En 1994 los juegos de plataformas dominaban sin oposición, su dominio sobre otros géneros era incluso mayor que el que ejercen hoy en día los shooters en primera persona. En esta época dorada de estos saltarines juegos, Sony se unió a Traveller's Tales para crear un juego de Mickey Mouse muy especial que recorrería los 65 años de historia del simpático ratón de Disney.
Las intemporales aventuras de Mickey Mouse
No sabemos ni como ni cuando ha ocurrido. ¡Pero Mickey ha vuelto al pasado! Nada menos que a 1928, a su primera película en blanco y negro llamada Steamboat Willie. Ahora Mickey debe regresar hasta su propio tiempo saltando de película en película a lo largo de toda su carrera. Por el camino Mickey se encontrará con los Mickeys del pasado, que no llevarán nada bien eso de verse a sí mismos con su aspecto futuro. Pero volver atrás en el tiempo no sólo supone reencontrarse consigo mismo, si no también con el malvado Pete, que lleva el mismo tiempo que Mickey haciendo de las suyas. Por si todo esto no fuera suficiente, otros viejos enemigos del pasado acechan a Mickey, algunos tan malvados que pueden hacer parecer un tipo simpático al desalmado Pete... Pero no todo serán problemas, su fiel amigo Pluto estará dispuesto a echarle una mano para volver a su tiempo. ¿Logrará Mickey volver a su época? Eso depende de nosotros, así que es hora de coger el mando y repasar la larga trayectoria del ratón más famoso del mundo.
La mecánica de juego es sencilla, no muy diferente de la de otros grandes clásicos plataformeros de Disney de la época como: 'DuckTales', 'Castle of Illusion', o 'Quackshot'. Plataformeo puro y duro en 2D donde habrá que tener mucho cuidado de calcular bien los saltos, y de ver donde ponemos los pies. Un mal paso nos puede hacer caer al vacío y perder una preciada vida, así que mas nos vale andar con cuidado, pues aquí no hay tutoriales, ni ayudas, ni consejos que valgan. Nuestra aventura comenzará en blanco y negro rodeados de seres extraños del pasado, poco a poco el color irá tiñendo el paisaje a medida que avancemos y nos vayamos familiarizando con el control, pero esto no ha hecho más que empezar.
Mickey puede acabar con los enemigos principalmente de 2 formas, la primera y más básica es saltando sobre ellos y rebotando, la segunda es arrojándoles canicas que vayamos recolectando por el camino. Estas canicas son muy limitadas, así que más nos vale no malgastarlas, o puede que las echemos de menos en el peor momento. Si un enemigo o una trampa del escenario nos golpea, la mano que se muestra en la esquina superior izquierda de la pantalla doblara un dedo, si dobla todos los dedos, Mickey quedara fuera de combate y perderemos una preciada vida. Si recogemos una estrella dorada, la mano estirará uno de sus dedos y podremos recibir otro impacto más antes de sucumbir.
La mayoría de enemigos caerá con un solo impacto, pero otros son bastante más resistentes y requerirán de varios pisotones o canicazos para se derrotados. Algunos directamente son inmunes a nuestros ataques, de modo que solo podremos evitarlos o esperar a que enseñen su punto débil. Al final de algunos niveles nos estará esperando un jefe que habrá que derrotar para poder continuar, la manera de acabar con ellos es la típica de este tipo de juegos, observar sus patrones de ataque y esquivar sus envites, mientras esperamos el momento adecuado para contraatacar.
Dificultad ratonera
Hay que dejar bien claro que no nos encontramos ante un juego precisamente fácil, puede que superar el primer nivel no nos cueste mucho, pero ya desde la segunda fase empezaremos a sudar y a echar en falta más vidas rápidamente. Otro inconveniente sobre la dificultad es que no sigue una curva ascendente, pues tan pronto sube como baja. De modo que no os desesperéis si veis que os ha costado lo suyo acabar el nivel 2, pues el nivel 3 será algo más asequible. Este sube y baja descabala el juego y se puede hacer algo molesto para algunos jugadores, aunque otros quizá lo agradezcan como forma de hacer el juego menos previsible.
