REVIEW

Análisis de 'Phantom Trigger' para Xbox One, una interesante propuesta de acción

Una buena propuesta de corte independiente que combina mazmorras, puzles y una gran dosis de acción.

Por Raúl Manero 26 de Abril 2018 | 22:30

El pasado 20 de abril llegaba a Xbox One 'Phantom Trigger', un videojuego de corte independiente desarrollado por el estudio ruso Bread Team y publicado por tinyBuild, un título que llego el pasado mes de agosto a Nintendo Switch y PC, dando ahora el salto a la consola de Microsoft. 'Phantom Trigger' es un videojuego de acción que combina elementos de otros géneros como los RPG o los roguelike, todo ello mientras recorremos distintas mazmorras, nos enfrentamos enemigos varios y resolvemos algún que otro puzle que nos impide avanzar. No obstante, lo que realmente marca la diferencia con otras propuestas es su historia, realmente interesante. Así que, si queréis descubrir más en profundidad que esconde este título, os invito a seguir leyendo este texto.

Una historia profunda

Lo he comentado brevemente en la introducción, pero si hay algo de 'Phantom Trigger' que consigue engancharte es su historia. Encarnaremos el papel de Stan, un simple oficinista de clase media, casado con una reputada científica llamada Pam, cuya monótona vida da un vuelco por culpa de un misterioso evento relacionado con una traicionera enfermedad. La peculiaridad radica en que la historia de Stan no la iremos conocido de una forma clásica y lineal, si no que se divide entre los acontecimientos que suceden en el mundo real, y una serie de hechos que experimenta su subconsciente después de someterse a un duro tratamiento. Además, todo lo que ocurre en el presente, nos lo van presentando en forma de flashbacks.

Realmente es en su subconsciente donde se libra la batalla más importante, lo que nos permitirá vestirnos de héroe y salvar un universo lleno de mazmorras y peligros que parece evocado a su desaparición. Además, resulta especialmente curioso como se relacionan ambos universos, los personajes que aparecen en uno y otro, el rol que desempeñan, su nombre... Un planteamiento que, inicialmente, parece no tener ningún tipo de sentido pero que, a lo largo de las 7 horas que dura el juego, va hilvanando una fantástica historia.

Un cóctel de géneros

Otra peculiaridad que del título desarrollado por Bread Team es que conmina elementos de distintos géneros, poniendo especial énfasis en la acción, ofreciéndonos multitudinarios combates a los que hacer frente, y otros con mecánicas particulares. Encontramos elementos clásicos de los roguelike donde tendremos que conseguir ir abriéndonos camino a través de las distintas salas que componen las laberínticas mazmorras, así como también toques de RPG en la mejora de las armas y el desbloqueo de nuevas habilidades de combate. Por ejemplo, podremos quemar, atrapar o congelar enemigos.

Para acabar, al juego se le suman una serie de puzles (bastante sencillos de resolver) que acaban siendo la excusa perfecta para ponernos a dar vueltas a lo largo de las mazmorras. Estos suelen ser tareas bastante simples como activar una serie de elementos en un orden determinado, con el arma adecuada. De hecho, incluso hay combates que tienen ese punto de rompecabezas, jugando con los colores de nuestras habilidades para infringir daño, o aprovechando elementos que están o aparecen en el escenario.

Jugando con los colores

Jugablemente, 'Phantom Trigger' ofrece una experiencia bastante gratificante para el usuario que se encentra a los mandos. Cuando manejamos a Stan en su alter ego de "el elegido", tendremos que ir enfrentándonos a distintos tipos de enemigos, cada uno de ellos con unos movimientos determinados. Para ello, tendremos a nuestra disposición distintas habilidades, golpeándolos con una espada, un látigo o un puño, cada uno de ellos infringen un daño particular marcado por un color (azul, verde y rojo) de los cuales tendremos que estar muy atentos, tanto para dañar a los enemigos, como para acabar con determinados obstáculos.

