Nos gusta competir. Puede ser una cuestión evolutiva o propia de personalidad; quizás sea que, como seres humanos, necesitamos sentirnos satisfechos con nosotros mismos y superarnos cada día. Hay quien toma estas competiciones de forma agresiva, otros de manera más relajada sin importarle la resolución final sino dar lo mejor de sí en el camino. Admiramos a competidores y crecemos como personas a través de cada duelo. Y aquí nos encontramos: frente a frente en un concurso de preguntas y respuestas.
'Saber es Poder' es pura competición. El título de PlayLink tiene como objetivo central atraer a cualquier clase de persona para lanzarle preguntas una tras otra. Al final del duelo quedará claro quién sabe más que nadie en diferentes materias dentro del salón de tu casa. Pero la gracia de este juego no se encuentra en sus retos, sus preguntas o su accesibilidad: está en competir y hacer la puñeta. Hemos venido aquí y vamos a hacernos con la victoria incluso si hay que pisar a nuestros amigos.
Saber y ganar
Las bases de 'Saber es Poder' no podrían ser más claras. Nos enfrentamos a una ráfaga de preguntas de toda clase, una tras otra, a las que cada jugador debe responder sin falta; quienes antes lo hagan y acierten en sus respuestas más puntos se llevarán. Tenemos categorías de toda clase y los jugadores deben seleccionar a cuál querrán hacer frente a continuación, lo que desbloqueará otra tanda de posibles preguntas en relación a la última contestada. Sencillo, directo, simple: no se distingue demasiado en este apartado de otros concursos de televisión de fama internacional.
Claro que para hacer más llevadero este viaje contamos con la compañía de un presentador de altura, el mismísimo Dani Mateo. El destacado humorista siempre ha logrado arrancarme una sonrisa con sus monólogos e intervenciones en diferentes programas televisivos, por lo que su participación en este juego debería ser un motivo de celebración. Por desgracia como actor de doblaje ofrece un trabajo que no está a la altura de lo exigido: su voz puede llegar a ser monótona, no ofrece el gancho que suele tener y podría ser sustituido por cualquier otra persona y apenas se notaría la diferencia.
Puede parecer un tema trivial, pero la presencia de un gran presentador suele ser la clave en los concursos de televisión. Ahí hemos tenido grandes nombres como Jordi Hurtado o Carlos Sobera, que siempre han sabido cómo destacar ellos mismos y entretener lo suficiente a la audiencia como para hacerles volver una vez más. Dani Mateo tiene el potencial para ser un gran presentador, pero casi parece que no sepa cómo afrontar las líneas de diálogo a doblar. ¿Es por su causa? ¿Quizás por la dirección de doblaje? Quién sabe. Sea como fuere pasa como el punto más flaco del título, y puede ser un grave problema al tratarse de un punto tan fundamental.
El rival más débil
Por supuesto las preguntas y las respuestas no son lo único que nos encontramos en nuestro camino a la cima de la victoria. Para hacer el título más interesante se nos otorgan diferentes bonus entre ronda y ronda que nos dan la oportunidad de apostar y doblar nuestros puntos en caso de que acertemos, imponer nuestra voluntad frente a la selección de una categoría o incluso intentar adivinar quién se llevará más puntos esta ronda para obtener nosotros la misma cantidad. No se trata de nada novedoso, pues otros juegos similares de PlayLink como '¡Has sido tú!' o 'Intenciones ocultas' hacen provecho de estas mismas funciones.
La gracia está en los bonus ofensivos que se nos entregan entre cuestiones. Antes de saber la propia pregunta podemos elegir un ataque y a quién se lo vamos a lanzar, lo cual nunca impedirá que el rival no conteste pero sí que pueda tardar más en hacerlo. Puedes hacer que algunas de las letras de las respuestas desaparezcan, que se congelen las respuestas y deba picar el hielo para descubrirlas, o que bombas mosquito tapen parte de la pantalla que, de tocarlos, robarán preciosas décimas de segundo para responder.
Aquí entra un importante factor de astucia que llega a incluso imponerse sobre la inteligencia y el conocimiento. En caso de demostrar saber demasiado nuestros enemigos podrán comenzar a bombardearnos con estas trampas y nuestro avance puede volverse algo arduo: debemos engañarlos, no aspirar a las máximas puntuaciones y saber cuándo dar un paso adelante para apoderarnos del trono. Saber no siempre es poder: nuestro conocimiento puede limitarnos si demostramos tener demasiado. Cuidado con eso.
Esto se recrudece durante los compases finales de nuestra partida, donde nuestros puntos pasan a convertirse en nuestra posición dentro de una pirámide que debemos escalar lo más rápido posible para obtener la victoria. Cuanto más arriba nos encontremos más trampas y ataques obtendremos, aunque a la vez seremos más susceptibles de ser víctimas de nuestros rivales. Quienes mejor respondan más subirán, y el primero en llegar al final será el ganador absoluto. La acumulación de puntos previa no sirve para nada más que una ventaja inicial. Podemos considerar esto como algo atrevido o desafiante, pero lo cierto es que para aquellos que más puntos hayan logrado puede sentirse como algo frustrante e injusto, por lo que quizás no sea la mejor decisión de diseño a la hora de la realidad; no hace más que demostrar que, pese a lo que el título señala, el saber no se traduce de forma automática en poder.
Un, dos, tres
Ahora que sabemos las bases y caras que tenemos por delante estaréis pensando que quizás no sea tan divertido cuando tengas que comprar cinco mandos adicionales para PS4. ¡Nada más lejos de la realidad! 'Saber es Poder' es uno de los juegos que aprovecha la tecnología PlayLink, un proyecto en conjunto de Sony para crear diferentes juegos que puedan ser disfrutados fácilmente por todo tipo de jugadores y grupos con sólo descargar la debida aplicación del móvil. El mando de cada uno de ellos es el propio smartphone: ni más ni menos.
Esta facilidad para sumarse a una partida e invitar a toda una serie de amigos a casa y matar el tiempo es una excelente respuesta por parte de Sony ante la falta de los juegos de sofá. Es un buen agregado para cualquier fiesta o reunión, al igual que lo serían otros juegos de mesa como 'Monopoly'; pero hay que tomarlo con precaución. 'Saber es Poder' se disfruta como acompañamiento, no como evento principal de cualquier fiesta. Es fácil como jugador sentirse abrumado o incluso cansado si extendemos una partida a varias: es mejor quedarse con la sensación de necesitar más y no forzar nuestra consola a soportar varias partidas seguidas.
Conclusiones
'Saber es poder' es un juego que cumple en aquello que se propone principalmente. Se trata de un tipo de concurso con amigos entretenido, capaz de hacer pasar un buen rato y al que es muy fácil entrar a jugar, indiferentemente de si controlas bien un mando o no. La gran variedad de temas que se nos proponen es lo suficientemente consistente como para aprobar con nota y retarnos a volver en el futuro. Sin embargo, la dirección de doblaje y algunas decisiones en el diseño del juego acaban repercutiendo muy negativamente en el resultado final: podría aspirar a más, llegar a ser divertido como ningún otro.