En determinados momentos nos podemos ver en situaciones especiales que varíen el juego, como por ejemplo cuando tengamos que huir de un alce furioso con una perspectiva frontal en 3D, o debamos ir montados en una vagoneta mientras esta avanza desbocada y saltamos o nos agachamos para evitar las trampas que nos salgan al paso. Estas situaciones ayudan a romper la monotonía, pero suelen ser las principales culpables de que la dificultad se dispare por momentos para luego volver a bajar. Los más habituados a este tipo de juegos seguramente no tarden en adaptarse y hasta les resulte fácil por momentos, pero los que no estén acostumbrados podrían no ser capaces de terminar ni el segundo nivel y ser pasto de la frustración.
A lo largo de la aventura recorreremos niveles inspirados por diferentes películas de Mickey, concretamente estos: Steamboat Willie (1928), The Mad Doctor (1933), Moose Hunters (1937), Lonesome Ghost (1937), Mickey and the Beanstalk (1947), The Prince and the Pauper (1990), y The Band Concert (1935). Este último es un nivel secreto al que se accede desde Mickey and the Beanstalk, y es que este juego oculta numerosos secretos para el buen aventurero que sepa explorar los niveles. Todos estos escenarios tienen cada uno su personalidad y estilo propios, tal y como lo tenían las propias películas en las que están basados, de modo que podemos tener la sensación de estar jugando a un juego distinto en cada uno de ellos, algo muy de agradecer en cuanto a variedad.
Gráficamente solo se puede calificar a este juego como una maravilla, independientemente del sistema donde lo estemos jugando. El colorido de los escenarios y el diseño de personajes y enemigos llenan la pantalla, y es que la propia Disney estuvo involucrada en la creación de las animaciones de los personajes, algo que se nota y mucho. Además el juego no repara en mostrar todo tipo de virguerías graficas, como elementos 3D, renderizaciones, efectos de perspectiva, y demás filigranas para dejar boquiabierto al jugador. Todo el apartados visual de este título es sencillamente impecable, y refleja el cuidado y mimo que se pusieron en su desarrollo. Tanto es así que casi nos atreveríamos a decir que es lo más destacable del juego, especialmente en sus versiones para consolas de 16 bits, donde todo es mucho más meritorio.
Los 4 fantásticos
Y es que hubo nada menos que 4 versiones de este juego, para Mega Drive, Super Nintendo, Mega CD, y Playstation. Esta ultima fue renombrada como 'Mickey's Wild Adventure', debido a la curiosa política que tenía entonces Sony de no llevar a su consola juegos "obsoletos" que la pudieran hacer parecer inferior a la competencia. Tanto es así que este título acabo siendo exclusivo de Europa en la consola de Sony, hasta que hace unos años fue incluido como juego descargable para la Playstation Store en otras regiones. Es de suponer que en Sony pensaron que con cambiar el nombre y la portada del juego ya nadie pensaría que se trataba del mismo título, aunque esto solo le sirvió como excusa para poderlo lanzar en Europa. Cada una de estas 4 versiones ofrece características propias, de modo que repasaremos las diferencias entre todas ellas para que sepáis a que ateneros en base a la que escojáis.
La versión para Mega Drive fue la que inicio todo, ya que fue en base a este sistema sobre el que se hizo el juego. En América salió a la vez que la versión de Super Nintendo, pero en Europa se puso a la venta unos meses antes, haciendo creer a muchos que se trataba de un juego exclusivo de esta consola. De esta edición sorprende especialmente su cuidado aspecto gráfico, especialmente en lo referente al color, pues muestra unos degradados tremendamente suaves y un colorido limpio y nítido Todo se mueve con absoluta fluidez, y con efectos gráficos realmente sorprendentes que incluso muestran pequeños elementos 3D poligonales de gran calidad, como las cajas voladoras del nivel secreto de The Band Concert. En contraparte están las voces digitalizadas de Mickey, que son pocas con respecto a otras versiones y suenan algo carrasposas.
Para hablar de la versión de Super Nintendo nos habría encantado poder hablar de virtudes propias del sistema, pero por desgracia toca hablar de carencias. No sabemos si por tener menor tiempo de desarrollo que la versión de Mega Drive, o por las tensas relaciones entre Sony y Nintendo del momento, tras la debacle del Super NES CD. Pero esta entrega llegó con algunos recortes inexplicables, como la perdida de uno de los dos niveles en los que avanzábamos por una torre en 3D, o la completa omisión del nivel oculto de The Band Concert. También se perdieron algunas animaciones, y el juego en general no daba la misma sensación de fluidez que en otros sistemas. Estas inexplicables carencias apuntan más bien a una desatención por parte de los desarrolladores que a limitaciones del sistema, probablemente por falta de tiempo en su desarrollo para tenerlo listo a la vez que la versión inicial para Mega Drive.
