El 28 de December 2013 | 21:21
¿Cómo revolucionar un género en el que ya parecía todo inventado? No sabemos si Masahiro Sakurai se hizo esta pregunta en algún momento durante el desarrollo de 'Super Smash Bros.' para Nintendo 64, pero es justo lo que consiguió, y por todo lo alto.
El golpe del siglo
Los orígenes de este juego son sorprendentemente modestos, Sakurai quería crear un juego de lucha en el que pudiesen participar 4 jugadores simultáneos, pero sabía que en un género que entonces estaba en pleno auge, sería muy difícil sacar algo competitivo, y más partiendo de cero. Entonces se le ocurrió la idea de usar personajes ya existentes, personajes famosos, personajes de Nintendo. Pero tenía muy claro que Nintendo jamás aprobaría un juego de lucha donde Link se liase a espadazos con Mario, así que sin consultar previamente a nadie, comenzó a programar un prototipo que pudiera mostrar para que su concepto de juego traspasase la imagen mental que se les crearía en la cabeza a los directivos de Nintendo cuando alguien les hablase de un juego donde sus personajes más populares se liasen a puñetazo limpio. Aquel modesto prototipo solo tenia cuatro personajes jugables: Mario, Fox de la serie 'Star Fox', Samus de la serie 'Metroid', y Donkey Kong. Su sistema de combate simple pero muy divertido a la par que desenfadado, gustó a los jefes de la gran N y el proyecto fue aprobado. Así nació el que es sin lugar a dudas uno de los juegos más importantes de todo el universo de Nintendo, si no el que más, pues a fin de cuentas reúne a todo el universo nintendero en él.
La propuesta final que llegó a las tiendas ofrecía personajes de varias franquicias de Nintendo, concretamente: Mario, Pokemon, Zelda, Metroid, Donkey Kong, Yoshi, Kirby, Star Fox, F-Zero, e incluso el por entonces poco conocido Earthbound. De hecho la aparición de esta saga en 'Smash Bros.' popularizó esta franquicia entre muchos jugadores que jamás habían jugado a un juego de esta serie. Pero no solo encontrábamos personajes de estas sagas, también los escenarios de juego estaban basados en estas franquicias, así como numerosos objetos especiales que se podían usar como ayuda durante los combates.
Si bien la idea de mezclar personajes de varias franquicias en un juego de lucha no era nueva (Sega ya probó esta formula con su 'Fighters Megamix' para Saturn), su peculiar sistema de juego si que fue todo un golpe de aire fresco en un género tan trillado como el de la lucha. Los combates se desarrollan con jugabilidad 2D mediante gráficos poligonales en 3D, para movernos tenemos un sistema de control más propio de un juego de plataformas, de hecho los escenarios suelen estar formados por plataformas entre las que podemos saltar.
Fácil de aprender, difícil de dominar
El sistema de golpes es muy básico, con un botón golpeamos, y con otro hacemos ataques especiales. Combinando uno de estos botones con el stick analógico conseguimos acceder a varios golpes diferentes. Este sistema de control es tan sencillo que cualquiera puede aprender a jugar en muy poco tiempo, pero a la vez es capaz de satisfacer las ansias de aquellos jugadores más dedicados que quieran llevar los combates al extremo dando espectáculo. Esta adaptabilidad para diferentes tipos de público es responsable en gran medida del éxito de esta franquicia.
Para saltar podemos usar el stick analógico pulsándolo hacia arriba, o en sus diagonales superiores, de forma similar a otros juegos de lucha más convencionales. Pero también es posible saltar con un botón, para aquellos menos habituados a eso de saltar con el stick de control. Finalmente disponemos un botón para bloquear, y otro para agarrar a nuestro oponente. El primero genera un escudo que va perdiendo fuerza gradualmente cuanto más tiempo lo tengamos sacado, si lo usamos durante demasiado tiempo, estallará y nos dejará atontados unos segundos, quedando a merced de los golpes de nuestro oponente, de modo que habrá que tener cuidado de como usamos este escudo. El botón de agarre nos permite lanzar a nuestro oponente por los aires, y es el único ataque que ignora el escudo protector de nuestro oponente, por si este decide abusar de él.
Aquí no hay barras de vida, el mecanismo para derrotar a nuestro oponente también es original. Cada personaje cuenta con un medidor de daño, este medidor comienza en 0 e ira aumentado según vayamos encajando golpes. Cuanto más alto sea el daño recibido, más lejos nos enviaran los ataques fuertes que recibamos. Solo perderemos si nuestro personaje se sale por alguno de los márgenes del escenario, ya sea cayendo al vacío fuera de las plataformas, o saliendo disparado en cualquier dirección. Esto provoca que podamos perder incluso con el medidor de daño a 0 si damos un paso en falso y no saltamos bien, o que aun con un nivel de daño alto, seamos capaces de sobrevivir épicamente en un tenso combate a vida o muerte.
