El 22 de Septiembre 2013 | 14:58
A finales de los años 80 y principios de los 90, los juegos de peleas callejeras estaban en pleno auge en los salones arcade. Sega no quiso quedarse fuera y también buscó tener su propio juego de este género. Sin embargo este juego no llegó tener una versión propia para los salones arcade (lo único que hubo fue un port de la versión de Master System para Mega-Tech, un mueble arcade basado en Mega Drive), de modo que solo aquellos que tuvieran una consola de la compañía podían disfrutarlo.
Tres versiones de un mismo juego
A la entrega principal para Mega Drive no tardaría en unírsele una conversión para Game Gear, la consola portátil de Sega del momento. Cabría esperar que esa versión de Game Gear hubiese derivado en una conversión directa para Master System, pero no fue así, ya que Sega tardó algo más de tiempo en publicar este juego en su consola de 8 bits de sobremesa, tanto que salió al mercado en 1993, con su segunda parte ya disponible para los otros sistemas. De hecho ambas entregas salieron a al venta en el mismo año para Master System con tan solo unos meses de diferencia. A cambio de la larga espera, los usuarios de esta consola recibieron una conversión muy superior a la de Game Gear. Finalmente también estuvo disponible una versión del juego para Mega CD, que venía incluida en un recopilatorio llamado 'Sega Classics Arcade Collection', que se regalaba con el primer modelo de este add-on para Mega Drive con soporte en CD. Sin embargo y al tratarse de un regalo, esta versión era idéntica a la de Mega Drive salvo por la mayor calidad en las voces digitalizadas, de modo que nos centraremos en las otras tres versiones.
La historia del juego nos cuenta como la que otrora fuera una tranquila y apacible cuidad, había sido invadida por una organización criminal que sembraba el caos en sus calles y atemorizaba a sus ciudadanos. Esta organización estaba dirigida por alguien que se hacia llamar a sí mismo "Mr. X", y aunque se sabía poco acerca de él, toda la cuidad temblaba con tan solo escuchar su nombre. La gente temía salir de sus casas, y la antes floreciente ciudad ahora no era mas que un despojo de lo que una vez fue. Los ciudadanos clamaban justicia, pero los tentáculos de la organización criminal habían llegado hasta el mismísimo gobierno, y las fuerzas de la ley que debían poner fin a este sindicato del crimen ahora trabajaban para él. Pero tres jóvenes policías no pensaban quedarse de brazos cruzados, hartos de la corrupción renunciaron a sus puestos como agentes y se dispusieron a librar a la cuidad de esta lacra con sus propios puños. Estos tres valientes eran Axel Stone, experto en artes marciales y gran aficionado a los videojuegos. Blaze Fielding, que también era experta en artes marciales, arte que además combinaba con su pasión por el baile. Y Adam Hunter, un formidable boxeador rudo pero de gran corazón que pasaba sus ratos libres cuidando sus bonsáis. Los tres pusieron todo en juego, su trabajo, su pasión por la lucha, su ciudad, e incluso sus propias vidas, para poner fin al horror que invadía las calles.
Repartiendo estopa con fluidez
La manera de jugar es sencilla y no muy diferente de la de otros juegos similares, pero sorprende por su fluidez y facilidad de manejo. Cada uno de los tres personajes cuenta con sus propias habilidades, así por ejemplo Axel es rápido y fuerte, pero tiene un salto débil. Blaze es rápida y ágil en el salto, pero sus golpes son menos potentes. Y Adam es fuerte y se defiende perfectamente en el aire, pero es más lento que sus compañeros. Podremos afrontar la batalla en solitario, o acompañados de un segundo jugador, que es sin duda uno de los mayores alicientes de este tipo de juegos. Una vez seleccionado nuestro personaje saltaremos directamente a la acción en las calles, y deberemos eliminar a todos los enemigos que nos salgan al paso ya sea con nuestros puñetazos y patadas, o recogiendo objetos contundentes tales como cuchillos, botellas de cristal, tuberías, o bates de béisbol. También será posible realizar espectaculares movimientos en equipo cuando juguemos acompañados, pero debido a que podemos herirnos entre ambos jugadores, más vale que estos movimientos estén bien sincronizados, o de lo contrario podemos acabar sin amigos. No poder desactivar el "fuego amigo" puede ser algo molesto, pero también ayudará a que nuestros movimientos resulten más espectaculares cuando consigamos hacerlos bien. Cada personaje cuenta con su repertorio habitual de golpes, puñetazos, patadas voladoras, agarres, lanzamientos... Unos son más sencillos, y otros son más complejos y requerirán de algo de práctica para hacerlos bien. Los tres personajes cuentan con los mismos controles, pero sus movimientos serán ligeramente diferentes dependiendo de cual llevemos.
