A principios de mes, concretamente el pasado 10 de noviembre, se ponía a la venta 'Need for Speed Payback' la última entrega de la longeva franquicia de Electronic Arts, regresando después de un año de descanso, con el objetivo de recuperar ese halo de grandeza que acompaño a la serie durante muchísimo tiempo. Normalmente, cuando una IP tan importante como esta se toma un pequeño periodo de descanso, suele sentarle muy bien, y sirve para dar un nuevo paso adelante en el futuro de la marca.
En esta ocasión, Electronic Arts le ha cedido la batuta al equipo de Ghost Games, encargados de traernos este 'Need for Speed Payback', un juego del que pueden extraerse cosas muy positivas para el futuro, pero... ¿Estará el título a la altura del nombre y las expectativas de sus seguidores? A continuación, os comentamos las sensaciones que nos ha dejado nuestra visita a Fortune Valley.
Un dulce aroma Hollywoodiense
Lo primero que vamos a hacer es un pequeño repaso de la historia que nos propone 'Need for Speed Payback', la cual considero que está bastante bien, ya que consigue con creces su objetivo de mantener al jugador pegado al mando, y es que la trama principal es un producto made in Hollywood; es decir, tiene ese toque peliculero del cual hemos podido disfrutar en películas como 'Fast & Furiois', con una buena dosis de acción, velocidad, adrenalina e incluso una pizca de humor. Todo ello potenciado por un grupo de personajes protagonistas bastante carismático, estos son: Tyler (quien busca ser el mejor piloto de todos), Mac (un soñador británico que busca vivir el sueño americano), Jessica (la encargada de sacar las castañas del fuego y proteger a sus compañeros) y, por último, Rav (un mecánico cuyo sueño es crear el coche definitivo).
La acción trascurre en Fortune Valley, donde nuestro grupo de protagonistas intentará poner fin al control y reinado de una poderosa banda, La Casa. No vamos a destripar nada de la campaña para quienes todavía no la hayan jugado. Para cumplir nuestro objetivo, necesitaremos ir consiguiendo apoyos de distintas bandas, ¿cómo lo hacemos? Muy sencillo, pues derrotando a estos grupos en sus competiciones predilectas, ya sean carreras callejeras estándar, carreras de campo a través, pruebas de aceleración o pruebas de derrape. Cada una de ellas las protagoniza uno de nuestros tres pilotos, por ejemplo: Ty se encarga de las carreras callejeras y de las pruebas de aceleración, Mac de las pruebas de derrape y las carreras de campo a través; por su parte Jess es la encargada de medirse habitualmente a la policía, así como hacer otro tipo de recados más delicados (gracias a sus contactos).
Como podéis imaginaros, si mezclamos en la coctelera bandas callejeras, una organización criminal, la policía y un grupo de jóvenes "rebeldes", nos encontramos con un cóctel repleto de acción. Así que, si os gustan este tipo de historias, 'Need for Speed Payback' no os decepcionará (por lo menos en este aspecto concreto).
En la variedad está el gusto
Jugablemente, el título de Ghost Games apuesta por ofrecernos un producto variado el cual, en líneas generales, es divertido y entrenado. Como he comentado, tenemos distintos tipos de pruebas que nos exigen llevar un tipo de coche en particular, es decir, no será lo mismo correrá un evento de aceleración, que poner a prueba nuestro control del coche en una competición de derrapes, o simplemente huir de la policía, donde deberemos ir machando coches al más puro estilo 'Burnout'. A todo esto, se le suman una serie de actividades repartidas por el mapa, que sirven como incentivo para conseguir un buen puñado de créditos; aquí encontramos los típicos carteles repartidos y escondidos por el mapa, radares por los que tendremos que pasar a toda velocidad, retos de otros jugadores e incluso coches de desguace (de los cuales deberemos encontrar las piezas en el mapeado). Por su parte, en el multijugador tenemos el regreso de un modo muy demandado por los jugadores, las Speedlists, donde ahora los jugadores tendrán la opción de votar por los eventos que quieren disputar.
Sin embargo, a todas estas alternativas les pesa cierta falta de personalidad, y el interés en ir completando todas ellas, se puede ver menguad a causa del sistema de progresión de 'Need for Speed Payback'. ¿Por qué digo esto? Pues porque nos encontramos con un elemento de niveles, marcado por las piezas de equipo que conseguimos, más digno de un juego de rol que de un juego de coches, lo cual puede hacer que un núcleo importante de jugadores se vea obligado a repetir constantemente una serie de pruebas hasta alcanzar el nivel mínimo recomendado. Yo, sinceramente, no acabo de entender la necesidad de incorporar un sistema de este estilo, aunque tampoco considero que sea algo especialmente negativo. Lo que tengo claro, es que se trata de una forma artificial de alargar el juego, pudiendo afectar a la experiencia final.
Un modelo por pulir
Independientemente del contenido y como está planteado, lo que realmente acaba influyendo negativamente en la experiencia global de 'Need for Speed Payback' es su apartado técnico.
