más a 'Xenoblade' en tanto en cuanto el hilo narrativo va tirando constantemente del desarrollo del juego.
El sistema de combate
Si pensamos en herencias y tradiciones, hay una muy clásica, pero también muy vigente, que dice que un juego de rol es tan bueno como lo es su sistema de combate, y aquí 'Sword Art Online: Hollow Realization' tiene algo que decir. En el sistema de combate se combina la pura acción con un árbol de habilidades de desarrollo clásico, pero lo interesante es el sistema de órdenes que nos permite interactuar con nuestro grupo. Así, tenemos un panel de indicaciones bastante completo en el que podemos pedir a nuestros compañeros que nos curen, que llamen la atención de los oponentes, que actúen a la defensiva... órdenes que se combinan con la posibilidad de hacer cadenas de golpes entre todos, lo que multiplica los combos y nos permite llegar al éxito de manera conjunta. Es un sistema de combate bastante intuitivo, pero también interesante para llegar a dominar al completo sus posibilidades. El otro término estratégico del sistema de combate es la preparación previa, ya que debemos conformar un equipo de cuatro de entre una buena lista de potenciales acompañantes, para lo que contamos con un sistema de afinidad y carácter, que nos permite hacernos una idea de la disposición y aptitudes de los personajes que se sumen a la aventura.
Conclusión
'Sword Art Online' es un juego muy profundo, que en lo visual no destaca en absoluto. Presenta un acabado muy similar al de entregas previas, mezclando la textura tridimensional con personajes en dibujo, y generando así un efecto muy curioso, que queda lastrado en lo técnico por la versión portátil. Sin embargo, más allá del acabado visual del juego en PS4, que no sorprende, tenemos un JRPG muy original, cargado de fan service para el seguidor del anime. Diría que para el que sigue la historia este juego es imprescindible, pero también que propone, como juego de rol japonés, una propuesta muy reconocible dentro de la tradición del JRPG, pero a la vez uno de los ejemplos más innovadores que hoy día tiene el género. El que no conozca nada de la historia de 'Sword Art Online' puede comenzar por aquí, se perderá guiños y la dosis correspondiente de fan service, pero el juego se molesta en ponernos en antecedentes para comprender esta historia como elemento aislado. Por último, como acercamiento a la ciencia ficción permite la reflexión sobre la inmersividad de la experiencia en 3D, un debate que abrió de manera muy profunda 'Matrix' hace ya años, pero que con los cascos VR de plena actualidad, la dualidad entre la realidad física y digital es un tema angular en el discurso de la distopía reciente.
Versión analizada PS4.