Si la cosa se complica (que lo hará), podemos recuperar nuestra salud mediante manzanas o platos de carne que rellenaran nuestro medidor de salud parcialmente, o por completo dependiendo de cual cojamos. Y para cuando las cosas se pongan realmente feas podremos pedir ayuda a un compañero que aun esta dentro de la policía, y que llegará raudo y veloz en su coche a la zona para arrasarla con lanzacohetes o ametralladoras, eliminando a todo desalmado que haya en pantalla. Tan solo dispondremos de una de estas llamadas por cada nivel, así que deberemos reservarla para momentos complicados. Por suerte cada vez que perdamos una vida y regresemos, volveremos a tener una llamada disponible. Además es posible recoger un ítem en forma de pequeño coche de policía que nos dará una oportunidad extra de hacer que nuestros enemigos sientan sobre sus carnes todo el peso de la ley. Finalmente podremos recoger ítems tales como sacas de dinero, o lingotes de oro, que servirán para aumentar nuestra puntuación.
¡Que viene el jefe!
Al final de cada nivel nos estará esperando uno de los esbirros principales de Mr. X, que serán dos si estamos jugando en modo cooperativo. En algunos niveles habrá que hacer frente a más de uno de estos jefes finales, por lo que más nos vale administrar bien las llamadas a nuestro compañero policía. Estos combate brutales solo terminarán cuando todos los jefes hayan caído (si no caemos nosotros antes... ), y para ello deberemos vaciar sus dos barras de vida una tras otra, tarea nada fácil. Más nos vale aprender pronto sus patrones de ataque, o de lo contrario nuestras vidas caerán una tras otra ante sus brutales ataques. Cada uno de estos jefes se repiten al menos dos veces a lo largo del juego, y en el último nivel no dispondremos de llamadas a la policía, así que mas nos vale estudiar sus movimientos con cuidado cuando nos enfrentemos a ellos por primera vez.
Si conseguimos llegar hasta el final, el propio Mr. X saldrá a recibirnos con una deshonrosa propuesta bajo el brazo, la de unirnos a su organización. En ese momento podremos escoger si queremos aceptar su proposición o no, y es aquí donde llega uno de los momentos cumbre del juego. En caso de que estemos jugando solos y respondamos "no", Mr. X se hartará de nosotros y comenzara la batalla final para librar a la cuidad de las garras del villano. Pero si respondemos "si", Mr. X nos preguntará si queremos ser su mano derecha y servirle. Si respondemos "si", seremos enviados de vuelta a uno de los niveles anteriores y tendremos que repetir de nuevo la parte final del juego. Sin embargo si respondemos "no", lucharemos con Mr. X por el control de la organización. Si le derrotamos asistiremos al final malo del juego, y nuestro personaje se convertirá en él nuevo capo del crimen. Pero el momento mas épico se produce cuando jugamos a dos jugadores, ya que cada jugador puede escoger su respuesta por separado, y si uno responde "si", y el otro "no", comenzará una guerra fratricida entre ambos jugadores hasta que uno de los dos caiga derrotado. A partir de ahí el juego continuará en modo de un jugador, y la aventura se desarrollara en base a lo que haya respondido el vencedor. Esto le da un puntito extra al final del juego, ya que a buen seguro que a la hora de responderle a Mr. X cruzáis miraditas con el otro jugador en plan "¿Vamos a llevarnos bien, o quieres guerra?"
Gráficamente este primer 'Streets of Rage' (conocido en Japón como 'Bare Knuckle') puede no parecer tan deslumbrante como sus secuelas, pero en su momento era una delicia poder ver los numerosos detalles que había en cada escenario tales como luces de neón que parpadean, papeles agitados por el viento, las olas que chocaban contra la playa, latas de refresco que ruedan por el suelo... además los personajes principales están bien animados y se mueven muy fluidamente. Lástima que los enemigos se muevan de forma algo más brusca, y que sus patrones tiendan a repetirse cambiando únicamente el color para reflejar que son más fuertes unos que otros. No obstante no es algo demasiado grave y se le perdona. Los escenarios son variados y representan diferentes zonas de la ciudad, como los barrios bajos, la playa, un puente en construcción, una fábrica, o incluso la cubierta de un barco.