En 1995 llegaba la conversión de este juego para Mega CD, que utilizaba como base la estupenda versión de Mega Drive con todo su contenido. En esta ocasión se aprovecharon las capacidades del CD y su excelente calidad de sonido para incluir una nueva banda sonora de altísima calidad que le daba a todo el juego un toque aun más épico y especial. Además se mejoraron notablemente los efectos de sonido y las voces, hasta el punto de que Mickey hablaba prácticamente a cada paso que daba, comentando lo que iba sucediendo y dándole un toque más vivo y simpático al juego. Otra novedad fue una nueva batalla final que se unía a la ya existente, lo que hacia el enfrentamiento final contra Pete más épico y desafiante, además de encajar así mejor con la historia. No os contaremos lo que ocurre para no fastidiar el final a nadie, así si queréis ver el verdadero desenlace de la aventura tendréis que jugar a esta estupenda versión (o a la de PSX que también lo incluye).
La aventura salvaje de Mickey
La entrega de Playstation fue la última en llegar, y como comentábamos solo se publicó en Europa. Hubo que esperar hasta 1996 para ver esta especie de remake para la consola de Sony, que atesoraba todos los contenidos de ediciones previas, incluida la batalla extra contra el jefe final y la estupenda banda sonora propias de la versión para Mega CD. Además se le dio un lavado gráfico impresionante aprovechando las capacidades de la consola, reemplazando las fases de la torre en pseudo-3D por escenarios enteramente poligonales. Lo mismo ocurre con la persecución del alce, así como el nuevo nivel exclusivo de esta entrega, en el que debemos huir del Gigante Willie. Este nivel se mencionaba en el manual de instrucciones de las anteriores versiones, pero solo se pudo jugar en esta edición para Playstation. Por desgracia y de forma inexplicable se alteró también la jugabilidad del título, haciéndolo aun más difícil y presentando unas físicas menos acertadas y un control que por momentos podía volverse frustrante, especialmente para quienes ya hubieran jugado al juego en 16 bits. Esto es más notable en la parte de la torre en 3D, donde la jugabilidad está muy por debajo de la del original.
En resumen, si valoráis más los gráficos que la jugabilidad, entonces la entrega de Playstation debe ser vuestro objetivo. Además es la más fácil de conseguir ya que fue reeditada hasta en 2 ocasiones en su época, y está disponible para descargar desde la Playstation Store. Encontrar el disco original es sencillo, y recordad que los juegos de la primera Playstation funcionan en cualquier Playstation 3. Si valoráis más la jugabilidad que los gráficos, entonces escoged las ediciones para 16 bits. La más recomendable de todas es la de Mega CD, ya que es la más completa para estos sistemas. Sin embargo la versión de Mega Drive es bastante más fácil de conseguir y más asequible, de modo que si no tenéis Mega CD id a por ella. Si lo que queréis es el cartucho de la edición de Super Nintendo, sabed que no es nada fácil de conseguir, y menos aun completo. Así que si lo veis a buen precio no lo dejéis escapar, pues puede que no sea la mejor versión de todas, pero será un estupendo añadido para vuestra colección de Super Nintendo.
20 años han pasado ya desde que Mickey celebrase su 65 aniversario con esta joya imprescindible para cualquier usuario de uno de estos 4 sistemas, o para cualquiera que pueda descargarlo y jugarlo hoy en día en una de las consolas de Sony gracias a la Playstation Store. Si queréis disfrutar de un buen plataformas de antaño con estos carismáticos personajes, no lo dudéis y haceos con él, pues no lo lamentareis.
Finalmente si ya lo conocéis y buscáis algo nuevo más propio de estos tiempos, recordad que el 'Castle of Illusion Re-Imagined' que salió descargable el año pasado para PS3, 360, y PC, también bebe mucho de este 'Mickey Mania', y de hecho le rinde homenaje en más de una ocasión.