El 2 de Mayo 2019 | 17:30
Escasos días antes de enfrascarme en las líneas de este análisis surgía una polémica que ha azotado al medio más veces de las que me gustaría recordar. ¿Es la dificultad importante en el videojuego? Este texto no se ha originado para responderla, pero si surgen de la misma algunas otras, similares. ¿Cuanto debe durar un videojuego? ¿Que extensión deben tener sus componentes para hacerlo "merecedor" de su título?
Muchas preguntas. Pocas respuestas. O tantas como jugadores y jugadoras encontramos en el mundo, en realidad. Y es que la única respuesta global que encontraremos se encuentra en los designios de cada estudio, de cada idea detrás de cada obra. Porque estos valores, al fin y al cabo, se encargan de proyectar lo que un título es y será. Y 'Rise of Industry' es un título que se acoge a estas líneas. Uno que me ha llevado a hacerme dichas preguntas y que ahora, tras pasar tiempo entre la propuesta de Dapper Penguin Studios, resuelvo en su particular análisis.
El surgimiento de la industria
No negaré que hay cierto sentimiento fan. Hacia el juego independiente, hacia la industria. Al medio en general. Pero el hecho de que 'Rise of Industry' sea un producto patrio con un construcción independiente tenía cierto gancho en referencia a su título y a como el juego se convierte en un nuevo eslabón en la construcción del videojuego indie.
Una propuesta simple, que se intuye rápidamente ante su propio título y que no deja espacio a la sorpresa. Pero que, no obstante, se acoge a los valores más intrínsecos del videojuego y juega con sus líneas para ofrecer una experiencia harta conocida que se alimenta de su pequeña innovación para conseguir dar una pequeña vuelta de tuerca y hacer de su experiencia algo absorbente. Difícil en sus confines, incluso abstracto en algunos conceptos.
'Rise of Industry' es una obra independiente con gran valor de futuro. Una obra que pide tiempo. Lo exige. Pero recompensa a quien le tiende la mano. Responde a esas preguntas, porque es un juego especialmente largo —siguiendo la tónica general del juego en un concepto abierto; a nuestra disposición— y también intrincadamente complejo. Pero, a su vez, notoriamente satisfactorio.
Construye, afianza y sigue adelante
Entremos en materia. Más allá de lo que representa o exige —un hecho, al fin y al cabo, que cada cual encaja a su manera— resulta que 'Rise of Industry' es un título puramente inspirado en los clásicos tycoon o juegos de simulación económica que recordará a los más nostálgicos a títulos como 'Transport Tycoon'. Su propósito, con claras intenciones en el nombre que le bautiza, nos llevará a crear nuestra propia industria y, no solo mantenerla, sino también a hacerla crecer y llevarla a lo más alto.
Para ello la gente de Dapper Penguin Studios nos propone dos estructuras para ello — previo y obligatorio paso por el tutorial del juego antes de adentrarnos en cualquiera de ellos. Por un lado contamos con un clásico modo libre donde, como su propio nombre indica, tendremos la libertad de experimentar, construir y comprobar cómo se mueven los engranajes de nuestras creaciones por cuenta propia. Por otro lado, el modo carrera sirve las veces como una suerte de modo asistido donde tendremos ciertas libertades pero seremos limitados por los constantes retos del juego, olvidando el factor de la aleatoriedad y haciéndonos dueños de nuestro progreso a través de un intrincado sistema de progresión.
Aunque las ideas, como conceptos generales, se entienden como algo simple, lo cierto es que el desarrollo mecánico de 'Rise of Industry' cuenta con todo un escenario cambiante que sirve como ejemplo de la propia evolución del medio, contando con un enorme número de variables y estadísticas que jugarán a nuestro favor, pero también a nuestra cuenta, siendo nuestro deber el aprender a dominarlas y no vernos desbordados por los números y las cuentas a la hora de construir nuestro imperio.
Así en su mapa nos encontraremos con diferentes ciudades con las que deberemos interactuar para mantener relaciones económicas favorables para nuestro desarrollo. Un concepto, por supuesto, que crecerá a medida que lo haga nuestro imperio, sumando cada vez más necesidades, abriendo nuevos mercados y a través de la evolución tecnológica propia de la necesidad de la evolución de la industria. Así pues, nuestro territorio crecerá de forma exponencial. Lo que quizás nazca como una simple plantación de cacao se convertirá pronto en todo un seguido de construcciones y necesidades que cumplir en favor de los habitantes y nuestro propio bolsillo.