Además, tenemos a nuestra disposición un dash que permite movernos con agilidad y esquivar ataques, así como encadenar combos combinando las distintas habilidades que iremos desbloqueando a lo largo del juego. Todas las habilidades que aprendemos, y el conocimiento que adquirimos del gameplay, lo explotamos en los enfrentamientos contra los jefes finales de los distintos mundos que visitamos; cada uno de ellos con una mecánica y un diseño único. Sin embargo, el sistema de combate también tiene un pequeño punto negativo, y es que a veces los golpes o los movimientos que encadenamos no acaban golpeando al adversario, aunque suele ser en pocas ocasiones que se aprecia este fallo.

Un acabado peculiar pero resultón

Uno de los aspectos que más me llamaba la atención de 'Phantom Trigger', antes y después de haber disfrutado del juego, es su acabado gráfico, el cual podríamos catalogar como pixel art. Sin embargo, no se trata del acabado pixel art más estandarizado, si no que tiene un aspecto gráfico más estilizado, algo que se nota especialmente en los personajes. Además, tanto el personaje que nosotros controlamos, como los enemigos a los que hacemos frente, se mueven con una gran fluidez, y se ve que el estudio responsable ha hecho un gran trabajo en este campo, algo que notaremos, por ejemplo, en el momento de encadenar combos. Pese a todo, en ocasiones el control con el mando no acaba de ser todo lo preciso que debería, y fallaremos algún que otro movimiento.

Cuando nos adentramos en el apartado sonoro de 'Phantom Trigger', juego tiene algunos detalles que me han llamado poderosamente la atención, pero en líneas generales podríamos decir que el resultado final es bastante plano. Partiendo del uso de melodías electrónicas, que nos irán acompañando a lo largo de los distintos mundos que visitemos, hay una serie de efectos de sonido que surgen del uso de distintas armas y ataques (por ejemplo, podremos escuchar un trozo de la famosa melodía de Survivor, Eye of the Tiger). Esto es lo que sería más reseñable, porque los sonidos y melodías acaban haciéndose repetitivos.

Además, estamos hablando de un título que no utiliza ningún tipo de doblaje, independientemente del idioma, tan solo va narrándonos la historia con textos. Unos textos que, en el caso de la traducción al castellano, suele tener errores, alguna palabra que no encaja del todo bien con el contexto, pero, especialmente, problemas en el uso de algún tiempo verbal o en el genero de determinadas palabras. Por ejemplo, es habitual ver que en una misma frase mezclan femenino y masculino. Es cierto que no es la mejor traducción posible, pero esto tampoco os impedirá seguir el desarrollo de los acontecimientos narrados.

Conclusiones

En definitiva, 'Phantom Trigger' no será el mejor juego del catálogo de Xbox One con el que pasar las tardes, pero si sois de esos jugadores que disfrutáis de los títulos de acción, el trabajo de Bread Team es una alternativa bastante para tener en cuenta. No se trata de un juego que reinvente nada, pero esconde una historia lo bastante interesante y profunda, que trata algunos aspectos cotidianos, o al menos más habituales de lo que pensamos, de una forma bastante curiosa y acertada. Además, el acabado gráfico y sonoro es de lo más resultón, combinando un estilo pixel art con melodías electrónicas y distintos efectos de sonido, una combinación que en este caso podemos definir como un éxito.

El apartado jugable sería el aspecto que nos dejaría más dudas en el computo global. Por un lado, nos encontramos con un juego que mezcla la exploración de mazmorras con puzles, toques de rpg, roguelike y muchísima acción que nos brindan los constantes enfrentamientos contra enemigos y jefes finales. Eso sí, en ocasiones los combos y los controles no acaban de ser todo lo preciso que deberían en combate, dándonos algún que otro dolor de cabeza (especialmente en el nivel de dificultad difícil). En total, 'Phantom Trigger' nos ofrece alrededor de 7 horas de juego, con un total de 5 mundos distintos a explorar; pese a todo si tenemos en cuenta que cuesta 14,99 euros, se trata de una alternativa que merece la pena tener en cuenta.