Gráficamente, el juego se encuentra lejos de otros grandes títulos de conducción que hemos disfrutado esta generación (tenemos los casos recientes de 'Forza Motorsport 7' y 'Gran Turismo Sport'), así como también el mundo abierto que ofrece es bastante más limitado que otras opciones que ofrece el mercado (como podría ser el caso de 'Forza Horizon 3'). Los modelados de los coches son bastante parecidos a sus homónimos reales, mientras que la recreación de los distintos escenarios (la ciudad, las zonas más desérticas, etc.) cumplen lo mínimo, pero tampoco resulta especialmente llamativas. Además, nos encontraremos con muchas limitaciones a la hora de movernos libremente por el mapeado (sobre todo cuando intentamos salirnos de las carreteras), una sensación de velocidad un tanto disfuncional (más allá de cuando usamos el nitro no hay diferencias con cambios de coches o incrementos importantes de velocidad), y tampoco veremos una gran afectación en nuestro entorno, ni en el coche al colisionar (aunque si se apreciará cierta degradación del chasis) ...
Y aquí no acaba la cosa. El juego arrastra importantes problemas de popo-in (te pueden aparecer perfectamente camiones o coches en la cara), mientras vas avanzando puedes ver perfectamente como cargan texturas del entorno o, incluso, como aparecen las líneas de la carretera. A todo esto, se le añaden unos tiempos de carga bastante extensos (especialmente cada vez que iniciamos la partida), nos encontraremos con alguna caída ocasional del framerate, cierta borrosidad en el horizonte...
A todo esto, que no es poco, se le suma un control algo tosco, aunque fácilmente controlable, lo que al tratarse de un título tan arcade, no acaba siendo un gran inconveniente cuando cogemos el volante. Lo que si se echa un poco de menos es un sistema de físicas más completo, el cual nos permita disfrutar de una conducción algo más exigente, con una mayor diferencia entre los distintos vehículos, un comportamiento más normal sobre el asfalto, que tengan alguna consecuencia los golpes, etcétera. Aún así, este último punto es defendible, al no buscar 'Need for Speed Payback' esa propuesta más realista, sino todo lo contrario.
Conclusiones
'Need for Speed Payback' está lejos de convertirse en el título de referencia que todos los fans de la franquicia querrían, pero, eso no quita para que en líneas generales sea un juego bastante espectacular y divertido, con el cual podrán disfrutar todos los fans de la conducción más arcade. Si tengo que destacar algo concreto del título desarrollado por Ghost Games, es su trama principal, la cual consigue mantener el interés del jugador en todo momento, con misiones de lo más animadas (la mayoría de ellas realmente espectaculares). Estas pruebas son protagonizadas por un grupo de personajes (Tyler, Mac y Jessica) bastante carismático, cada uno de ellos con sus peculiaridades y con un estilo de conducción distinto, pero que juntos logran complementarse a la perfección. Además, nos encontramos con una propuesta variada de competiciones (con propuestas como las carreras de aceleración, derrape, huida de la policía), sumado a distintas actividades para realizar por el mapeado (por ejemplo: derribo de carteles, radares o buscar coches abandonados).
En su contra juega, principalmente, un acabado técnico y un gameplay muy lejos de los grandes referentes actuales del género de conducción. Por un lado, nos encontramos con unos coches que no consiguen aportar del todo bien esa sensación de velocidad indispensable en un juego de estas características, así como un control un tanto tosco, y un sistema de físicas cuanto menos peculiar (que sale a relucir en colisiones, derrapes, etc.). Aunque alguno de estos hechos podemos pasarlos un tanto por alto si tenemos en cuenta que se trata de una propuesta arcade. Lo que no podemos pasar por alto es su acabado técnico, si bien el mapeado luce bastante bien, con unos modelados de vehículos bastante fidedignos (aunque solo hay 77) y una buena iluminación; nos encontramos con problemas muy importantes de pop-in, alguna caída de fps ocasional, tiempos de cargo importantes (principalmente al iniciar el juego), también veremos como cargan texturas en nuestras narices... Como veis, en este sentido el título todavía parecía tener un importante margen de mejora.
Luego también nos encontramos con decisiones que son difíciles de catalogar, como el sistema de progresión de 'Need for Speed Payback', el cual aporta un toque rolero al juego, pero no acaba de resultar del todo satisfactorio. Para poder acceder a las pruebas nos requerirán un nivel determinado, el cual se consigue con distintas piezas que recolectamos superando pruebas. Esto lo único que hace es que en distintas ocasiones nos obliguen a repetir misiones para conseguir el equipo adecuado, haciendo algo más pesado el progreso.
Pese a todo, aquellos jugadores que os guste la velocidad, y hayáis disfrutado de las últimas entregas de esta franquicia, o simplemente os gusta la conducción arcade, 'Need for Speed Payback' os mantendrá enganchados durante un buen puñado de horas.