El pasado 19 de noviembre llegaba a las tiendas PlayStation 5, la consola de nueva generación de Sony, que se estrenaba en el mercado con una serie de lanzamientos exclusivos de gran relumbrón, como 'Demon's Souls' y 'Marvel's Spider-Man: Miles Morales'. Entre estos títulos, quizás con un foco un tanto menor, también se encontraba el regreso de Sackboy, el adorable protagonista de 'Little Big Planet' que emprende una nueva aventura de la mano de Sumo Digital en 'Sackboy: Una gran aventura'. En esta ocasión, acompañaremos a nuestro amigo en una odisea que difiere un tanto de los que estamos acostumbrados a ver en los juegos de Media Molecule, pero se trata de un spin-off totalmente respetuoso con la propuesta original.
Ahora que estamos en plena campaña navideña, 'Sackboy: Una gran aventura' se convierte en una alternativa más que interesante para todos aquellos que estrenan PS5 y buscan un videojuego con el que disfrutar en compañía, ya que estamos ante un juego de plataformas que hará disfrutar a niños y adultos por igual. Si estáis pensando en disfrazaros y dar el salto junto a Sackboy, os invito a que nos acompañéis a lo largo de este texto, donde trataremos de despejar todas las posibles dudas que tengáis al respecto.
Mucho más que dar saltos
'Sackboy: Una gran aventura' nos presentará una historia simple que sirve como pretexto para que nuestro pequeño amigo se convierta en el héroe de sus homónimos, que han caído bajo las garras del malvado Vex, el malo malísimo que ha secuestrado a todos los demás sackboys para ayudarlo en su objetivo de que reine el odio y el caos. Sólo nosotros podemos pararle los pies.
Entrando en barrena, nos encontraremos con un recorrido que transcurre a través de cinco mundos diferentes, cada uno con una temática y un diseño de niveles particular, que harán que esta aventura sea mucho más que dar cuatro saltos. Por ejemplo, hay uno con temática espacial que es mi favorito. Dentro de cada nivel, nos encontraremos con situaciones de lo más variadas, desde puzles, hasta combates en zonas cerradas o incluso frenéticas escapadas cuando parece que van a acabar con nosotros. En todo este recorrido también haremos nuevos amigos, y tendremos la posibilidad de encontrar unas llamativas esferas azules y otros secretos (principalmente elementos cosméticos). Entre esos secretos, destacan unas habitaciones ocultas donde al superar un objetivo concreto (por ejemplo, eliminar determinados enemigos en un breve periodo de tiempo).
La manera de progresar pasa por ir superando niveles a medida que conseguimos esas esferas, que finalmente nos permiten desbloquear el enfrentamiento con el jefe de cada mundo (en función de la pantalla puede haber 3 o 5 de estas esferas). Cuando acabamos con él, esto nos permite progresar al siguiente territorio para ayudar a nuestros amigos esclavizados. A poco que explores y recojas lo que te encuentras por cada una de las fases, no encontrarás ningún problema para progresar en la historia, aunque si queréis completarlo todo al 100% sí que tendréis que volver a superar alguna que otra pantalla.
En términos de gameplay, estamos ante una propuesta sencilla. Al desplazarnos por el mapeado, deberemos agarrarnos o tirar de objetos, deberemos saltar para superar peligros o matar enemigos, cosas simples. Después, aparecen toda una serie de mecánicas que nos aportan un toque de variedad a los niveles. Por ejemplo, encontraremos una especie de propulsor que nos permitirá aguantar y desplazarnos por el aire un tiempo limitado; tendremos un arma que nos permitirá disparar bolas de energía o podremos pringarnos los pies con una especie de néctar que nos habilita a caminar por paredes en vertical. Este tipo de mecánicas adicionales, suelen estar directamente ligadas al mundo y los escenarios en los que nos encontramos.
Más allá de los mundos y niveles que podríamos etiquetar como tradicionales, también tenemos una serie de pantallas que ponen a prueba las habilidades del jugador a los mandos: las contrarrelojes. Se trata de una lucha contra el cronómetro, donde tenemos tres tiempos objetivos a superar y una recompensa en respuesta a nuestro resultado. Lo divertido de estos niveles es que aprovechan temáticas similares al mundo en el que nos encontramos, y las trampas y/o enemigos suelen ser de las últimas que hemos conocido. Estamos ante niveles que no son especialmente largos, y pueden superarse fácilmente en menos de dos minutos; aunque si cometemos un error, por ejemplo cayendo al vacío, tendremos que volver a empezar desde el principio.
Disfrutar solo, o en compañía
Los que en algún momento hemos disfrutado en la época de PS3, o PS4, de las andaduras de Sackboy en 'Little Big Planet', sabemos que una de las cosas más divertidas era compartir esas desafiantes y alocadas situaciones con nuestros amigos. Es decir, jugando en cooperativo local o en línea.
Compartir es vivir, dice la cultura popular, y esto es algo que desde Sumo Digital han tenido muy en cuenta. Desde un primer momento, tenemos la posibilidad de jugar todos y cada uno de los niveles con hasta tres compañeros, simplemente hay que conectar un nuevo mando por cada jugador. Al mismo tiempo, dentro del propio juego existen una serie de niveles que única y exclusivamente pueden jugarse si somos más de una persona a los mandos. Su espíritu es cooperativo, ya que se trata de conseguir la mejor puntuación posible entre todos los participantes, pero si lo deseamos también podemos hacer jugarretas a nuestros compañeros. Lo sorprendente fue que, inicialmente, no existía la posibilidad de jugar en línea, aunque esta es una alternativa que ya se ha incorporado al juego mediante una actualización.