Alternativas a la violencia
Disponemos de varios modos de juego, pero el principal se centra en empezar el combate con un cierto número de vidas, cada vez que nos salgamos del escenario perderemos una vida, y si nos quedamos sin vidas habremos perdido el combate. también es posible combatir por tiempo con vidas infinitas, decidiéndose el ganador en base al número de veces que haya echado a sus oponentes del escenario. Además contamos con un modo para un jugador en el que iremos superando retos de dificultad creciente, y en el que entre combate y combate se van alternando algunos minijuegos.
Tres serán los minijuegos disponibles: Race to the Finish, Break the Targets, y Board the Platforms. El primero de ellos nos reta a recorrer un escenario y alcanzar la meta antes de que se agote el tiempo, pero no solo deberemos evitar los peligros y saltar bien, si no que además tendremos que esquivar a los enemigos que nos salgan al paso e intentan frenarnos. El segundo modo nos propone destruir una serie de dianas repartidas por un nivel, cada personaje tiene su propio escenario, y las dianas repartidas en base a sus habilidades propias. Finalmente el tercer minijuego nos reta pisar un cierto número de plataformas dentro de un nivel que también será exclusivo de cada personaje, el objetivo es aterrizar en todas las plataformas del nivel tan rápido como sea posible. Estos minijuegos son simples pero tremendamente adictivos, especialmente los dos últimos.
La diversidad de retos hace que el modo para un jugador sea bastante divertido, pero la verdadera gracia de este juego está en sus combates multijugador para hasta 4 participantes. Será aquí donde experimentemos el verdadero potencial de 'Smash Bros.', pues estos combates a 4 son una fuente inagotable de diversión y de risas entorno a nuestra Nintendo 64. Probablemente 'Smash Bros.' sea el juego de Nintendo 64 que mas mandos vendió de esta consola, junto con 'Mario Kart 64', pues eran de ese tipo de juegos que sacaban a relucir todo el potencial multijugador de esta consola con sus 4 novedoso puertos para mandos incluidos de serie. Así 'Smash Bros.' se convirtió en uno de los juegos más vendidos de Nintendo 64, y eso a pesar de salir al mercado al final de la vida de esta genial consola.
Un regalo para los ojos de todo buen fan de Nintendo
Gráficamente todo el juego se muestra con gran detalle, con diseños muy limpios y coloridos. El espíritu de cada franquicia que compone este juego fue respetado con gran acierto, y ningún fan de estas series se verá en absoluto decepcionado. La banda sonora y los efectos de sonido, también rinden homenaje a cada una de estas sagas, y harán las delicias de sus fans, ya sea con temas rescatados directamente de otros juegos, o con remixes totalmente nuevos. Toda esta mezcla sonora supondrá una verdadera sinfonía de epicidad para todo buen fan de la gran N, que sin duda le hace ganar puntos al juego.
Como ya hemos mencionado anteriormente, durante los combates dispondremos de un amplio abanico de objetos que podremos usar durante los combates. Estos objetos aparecerán aleatoriamente por el escenario de batalla, y pueden suponer un giro radical en los acontecimientos. Se pueden desactivar, pero así también se le quita al juego su factor sorpresivo. Estos objetos también están basados en las franquicias representadas en el juego, y podemos encontrar objetos tan dispares como un contendor de corazón de Zelda que reducirá el daño que hayamos recibido, un caparazón de Koopa de Mario que usaremos como proyectil, el martillo de Donkey Kong para sembrar la destrucción allá por donde pasemos, o las Poke Balls de Pokemon que harán aparecer de forma aleatoria una de estas criaturas en el escenario sembrando el caos.
El legado de esta serie se hace más y más grande con cada nueva entrega que llega, este año que comienza nos traerá una nueva entrega para WiiU y 3DS, que será la cuarta dentro de esta exitosísima serie, además de presentar su primera incursión portátil gracias a la versión de 3DS. No cabe duda de que 'Smash Bros.' se ha convertido en todo un vendeconsolas para Nintendo, el lugar donde se dan cita sus estrellas más brillantes. 'Super Smash Bros.' ha dejado una huella imborrable en muchos jugadores durante generaciones, y a buen seguro que lo seguirá haciendo en el futuro.
Jugando este clásico en nuestros tiempos
Si queremos jugar hoy en día a esta versión para Nintendo 64, encontrar el cartucho original no es difícil, ya que como decimos fue uno de los juegos más vendidos de la consola. El problema es el precio, la gente no suele querer desprenderse de esta joya fácilmente, y comprar un cartucho original puede salirnos un poco caro. Por suerte Nintendo reeditó el juego en la Consola Virtual de Wii, haciendo que podamos disfrutar de toda la saga 'Smash Bros.' en la misma consola y usando el mismo mando (el de Game Cube).
Este es un buen momento para hacer repaso de esta exitosa saga mientras vamos abriendo boca para las nuevas entregas de esta serie que están apunto de llegar, así que ya sabéis, desempolvad vuestra fiel Nintendo 64, o descargaos la versión de Wii y renovad vuestra pasión por esta saga de sagas que tantos momentos impagables nos lleva dando desde que naciera en 1999.
Lo mejor:
Su genial mezcla de las mejores franquicias de Nintendo. Su infinita diversión multijugador.
Lo peor:
Que algunos personajes se tuvieran que quedar fuera por falta de tiempo.