La estrategia, por lo tanto, lo será todo en el título. Priorizar las principales necesidades de la población nos permite aumentar las ganancias por cada material vendido que, a su vez, nos ayudará a progresar y conseguir nuevos puntos para investigar nuevas tecnologías y lanzarnos a fabricar productos por encima de los básicos, aumentando la complejidad del título, que nos pedirá hacernos con contratos para explotar ciertos suministros, preocupándonos del nivel de contaminación generados y, por supuesto, construyendo monstruosas cadenas de producción de frágil estabilidad.
Un vasto mundo de conceptos
Y es que es, remontándome a las primeras líneas de este análisis, la estabilidad de nuestro imperio lo que pondrá las puntas sobre las ies en el desarrollo de cada partida. Un punto del que ya nos avisan sus propios desarrolladores a la hora de comenzar con nuestra actividad empresarial y que se convierte en una de las grandes realidades de 'Rise of Industry'. Y es que no es un juego especialmente accesible.
No se cierra en bandas, desde luego. Pero es una obra que nos obliga a estudiar conceptos. Arrojarse al mismo sin más ayudas que las que ofrece su tutorial puede ser una osadía, especialmente si se tratan de nuevos usuarios. Algo que sus desarrolladores han conseguido paliar tendiendo ampliamente la mano a sus usuarios, consiguiendo unificar a su comunidad, que ya trabaja en la propia wiki del juego, así como en mods para el mismo.
Y es que la cantidad de conceptos que 'Rise of Industry' nos arroja desde un primer momento no es precisamente escasa y no solo nos obligará a estar atentos al tablero de juego, observando el más mínimo cambio y atendiendo a las necesidades del mercado, sino que nos pedirá participar en una complejidad mecánica notable a la hora de construir nuestro imperio. La construcción de carreteras y su renovación —el juego expande su sistema de transporte a grandes implementaciones como la inclusión de trenes o zepelines— es uno de los principales dolores de cabeza, ya que tenemos que asegurarnos de conectar todos nuestros centros de recolección y los almacenes, así como los comercios interesados en nuestros productos.
Pero ese será el menor de nuestros problemas porque la evolución exponencial del juego nos exigirá cada vez más y más mientras que el coste de los edificios, la producción y las necesidades cambiarán de forma continua mientras la ciudades crecen, llegando a convertir al título en un verdadero caos con una exigencia por encima del nivel de gestión y paciencia de muchos usuarios.
Innovando sobre puntos familiares
'Rise of Industry' parte de puntos especialmente conocidos pero innova sobre ellos y los conquista, haciendo de su experiencia una, insisto, familiar pero a su vez especialmente refrescante. Lo hace partiendo de un sistema de juego ampliamente complejo, con cientos de variables y grandes mapas generados procedimentalmente que esconden en su interior una enorme cantidad de retos y posibilidades.
Lo hace a través de una imagen que potencia su idea más independiente con un ligero toque poligonal que, en lo personal, recuerda a otros indies cercanos como 'Tiny Metal' y que consigue ofrecer al juego una profundidad artística muy valorable a la hora de pasarnos horas y horas frente a la pantalla superando las imposiciones del mismo sobre la industria. Algo similar ocurre con su banda sonora, que se mantiene en tonos medios, sin llegar a destacar nunca por encima de la experiencia general del juego pero acompañando en todo momento y haciendo de la misma algo más entrañable.
En líneas generales, 'Rise of Industry' trae consigo el alma tycoon más clásica bajo una capa moderna que nos recuerda la evolución del medio. El hecho de querer más de lo mismo sin necesidad de conformarnos con la misma obra otra vez. Una entrega valiente y de grandes potenciales —que se expandirán con actualizaciones gratuitas, como su modo multijugador— con un enfoque estratégico que no convencerá a todo el público pero que apunta a convertirse en una de las grandes propuestas modernas del género.
Lo mejor:
- Un abanico de opciones enorme
- Sus muchas variables y como el título juega con ellas
- Su personalidad y presentación en todo momento
Lo peor:
- La accesibilidad limita la entrada en sus mecánicas, especialmente para jugadores noveles
- Algunos textos se encuentran a medio traducir en momentos ocasionales