No existen dos héroes iguales
Otro de los elementos más característicos de la serie son sus posibilidades de personalización. Una vez más, podremos dotar a nuestro Sackboy de una apariencia única y personal. Podremos cambiar el material que da vida a nuestro pequeño protagonista, así como incorporarle toda clase de accesorios (máscaras, cascos, pelucas, ropa, etcétera) para dotarle de un toque de vida diferente. Muchas de estas apariencias se encuentran repartidas y escondidas, en distintas partes, a lo largo de los niveles, ofreciéndonos un motivo para rejugarlos si no los hemos encontrado todos. Más allá de estas vestimentas, también tendremos acceso a una tienda donde podremos intercambiar los cascabeles que recogemos a lo largo del juego por looks realmente llamativos y divertidos.
La ausencia más destacada puede ser la del editor de niveles. En 'Little Big Planet' teníamos la posibilidad de crear todo tipo de niveles, ya sean competitivos o cooperativos, donde el único límite era nuestra imaginación. De hecho, jugar a esos niveles de la comunidad y disfrutar del juego base podían ser experiencias totalmente opuestas, eso sí, las risas estaban garantizadas. Todo este espíritu no se ha trasladado en este universo tridimensional, dejando un interesante campo de mejora para el futuro.
Un comienzo prometedor
Como no podía ser de otra forma, Sackboy se estrena en la nueva PlayStation con un título que tiene un acabado artístico absolutamente precioso. Esto es algo marca de la casa, pero su propuesta audiovisual deleita los ojos, y los oídos, de todo aquel jugador que se sienta delante del televisor. Eso sí, no hay nada especialmente rompedor que pueda sorprendernos sobremanera.
El diseño de niveles está condicionado por la temática de los cinco mundos que visitaremos; por ejemplo, hay uno con el agua (mar) como elemento central; otro con la vegetación (selva) u otro con el espacio. Esto condiciona detalles importantes como la paleta de colores de los niveles o el diseño de los enemigos, por citar un par de ellos. Todo esto teniendo en cuenta que todo lo que vemos en pantalla está elaborado con materiales textiles, papel, etcétera.
El sonido es otro de esos elementos que aportan un mayor grado de inmersión en la propuesta. Por un lado, tenemos los clásicos efectos asociados a acciones específicas o a objetos concretos (romper una caja, rebotar en una plataforma, etc.), estas no son nada realmente especial, pero el hecho de aprovechar el altavoz del mando aporta un plus de intensidad en determinados momentos. Pero lo mejor en este apartado es la banda sonora. Generalmente, nos encontraremos con melodías alegres y dinámicas que nos incentivarán a seguir avanzando y jugando; puntualmente en niveles muy concretos, o en situaciones especiales (un enfrentamiento como un boss o una fase en la que pueda devorarnos la pantalla) la música aportará ese plus de tensión, nerviosismo e intensidad necesario.
Dentro de todo lo que tiene que ver con el apartado técnico, se nota que 'Sackboy: Una gran aventura' es un videojuego de lanzamiento de PS5, con todo lo que esto implica, para lo bueno y para lo malo. Entre esas cosas hay una que podríamos etiquetar como negativa, aunque es ser un poco ventajista, se trata del poco partido que Sumo Digital ha sacado al nuevo DualSense. ¿Por qué digo que es ventajista catalogar esto como algo negativo? Porque hasta que uno no juega y completa 'Astro's Playroom' (título gratuito que viene preinstalado en todas las consolas) no sé da realmente cuenta de todo lo que puede ofrecer este periférico: La vibración háptica, la resistencia de los gatillos, etcétera. Personalmente, me parece una oportunidad perdida, sobre todo si tenemos en cuenta que estamos ante uno de los pocos exclusivos que por el momento tiene la consola.
En todos los demás aspectos, el videojuego funciona a las mil maravillas. El título corre a una resolución 4K, un framerate sólido y estable de 60 fps y con unos tiempos de carga ínfimos que nos permiten saltar de nivel en nivel en un abrir y cerrar de ojos. En mi caso, no he experimentado ningún tipo de problema técnico, ni he debido enfrentarme a los clásicos y molestos bugs que suelen achacar algunos juegos durante sus primeros días o semanas de vida.
Conclusiones
Como videojuego de plataformas, 'Sackboy: Una gran aventura' es una propuesta fantástica para todos aquellos amantes del género que cuentan con una flamante PlayStation 5. Es cierto que no estamos ante el título más espectacular o más exigente del mercado, pero se trata de una propuesta sólida y completa que ofrecerá muchas horas de juego, en compañía o en solitario, especialmente a todas aquellas personas que busquen completarlo al 100%. Además, para todos los fans de la franquicia 'Little Big Planet', este spin-off demuestra que pueden salir cosas interesantes relacionadas con la serie, y esta adaptación a las tres dimensiones me parece todo un acierto. Por si fuera poco, a nivel artístico es una auténtica gozada, es uno de esos juegos que enamoran, aunque no sorprende.