Cuando una banda sonora tiene un papel muy especial
Hay algo que hace muy especial a 'Streets of Rage', y ese algo es su música. Compuesta por el genial Yuzo Koshiro, la banda sonora de este juego exprime magníficamente el chip de sonido de Mega Drive, haciendo que estos temas musicales queden grabados a fuego en nuestra memoria de por vida. Cada tema acompaña perfectamente a cada momento del juego, pudiendo sentir un ritmo mas relajado cuando luchemos en la playa de noche, o un ritmo tenso y siniestro cuando nos veamos las caras con un jefe. La música cobra tal importancia dentro de este juego, que seguro que nadie que lo conozca podría concebirlo sin estos temas musicales que lo acompañan, pues son una parte imprescindible de la experiencia de juego que ofrece 'Streets of Rage'. Además Yuzo Koshiro también sabía exprimir muy bien los chips de sonido de Master System y Game Gear (como ya demostró en él primer Sonic de estas consolas), de modo que sus temas están magníficamente adaptados en estos sistemas y guardan gran parte de su encanto original.
La versión para Game Gear se presenta muy limitada con respecto a la de Mega Drive, el control es bastante más simple y tosco, especialmente cuando tratamos de agarrar y arrojar a un enemigo por los aires. Adam desaparece sin dejar ni rastro, dejando a Axel y Blaze como únicos personajes jugables. Para colmo algunos de los niveles también se quedaron por el camino, haciendo él juego aun más corto de lo que ya era en Mega Drive. Quizá todo esto se podría haber achacado a la potencia de la consola sin mas, pero la versión de Master System se encargó de dejar por los suelos a la de su hermana portátil, y es que esta versión si que incluye todos los movimientos, personajes, y niveles del juego de Mega Drive. Es más, incluye un jefe final totalmente exclusivo de esta entrega y que nos saldrá al paso al final del nivel de la fábrica, allá donde la versión de Mega Drive se limitaba a repetir de nuevo los jefes del nivel 2. La única pega que se le puede poner a la versión de Master System es la falta del modo cooperativo para 2 jugadores, cosa con la que si cuenta la versión de Game Gear (con 2 juegos en 2 consolas unidas con un cable especial).
El legado de esta saga se extendió con su exitosa secuela, que llegó también a Master System y Game Gear. La tercera entrega solo vio la luz en Mega Drive, y es hasta la fecha el último juego oficial de esta saga que ha salido de manos de Sega. Compañía que ha intentado numerosas veces hacer volver esta franquicia, pero cada nuevo intento acaba en cancelación, lo que ha llevado a que la serie 'Streets of Rage' acabe siendo conocida como la saga que tiene más juegos cancelados que publicados. Esperemos que algún día volvamos a ver una nueva entrega de esta serie, pero por el momento nos queda la trilogía original para nuestro goce y disfrute.
Mamporros para todos
No nos cabe duda de que cuando 'Streets of Rage' regrese en breve adaptado a las 3D para Nintendo 3DS, conservará todo el encanto del juego original que lo hizo tan especial en su momento. No podemos esperar para ver esas calles oscuras llenas de maleantes con el efecto 3D, además de poder probar las nuevas opciones como el curioso modo "toque de la muerte", en el que acabaremos con los enemigos de un solo golpe. Aunque si no poseéis la consola portátil de Nintendo, o si no os interesa el 3D. También podéis jugar al 'Streets of Rage' de Mega Drive gracias a la Consola Virtual de Wii, además de encontrarlo incluido entre los numerosos títulos del recopilatorio llamado 'Sega Mega Drive Ultimate Collection', para PS3 y 360. Los usuarios de esta última también pueden descargar desde Xbox Live la colección de los 3 juegos de 'Streets of Rage' de Mega Drive y disfrutar de ellos con modo online.
Como veis no tenéis excusa para no disfrutar de este gran clásico de Sega hoy en día, tanto si queréis revivir la experiencia, como si no lo habéis jugado nunca y queréis probarlo Un autentico imprescindible para todo buen amante de los beat em'up.
Lo mejor:
Su modo cooperativo, su carisma, y su inolvidable banda sonora.
Lo peor:
Puede hacérsenos algo corto, especialmente en Game Gear. Y la falta del modo cooperativo en la versión de Master System.